Ser uno mismo.

Para conocernos a nosotros mismos debe despertar la Conciencia. Debe estar presente la intención del Observador en nosotros.

Uno mismo es quien es desde el Ser que lo habita. Pero este Ser -nuestra Alma y Espíritu- está bajo tantas capas de condicionamientos, restricciones sociales, limitaciones educativas, religiosas, etc., que en la mayoría de los casos no se le llega a conocer en vida.

Quien somos en esencia, se distingue principalmente por los valores más elevados; la impecabilidad. Impecable es lo que no tiene defecto alguno.

Te vuelves impecable cuando conoces y crees en el poder de tu Ser. Y cuando sientes esa fuerza interior y la reconoces como tal, es cuando te vuelves impecable. No tiene nada que ver con la Mente; no se razona, se es. Muchos hablan de «empoderamiento» pero lo hacen desde el Ego y eso es desastroso.

La impecabilidad trata de salvaguardar tu dignidad humana, quien eres, tu ser esencial; sin doblegarla, ni venderla, ni cederla, por nada.

Ella no tiene nada que ver con tu orgullo personal que viene del ego/mente. No se trata de servir intereses o perseguir éxitos materiales. Hablamos de valores que están muy por encima del ser humano común y corriente, estos valores perteneces al Alma y al Espíritu; a la Conciencia Superior.

Reflexionemos sobre ello. Movámonos hacia nuestro interior.

¿Cómo hacerse sabio?

Si quieres dejar de sufrir, hazte sabio. Y sabio es quien tiene una conducta prudente.

Siendo un simple Observador. sin que te afecte el entorno. Al no necesitar reconocimiento ni aprobación, la opinión de los demás no te sacará de tu estado de calma y paz contigo mismo.

No es necesario entrar en discusiones, tienes claro quien eres y aceptas las distintas creencias sin que te alteren ni te saquen de tu centro.

No te importe ser condescendiente; nada es más importante que tu paz interior y ser amable con los demás.

El silencio es parte importante de tu actitud contemplativa y serena. El silencio te lleva, hacia adentro, a reconocer tu Ser esencial, y poder beber de la Fuente de Amor Puro dentro de tu corazón.

No hay tensión ni represión; te comunicas y expresas desde el Amor, teniendo entendimiento hacia los demás, sabiendo que cada uno vive desde su nivel de comprensión y Conciencia. Aceptamos.

Sólo deja fluir el espíritu que es Luz y es Conciencia unida a lo Superior.

Esta es la sabiduría que, alcanzándola, nos hace sentirnos plenos.

Gestiona tu vida

Lo que determina tu vida, tu felicidad, tu día a día, es cómo gestionas tus pensamientos y emociones.

Desde el momento en que te haces dueño de tu vida, en que comienzas a vivir conscientemente, sabiendo que es tu actitud la que establece y fija los términos de que tus días sean claros u oscuros, amables o llenos de obstáculos, agradables o difíciles …

… desde ese día en que te has hecho Observador de ti mismo: del personaje que carga con toda una serie de condicionamientos, prejuicios, traumas, complejos, culpas, miedos … (uufff) y consigues separarte de él.

… entonces, decides. ¡Tomas la decisión más importante de tu vida! Tramitar tu independencia. Gestionar tu vida, comenzando por deshacerte de todo la carga del pasado.

Emprendes un nuevo Camino: ser feliz desde el corazón. Tomar las riendas de tu vida.

Cada día te paras unos momentos para estar contigo. Respiras hondo y despacio; te tomas tu tiempo para ir hacia adentro, reconocerte, perdonarte, ponerte de acuerdo contigo mismo.

Vive en resonancia con tu ser esencial. No hay otra forma de vivir la vida.

Seres de buena voluntad

Las energías mentales negativas arrastran hacia el fondo donde residen los miedos. Las actitudes negativas rechazan los cambios y se mantienen en la queja y la crítica. Las actitudes positivas acogen, comparten, dan lo mejor de sí mismas.

La mente se desarrolla y se convierte en Voluntad. Seamos de los seres de buena voluntad que están por la labor de crear el cambio; para transformar el odio y el egoísmo en Amor y la ignorancia en Conciencia.

Moldeemos la mente y pongámosla al servicio del Yo Superior para que seamos transmisores de valores eternos y soluciones justas.

