Diferenciar Alma de Espíritu

Todos tenemos una Conciencia personal, local; «de andar por casa». Pero nos conviene saber que también existe la Supra-Conciencia y la Conciencia Universal de la que formamos parte para que aspiremos alcanzarlas y beneficiarnos de lo que ya somos en su totalidad.

El Alma contiene nuestra historia, no nos abandona ni después de la muerte. Es como nuestra guardiana silenciosa; no se entromete, no enjuicia. Se encarga de recopilar los hechos de nuestras vidas -nuestro historial- que nos serviría de mucho a la hora de hacer recapitulación de nuestros actos, para nuestro aprendizaje y evolución.

El Espíritu (Supra-Conciencia) es la expresión auténtica de nuestra esencia e identidad y se expresa cuando despierta en nosotros el sentido de unicidad con la Conciencia Universal.

Desde la comprensión y entendimiento de estas profundas verdades -que están en cada uno de nosotros- es que conseguimos clarificar nuestra Mente llevándola hasta la lucidez de la Intuición y purificar así nuestro corazón de toda emoción y sentimientos negativos, como la codicia, envidia, ira, despecho, egoísmo, etc., para salir, cada vez más rápido de los niveles bajos de Conciencia.

Aspiremos a tener una vida de calidad, son cuatro días. Seamos agradecidos. Seamos impecables.

La Maga

El atributo de Maga lo tiene quien no se exige a si misma perfección sino aceptación, lucidez y disposición a hacer cambios.

La Maga ha aceptado a ser el recipiente alquímico de la vida para que se haga en ella la voluntad del Creador Supremo y del Universo.

Se arriesga. Sabe que tiene la fuerza para enfrentar cualquier desafío. Ha asimilado la información, ha incorporado en sí la Luz en forma de fuerza creadora. Su acción está en manifestar y compartir. Su movimiento es suave; ha venido como Facilitadora.

La Maga conoce el Amor que abarca toda forma de energía. Para ella, todo tiene Conciencia y honra la misión de vida, sabiendo de que pertenece a la Madre Tierra y está al servicio de la voluntad de la Madre Divina..

La Maga siente somos energía. No toma decisiones basadas en opiniones. Sabe del poder de la Intuición, de las energías superiores que nos inspiran y nos guían, en las que podemos dejarnos fluir.

Ser Maga o Mago, entraña determinación y amor por uno mismo y la necesidad de libertad del Ser esencial.

Me he visto en el campo astral como la Maga. Me he reconocido en ella y mi corazón ha palpitado emocionado. Este reconocimiento requiere de responsabilidad, compromiso y entrega.

Tratamiento a distancia

El nivel de vibración y Conciencia planetaria ha aumentado y REIKI brinda las herramientas ideales para que nos sincronicemos con las energías cósmicas actuales. Esto nos ayudará a tener una mayor claridad mental.

La capacidad de ser Canal es una habilidad que todos podemos desarrollar. Abrirnos a la INTUICIÓN nos puede facilitar la vida de manera que ni imaginamos. Esto implica lograr un estado de Conciencia superior que, para empezar, mejora nuestra salud física, mental y emocional.

RECIBIR REIKI A DISTANCIA es una de las maneras que REIKI tiene para sanar y abrirse a la auto-sanación. También para experimentar algo que está fuera de toda lógica: experimentar la energía y sus efectos, visionar otras dimensiones de nuestro Ser, sentir que podemos movernos hacia una frecuencia vibratoria superior.

REIKI A DISTANCIA es tan poderoso como cuando es presencial y sigue un proceso de sanación y transformación a todos los niveles. Al ponerte en contacto con la energía pura del amor incondicional te traerá la información que precisan tus células y ADN, reordenará tus centros energéticos y potenciará tu energía vital.

Como dijo el maestro Osho » Estar enfermo significa estar desconectado de Todo».

Cuando el Alma se deja ver

Me voy olvidando hasta de mis gustos. Puede parecer algo impuesto, como si la mente me retase: «deshazte de más», «vacíate de todo apego», … pero no es mi mente quien lo ha planeado así.

El ver cómo todo se va diluyendo hace que me pregunte a veces qué es lo que quedará. ¿Es que acaso los placeres son malos?

Pero, ni siquiera eso, cada vez son más sutiles los pensamientos. Sólo el Alma y el corazón están presentes.

Cuando la Conciencia aquieta a la Mente sucede una transformación; el Alma se deja ver.

La Conciencia está ligada a la Intuición. Abrir los ventanales de la Intuición hace que se amplíe la panorámica de nuestro mundo y el horizonte pierda los límites que la mente había creado.

