La mayoría de la gente tiene esa misma sensación y se queja en voz alta; el tiempo pasa demasiado rápido…
Dicen que, según los mayas, este sentir, más los cambios y crisis personales y globales que están sucediendo tienen que ver con el «fin de la Cuenta Larga Maya» y el inicio del «nuevo tiempo planetario».
Viendolo de forma práctica es un tiempo para encontrar el equilibrio. Es el momento y oportunidad para la RENOVACIÓN.
Tenemos que adecuarnos a la nueva frecuencia de Luz y Amor que está entrando en el planeta. Es una energía creadora que se mueve en espiral y hace de impulso para que percibamos en nosotros el deseo y la necesidad de renovarnos.
No hace falta razonar nada; sintamos el anhelo de transformación y de armonizar nuestra existencia. Éste es un buen momento para darle un sentido trascendental a nuestra vida.
Vamos a ponernos en marcha para simplificar nuestra vida y reordenar nuestras prioridades dedicándole más tiempo al recogimiento y a la introspección.
Cuando oímos hablar sobre el tránsito de la 3Dimensión a la 4D y 5D, e intentamos imaginar qué cambios habrán en el mundo, creyendo que los cambios sucederán en el exterior, ajenos a nuestro hacer, estamos equivocados.
Somos nosotros los que cambiamos de dimensión espiritual haciendo una transformación (purificación) en nosotros. El exterior seguirá siendo el mismo y cada uno lo vive desde su realidad e ilusión. Para la persona que vive descentrada y alejada de su ser esencial, el mundo seguirá siendo inseguro y cruel. Para la persona que vive desde el corazón y desde su ser, su experiencia de vida está en el servicio a los demás desde la protección del Amor Divino.
Vamos a sintonizarnos y sincronizarnos con la energía universal desde la meditación y la introspección, en estos momentos claves de grandes oportunidades de impulso cósmico, para beneficio de nuestro Ser.