Aprendamos a accionar desde el Ser divino en nosotros para que el civismo y la responsabilidad social iluminen las sociedades por iniciativa espontanea y no por imposición.

Hagamos para corregir y purificar nuestro Ego y es así como estamos creando una conciencia colectiva que nos impulsa a evolucionar.

Comencemos a cambiar en nosotros lo más evidente que nos está estorbando para nuestro crecimiento y así resultará fácil todo el proceso de purificación a todos los niveles en nosotros y de forma colectiva.

Hagámonos conscientes que es el Miedo nuestro mayor enemigo; soltémoslo, no nos pertenece.

El Amor deshace las impurezas. Que nuestra actuación sea consciente, reflexiva, intuitiva, con perceptiva.

Poner la Mente en su sitio

Vivimos la vida desde la Mente. Y mientras vivamos desde la Mente estamos atascados en el mundo de la dualidad y la ilusión.

Si la Mente es débil y dominante a la vez, nos frenará a experimentar lo nuevo: los miedos se forman en la Mente.

Somos capaces de crear monstruos que nos acosan. Pero también somos capaces de sembrar Luz con el pensamiento.

Tenemos la capacidad de ser transmisores y receptores de energía para hacer y atraer el Bien. Como, por el contrario, podemos ser manipuladores y crear los más sutiles impedimentos mentales que no nos dejen avanzar.

La toma de Conciencia de cómo funciona la Mente y llegar a experimentarla nos lleva a profundizar en nosotros mismos y nuestra realidad. Pero para ello tenemos que ser valientes, lanzados, atrevidos …

La gran trampa está en querer «ver» desde la Mente. Hasta que no consigamos salir de la Mente estaremos atrapados por ella.

Y ella nos ha enseñado a mentirnos, a falsear la realidad, a engañarnos justificándonos continuamente. Nuestra insatisfacción y conflicto viene de ese sometimiento al mundo ilusorio creado por la Mente no desarrollada.

Así que, vamos a renovar las creencias que tenemos de nosotros mismos. Y como es más fácil saber qué NO soy, vamos a ir descartando qué no soy y qué no quiero más en mi vida.

Para quedarnos desnudos finalmente como el Ser esencial que somos; que tiene una Mente a su servicio …

¿Podemos experimentar al Ser? Si, cuando logramos salir de la Mente.

A eso le llamamos LIBERACIÓN.

REIKI. Imposición de manos.

La capacidad de ser Canal de sanación es una habilidad que puede aprenderse. Ser Canal implica lograr un estado de Conciencia elevado que te ayuda a conectar con la Fuente del Amor y Verdad en nosotros, en el servicio a los demás.

Aprendemos a través de REIKI a purificar nuestras energías para tener una mayor frecuencia vibracional. En este proceso de desarrollo humano iremos creando nuevas actitudes, una visión más clara, un fuerte nivel de confianza en nosotros mismos, un estado de plenitud estable y una conexión permanente con nuestro ser esencial.

Esto significa, entrar progresivamente en planos superiores de la cuarta y quinta dimensión, al liberar el Conocimiento intuitivo, que se encuentra en el Tercer Ojo.

REIKI no solo es un sistema de sanación natural. Se trata de una práctica que respeta y reconoce tu divinidad, sea cual sea tus creencias religiosas. y por encima de ellas te lleva a que tu corazón sintonice con el pulso del Universo, para fortalecer tu espiritualidad.

Haciendo a diario el ejercicio del REIKI de alineación de los chakras, conseguimos limpiar, desbloquear, armonizar y reactivar nuestro cuerpo energético, desbloqueando nuestro Canal Central que va a lo largo de la columna vertebral para poder recibir cada vez más energía refinada (Prana). Todo ello se traduce en más paz interior y estabilidad emocional.

Experimentando todo ello constatamos que con el REIKI se inicia un proceso de transformación, despertando la Conciencia y evolucionando como seres humanos, de forma sencilla y natural.

La capacidad de maravillarse

La capacidad de maravillarse, lamentablemente, se pierde con la edad. Mientras va quedando atrás la inocencia.

La Inocencia, es una parte de nuestro ser esencial; es nuestro niñx interior.

En la terapia regresiva se trabaja el niño interior. Es importante ir a buscarlo y traerlo con nosotros a nuestro presente.