Las limitaciones del conocimiento mental comienzan a tambalearse y la Conciencia nos muestra de refilón la sabiduría intuitiva que fluye sin límites … y comenzamos a maravillarnos … puede que aparezca el Miedo, que siempre teme perder algo o se asusta de lo desconocido … pero también él desaparecerá.

Esta sabiduría innata que nos sostiene y no permite que nos corrompamos ni degeneremos o nos degrademos, debe ser reactivada. Se trata de la Presencia divina; nuestra Alma con toda su Luz.

Vivamos desde y en la Presencia divina, que emana desde el centro sagrado de nuestro corazón y conseguiremos vivir acorde a nuestra naturaleza de manera fácil y desde la preciosa serenidad del Alma.

La pregunta no es porqué

Las preguntas surgen desde el contacto de la piel con el sonido de la vida que vibra fuera y dentro de ti y te magnetiza a ella. Al sentir el tacto de tu Ser con el espacio que te hace ilimitado, surge el deseo de saber más de ti.

Situarte vivamente en tu mundo y explorar todos sus rincones, te lleva toda una vida de instantes de inspiraciones intuitivas.

Cada montaña de dolor que escalas te hace descubrir las inmensas fuerzas encerradas en ti que te hacen seguir adelante.

Cada río de risas y llantos que cruzas. Cada puente de esperanzas que construyes ante los desalientos. Cada casa que haces habitable en tu corazón desde el perdón. Cada vez que dejas atrás los apegos. Y cada alimento de amor que compartes. Todo eso va formando el mapa de tu travesía, que queda marcado también en tu piel.

Preguntarte porqué, desdibujaría tu realidad. No son válidas las interpretaciones.

Pregúntate mejor Cómo es que la intuición ilumina y consigue colorear de verde tu paisaje. De qué manera el Sol interior matiza y filtra los tonos más luminosos cuando aceptas lo que aparece en tu vida.

Maravíllate al reconocer la respuesta, de que es el Amor el hacedor de toda Belleza en ti y alrededor tuya.

Lo que elegimos desde el riesgo.

Arriesgarse es lo mismo que confiar plenamente en uno mismo. Arriesgar es comprometerse con la vida, desde la valentía de quien lo entrega todo más allá de lo evidente y seguro materialmente. Lo contrario, pero sólo aparentemente igual, podría ser imprudencia e impulsividad.

El riesgo, elegido desde la Conciencia de lo correcto, lleva el éxito consigo. El desafío no tiene que tener un resultado visible e inmediato. Puede perfectamente darse en forma de aprendizaje y llevarnos a un nivel superior de comprensión aunque aparentemente dé la impresión de fracaso.

Aventurarse a ser feliz y vivir en paz con uno mismo, haciendo lo que uno desea hacer, parece irreflexivo, egoísta y temerario en una sociedad competitiva, y codiciosa.

Pero lo que elegimos ser, desde el riesgo a sentirnos incomprendidos y criticados, es fácilmente superable cuando nos amamos a nosotros mismos y confiamos en nuestra intuición.

La Quinta Dimensión

Cuando se habla de la tercera, cuarta y quinta dimensión se refiere a los distintos niveles de Conciencia, cada uno de ellos vibrando a una velocidad determinada y distinta.

¿Y qué es la Conciencia? Es la cualidad de nuestro espíritu de reconocerse en sus atributos esenciales. Es la voz interior que nos guía en lo correcto. Es el conocimiento exacto que no pasa por la Mente y es registrado en el corazón.

La lucidez, la intuición y el discernimiento son facultades de la Conciencia que se asienta en el Tercer Ojo. Para expandir nuestra Conciencia podemos hacer un trabajo interno para abrir, desarrollar estas facultades y elevar nuestra vibración.

Subamos nuestra frecuencia. No amemos más desde la Mente. Esto sólo nos crea desilusión y frustración. El AMOR nace en el corazón. La energía del Amor es la que nos sostiene y nos da fuerzas, es la que nos sana emocionalmente. Comencemos por estar en paz con nosotros mismos.

Vivir en la TERCERA DIMENSIÓN es vivir en la dualidad y el sufrimiento. Los pensamientos de duda e inseguridad dominan la mente que aprovecha para crear miedo e inestabilidad mental y emocional.

Pasar a la CUARTA DIMENSIÓN es cuando comenzamos a tener conciencia de nuestras emociones y pensamientos y trabajamos para controlarlos. Dejamos de reaccionar y echar la culpa a los demás. Nos responsabilizamos de nuestra felicidad.

