Chakras inferiores y superiores

chakras despertar

Los chakras inferiores alimentan a los superiores con energía vital, mandándole información sobre el mundo exterior, a través de la experiencia. Se trata de energía movilizada por los sentimientos y las emociones.

Los chakras superiores cumplen la tarea de organizar y ordenar las funciones de los chakras inferiores, creando prioridades, clarificando ideas, creando Conciencia…

Si no fluye suficiente energía vital entre todos los centros energéticos, se bloquearán a medias o enteramente las funciones, ocasionando enfermedades.

Somos energía y la energía vital y Prana (energía más sutil) debe fluir correctamente en nuestro cuerpo físico, mental/emocional y espiritual, para que estos centros energéticos cumplan con su trabajo; por una parte conectándonos con nuestro espíritu y ser esencial y por el otro lado haciéndonos responsables de la supervivencia a nivel terrenal.

La energía debe estar equilibrada; tener más de la que podemos soportar nos creará intranquilidad e inquietud. Tener menos de la que necesitamos hará que no tengamos voluntad ni fuerzas para lidiar con el día a día, como tampoco claridad mental.

Demasiada energía en los chakras inferiores nos puede producir fiebre, depresión, inflamaciones, ira, enfados irracionales, fuertes tensiones; éstas son válvulas de emergencia para deshacernos de los excesos de energía.

Demasiada energía concentrada en los chakras superiores crea tensión en el cerebro y puede producir migrañas, pesadez mental, mente dispersa y agotamiento mental.

Las energía en los siete centros energéticos principales, que están en nuestro cuerpo astral, deben estar alineadas y fluir a lo largo de la columna vertebral.

Si quieres tener una buena salud física, mental y emocional, hazte consciente de tu cuerpo físico. Cierra los ojos y respira conscientemente, llevando tus cinco sentidos hacia tu interior. Centra tu atención en tu respiración, suave, lenta y comenzarás a relajar todos tus músculos. Pon la intención de desear revitalizar cada célula de tu cuerpo, cada órgano, -con cada respiración- al inhalar, entra Luz sanadora por tu coronilla y la expande por todo tu cuerpo. Y al soltar el aire, permites que tus células y órganos, la reciban y la absorban, purificando así tu cuerpo hasta sentirte pleno/a.

Eres el dueño de tu vida, de tu salud y felicidad. Muéstrate agradecido.

Siete diferentes energías de las que podemos beneficiarnos.

Somos energía y nos beneficiamos de 7 diferentes tipos de energías, pero para ello tenemos que utilizarlas de manera consciente. Sería bueno aprender cómo actúan los chakras (Centros energéticos) y la influencia que ejercen en el plano físico y también en nuestro cuerpo etérico y astral. Todo ello para empezar a entender que los diferentes niveles de conciencia son, la fuerza de la vida vibrando en diferentes frecuencias… y darnos cuenta de que los desequilibrios emocionales pueden manifestarse en el cuerpo físico como una enfermedad o que, simplemente, la desarmonía ( exceso / déficit) de las diferentes energías nos llevan a un conflicto con nosotros mismos, a sentir ansiedad o desdicha sin causa aparente.
Entendamos pues un poquito más sobre nosotros:

La primera es la energía que nos llega a través de la respiración. La inmensa mayoría de las personas respiran automáticamente, sin prestar atención. Pero ésta es la función más importante del ser humano ya que, además de oxígeno y otros componentes, absorbemos «prana» o energía vital.
Vamos a re-educar nuestra forma de respirar; haciéndola consciente y rítmica. Respirando desde el abdomen. Conscientemente absorber prana, sentir cómo se expande en nuestro interior y devolver al universo (en la exhalación) la que no necesitamos. Es como una meditación activa, en contacto con la energía universal.
Tres respiraciones conscientes al despertar y al ir a dormir van a empezar a armonizar nuestros chakras.

La segunda es la energía que nos llega a través de la alimentación. «Somos lo que comemos» es un dicho conocido en todo el mundo. Cuidar nuestra alimentación es respetar y amar nuestro cuerpo físico de manera consciente.
Consumir alimentos frescos e integrales a ser posible, beber agua, tés o tisanas. Y si somos lo que comemos, nos cuidaremos de no ingerir alcohol, químicos ni drogas de ningún tipo. Bendecir la comida es también una costumbre recomendable pues energetiza el alimento antes de ingerirlo.