Significa la recuperación de nuestra capacidad para asombrarnos y maravillarnos, tan necesaria, porque se trata de un estado de Alegría que nace dentro y no tiene nada que ver con lo que nos brindan otros o las cosas del exterior.

El asombro tiene que ver con la fascinación.

Tener capacidad es tener el espacio suficiente y estar apto para la espontaneidad. Podemos trabajar ambas cosas; tener capacidad y hacernos aptos para vivir la maravilla de la inocencia en nuestro presente.

REIKI, infinita sabiduría

No tenemos la suficiente paciencia ni perseverancia para ahondar en un conocimiento hasta alcanzar la maestría. Nos cansamos rápido, perdemos interés. La Mente es débil y caprichosa. No hay suficiente energía vital para alimentar la voluntad y la disciplina necesaria para desarrollarnos como seres multidimensionales que somos.

Hará unos diecisiete años obtuve la maestría en REIKI. Desde entonces prácticamente a diario hago el ejercicio de alineamiento de los chakras y me conecto con mi Ser. Es la mejor decisión que he tomado en mi vida y me siento agradecida de que estuviese a mi alcance.

He iniciado a muchas personas y algunas de ellas también se han hecho maestros. Compartir la enseñanza que brinda el REIKI no es fácil a no ser que la otra persona esté abierta a percibir más allá de las palabras.

REIKI es una herramienta para entrar en el mundo interior y conectar con las energías superiores. También podríamos decir que es un Camino para llegar hasta el Maestro interior y recibir un conocimiento directo. Es, igualmente, una filosofía de vida que te lleva a trascender el mundo material y te permite entender y experimentar que somos energía y podemos trabajar para subir nuestra frecuencia y vibración en beneficio de nuestra Conciencia.

La divisa del REIKI siempre es estar al servicio de los demás. REIKI es la energía sanadora del Amor Incondicional. Primero trabaja en uno mismo para poder llegar a esa comprensión y experiencia de compasión.

Por eso hace falta PACIENCIA y anhelo de purificar los sentimientos para así elevar nuestra propia condición, desde el corazón. Cuanto más se avanza más se simplifica la vida. Se siente con total claridad que no somos este cuerpo ni somos la mente … el Alma y la Conciencia tienen prioridad sin lugar a dudas.

Todos pueden alcanzar un elevado conocimiento de sí mismos a través del REIKI y esto supone deshacerse de los sufrimientos y conflictos que conlleva la inconsciencia y el alejamiento de nuestro Ser esencial.

Corregir la percepción

Olvidémonos por unos momentos de nuestra identidad personal y creencias añadidas (sin experimentar por nosotros mismos) para así poder romper con las estructuras pesadas y rígidas de nuestra mente domesticada.

La naturaleza de nuestro ser esencial es otra cosa bien distinta. El Ser no se identifica con los hábitos y conceptos complejos a la que la Mente ha sido sometida. El ser esencial vibra con el Alma a otros niveles, donde la intuición se encarga de deshacer toda ilusión para ponernos en contacto con nuestra realidad dentro del Orden Cósmico al que pertenecemos, lo sepamos o no.

La INTUICIÓN, que se despliega en el Tercer Ojo, agrega Conciencia a nuestro Ser a través del conocimiento directo, transformándolo en certezas, despejando así todo el campo de posibilidades al que podemos aspirar, una vez liberados de todo condicionamiento y apegos.

Cuando se llega a ese nivel de Conciencia, donde ya no existe ninguna duda, experimentamos que no queda nada fuera de nosotros mismos. Se trata de la aceptación de la realidad que hemos conseguido percibir en su totalidad.

El Universo te tiene en cuenta… y lo sabes.

Regresar a uno mismo

Regreso a mi ser esencial en vida. Vuelvo a ser quien soy.

¿Es eso posible?

Al emprender el Camino que tu Conciencia te ofrece y guía, puedes conseguirlo.

En el momento en que rompes con toda resistencia del Ego, puedes conseguirlo.

En cuanto la sencillez predomina en ti de forma natural, puedes conseguirlo.

Cuando la paciencia es tu mayor virtud y ya es parte de tu esencia, puedes conseguirlo.

La confianza absoluta en un Orden Superior y Universal, la Compasión como estado interior esencial, todo ello ayuda para que puedas conseguirlo

.¿Y qué significado tiene regresar a tu ser esencial?

Ser tu mismo en unión con el Todo.