Entramos en la QUINTA DIMENSIÓN cuando ya somos capaces de trascender el Plano terrenal y nos deshacemos de nuestra parte egoísta para experimentar la compasión por los demás. Sentimos que somos una UNIDAD viva junto con toda la Humanidad y todo el Universo. Es la dimensión del AMOR INCONDICIONAL, la Energía Divina.

La Conciencia es LUZ. Todos somos LUZ.

Seres de buena voluntad

Las energías mentales negativas arrastran hacia el fondo donde residen los miedos. Las actitudes negativas rechazan los cambios y se mantienen en la queja y la crítica. Las actitudes positivas acogen, comparten, dan lo mejor de sí mismas.

La mente se desarrolla y se convierte en Voluntad. Seamos de los seres de buena voluntad que están por la labor de crear el cambio; para transformar el odio y el egoísmo en Amor y la ignorancia en Conciencia.

Moldeemos la mente y pongámosla al servicio del Yo Superior para que seamos transmisores de valores eternos y soluciones justas.

Aprendamos a accionar desde el Ser divino en nosotros para que el civismo y la responsabilidad social iluminen las sociedades por iniciativa espontanea y no por imposición.

Hagamos para corregir y purificar nuestro Ego y es así como estamos creando una conciencia colectiva que nos impulsa a evolucionar.

Comencemos a cambiar en nosotros lo más evidente que nos está estorbando para nuestro crecimiento y así resultará fácil todo el proceso de purificación a todos los niveles en nosotros y de forma colectiva.

Hagámonos conscientes que es el Miedo nuestro mayor enemigo; soltémoslo, no nos pertenece.

El Amor deshace las impurezas. Que nuestra actuación sea consciente, reflexiva, intuitiva, con perceptiva.

Comprender quienes somos

Descubrir la identidad de nuestro Ser

La sanación emocional comienza por el conocimiento de uno mismo. A lo largo de nuestra vida hemos construido una «falsa» identidad que nos ha ido separando de nuestra verdadera naturaleza y esencia. Esto nos hace sentir vacíos o infelices … Se hace preciso pararnos, deshacer lo que no nos pertenece y reconstruirnos. Se trata de un proceso que tiene varias etapas.

En las primeras etapas hace falta voluntad, disciplina y esfuerzo. Además de dedicación y perseverancia. ¿Y por qué se hace difícil? Justamente porque crecemos sin estos valores y nuestra Mente es débil y está asilvestrada … Volver a reconducir la Mente y enseñarla a pensar y fortalecer la voluntad es una tarea ardua. Requiere de unja INTENCIÓN fuerte.

Si consigues superar esta primera etapa, despertará la Conciencia y el anhelo de seguir adelante. Ya no hay marcha atrás. Ya has comenzado a sentir los beneficios que trae ser dueño de tu vida.

En las siguientes etapas ya te dejas fluir. No hay más resistencias. Te darás cuenta de que has dejado de justificarte y que tomas tus decisiones con mayor fuerza y claridad mental.

Los cinco sentidos están más alertas y se han desarrollado:

Escuchas sin interpretar.

Observas sin juzgar.

Hablas desde el respeto y la amabilidad.

Abrazas más.

Degustas la vida.

La intuición se ha despertado.

Estamos en continua transformación. Comprender quienes somos es el primer paso para conseguir la paz interior.

Corregir la percepción

Olvidémonos por unos momentos de nuestra identidad personal y creencias añadidas (sin experimentar por nosotros mismos) para así poder romper con las estructuras pesadas y rígidas de nuestra mente domesticada.

La naturaleza de nuestro ser esencial es otra cosa bien distinta. El Ser no se identifica con los hábitos y conceptos complejos a la que la Mente ha sido sometida. El ser esencial vibra con el Alma a otros niveles, donde la intuición se encarga de deshacer toda ilusión para ponernos en contacto con nuestra realidad dentro del Orden Cósmico al que pertenecemos, lo sepamos o no.

La INTUICIÓN, que se despliega en el Tercer Ojo, agrega Conciencia a nuestro Ser a través del conocimiento directo, transformándolo en certezas, despejando así todo el campo de posibilidades al que podemos aspirar, una vez liberados de todo condicionamiento y apegos.

Cuando se llega a ese nivel de Conciencia, donde ya no existe ninguna duda, experimentamos que no queda nada fuera de nosotros mismos. Se trata de la aceptación de la realidad que hemos conseguido percibir en su totalidad.

El Universo te tiene en cuenta… y lo sabes.