La tercera es la energía Telúrica-Cósmica. La tierra, como ser vivo, emite una energía proveniente de sus capas magnéticas subterráneas. De manera natural se absorbería por los pies, pero hoy en día esto se hace casi imposible debido al calzado.
Caminar descalzos por la hierba, la tierra y piedras o la arena de la playa nos permite descargar las energías negativas y absorber las positivas.

La cuarta es la energía Astral-Espiritual. Estas energías residen en la cuarta dimensión y depende de nuestra actividad astral y de nuestra conexión con el mundo imaginal a través de los sueños.
Forma el hábito de «desconectar» antes de dormir; haz respiraciones conscientes, relájate y programa los sueños. El subconsciente actúa recibiendo órdenes.

La quinta es la energía Mental-Psíquica. La mente o la diriges tú o ella de gobierna de manera distatorial. Este tipo de energía es ilimitada y de un poder que la persona común ni siquiera puede imaginar su alcance. Depende de la calidad de pensamientos y del desarrollo de las capacidades innatas de la mente y la intuición.
La práctica de la meditación, concentración y otras disciplinas espirituales ayudan a elevar el nivel de esta energía.

La sexta es la energía Vital. La energía de la vida constituye la fuerza con la que actuamos en este mundo. El centro se encuentra en nuestro ombligo y cuatro dedos por debajo de él. A través del cordón umbilical es de donde recibimos nuestro primer alimento. Toma el hábito de respirar por el abdomen; te relajará, te centrará.
El agua revitaliza e intensifica la energía vital. El agua purifica y fortalece.

La séptima es la energía sexual. Es una de las energías más potentes del ser humano. Reside en la base de la columna vertebral, en el chakra raíz (Muladhara). Se la identifica con una serpiente: la línea de fuerza kundalini. La energía de la creatividad.
El despertar de esta energía hace que se activen todos los demás chakras.

Cuando la Mente te atormenta.

Me ausenté de mi vida varios años. Tenía una situación tan insostenible y angustiosa que opté por desertar. Me marché desde la ceguera que da la desesperanza. Temerosa de lo que podría encontrar más delante, di marcha atrás.

Arrinconé en mi interior una imagen de mí que me resultaba pesada y falsa. Se hacía insoportable seguir con ella.

Reconozco que fue una huida y que siempre es la cobardía quien te ordena desaparecer, de ti misma, en cualquier dirección, porque desconoces la correcta.

Mi mente, entonces, estaba expuesta en su fragilidad a ser invadida por pensamientos y sentimientos fantasmas, ajenos a mi misma y que me incapacitaban a pensar y a ser. Así que deserté, me rendí.

Y fui testigo pasivo; desde una apatía feroz -loca contradicción- mi alma se asomaba a observar la devastación que estaba creando en mí. El ego agonizaba…

Ahora sé que las crisis existenciales y los conflictos con el YO son necesarios en el proceso de encontrarse con uno mismo y lograr esa transformación dolorosa -de oruga a mariposa. Ese alumbramiento del Alma. Ese despertar de la Conciencia, que es Luz.

Por supuesto que requiere de valentía, de determinación, inclusive de confianza absoluta de que somos algo más que un cuerpo físico y una mente, de que es posible crear una conexión con lo divino dentro de nosotros.

Significa el comienzo del proceso de la autotransformación. Sintámoslo como una verdadera bendición.

Fortalecer el sistema inmunitario.

Existe en todos los seres vivos una respuesta inmunitaria innata que nos protege contra infecciones virales (virus, bacterias, parásitos). Pero especialmente el ser humano tiene mecanismos de defensas sofisticados de largo plazo que genera una memoria inmunitaria, en la que debemos confiar.

Si nuestro sistema inmunitario está sano hace correctamente frente a cualquier agresión externa sin necesidad de que hagamos nada más que ocuparnos de manera responsable por llevar una vida equilibrada en todos los aspectos.

El sistema inmunitario reconoce lo dañino y reacciona sabiamente para defenderse, movilizándose a través de la sangre, hacia los distintos órganos, para combatir cualquier cuerpo extraño.

¿Qué debilita el sistema inmunitario? El Miedo. La inmadurez emocional que nos hace dependientes, sin capacidad de pensar por nosotros mismos.

Conozcamos cómo funciona nuestro cuerpo físico, mental y emocional. Qué necesitamos vigorizar y tonificar en nosotros. Eso nos dará seguridad y creará conciencia y responsabilidad en nosotros mismos.

¿Cómo fortalecer el sistema inmunitario? De forma natural podemos fortalecer nuestro sistema inmunitario. Existen aceites esenciales antivíricus, como árbol de té, eucalipto, tomillo. Se recomienda el drenaje linfático por su capacidad para estimular el sistema inmunitario. Comer más verduras y frutas diariamente. La vitamina C y el mineral Zinc estimulan también el sistema inmunitario y son antivíricas.

Hoy en día existen en las Redes suficiente información natural y eficaz que nos pueden ayudar a prevenir cualquier enfermedad. Mantengamos una actitud positiva, responsable y práctica.

La Medicina del Alma

Toda enfermedad es desarmonía y falta de alineamiento y control a nivel energético.

Desde siempre han existido medicinas naturales, alternativas y complementarias, que se basan en desbloquear y reactivar las energías del cuerpo físico, mental y emocional. La enfermedad, sea física o mental, aparece cuando algún sistema energético pierde su equilibrio. Es entonces cuando primero se manifiestan algunos síntomas de aviso, como el agotamiento o la irritabilidad y luego la enfermedad podría aparecer tarde o temprano afectando a algún órgano, si no lo atajamos a tiempo.

Cuando se consigue concentrar las energías dispersas, se desechan las energías tóxicas, se desbloquean y reactivan los centros energéticos para que fluya nuevamente con normalidad la energía vital, entonces se recupera la salud íntegra. Pero para ello hay que hacer un trabajo de purificación y conocimiento de sí mismo, si hay un deseo sincero para ello.

La Medicina del Alma, contempla toda dolencia como una oportunidad para purificarnos. Una ocasión para rectificar actitudes emocionales erróneas. Porque éste es el principal factor, los conflictos emocionales, son los que crean afecciones tanto física como mentales, tan a la orden del día como son la ansiedad, crisis de pánico y estrés.

Las alteraciones internas debido a las preocupaciones excesivas o los trastornos y malestar causados por los excesos de enfados y rabia acumulada, afecta al estómago, al páncreas y a la vesícula… y éste es un pequeño ejemplo de cómo las emociones, que no son procesadas, se pueden enquistar en nuestro cuerpo físico, dañándolo.

Un sanador, desde la Medicina del Alma , sabe acerca de las energías internas y de las energías superiores sanadoras y posee comprensión intuitiva para tratar todo desequilibrio. Su función es la de inspirar a la otra persona en su capacidad para la auto-sanación.

Conocimiento colectivo

La compasión es la forma más elevada de la Energía Femenina Divina, que en estos momentos está despertando en ambos géneros, de forma sutil y equilibrada.

Esta energía está cargada de Gracia, Belleza, Serenidad, Sabiduría y Amor Incondicional y es una poderosa energía de Sanación.

El Tiempo se ha ampliado y nos está llevando a una nueva dimensión para que conozcamos a nuestro Ser esencial. Y desde esa interconexión experimentemos el Amor Incondicional.

Juntemos energías con esa intención. Convoquemos al Poder que existe en nuestro interior que es nuestro Espíritu. Desarrollemos nuestro conocimiento intuitivo que aparece de forma directa (sin pasar por la Mente) cuando estamos en Silencio y calma.

Trascendamos el Ego, La información que viene de la Conciencia no es para entender sino para sentir y asimilar.

Cáncer

Todos tenemos a alguien cercano que ha sufrido o está padeciendo esta enfermedad.

Como terapeuta floral, maestra de Reiki y sanadora del Alma, he tratado a personas con diferentes actitudes frente a esta enfermedad. Prepararse para cambiar hábitos, creencias y pensamientos es tan importante y va a la par con el tratamiento médico que se siga.

REIKI siempre ha sido y es de una gran ayuda porque en primer lugar consigue relajar todo el cuerpo físico, mental y cuerpo emocional y esto es muy importante y necesario en toda dolencia. Deshacerse de todas las tensiones ayuda a que las energías vitales fluyan por todo el cuerpo.

El impacto que ocasiona la noticia de la enfermedad y cómo uno la recibe. El apoyo del entorno y la actitud con que se vive, son los tres pilares fundamentales para sobrellevar con buen ánimo de disposición y fuerza todo el proceso de cualquier dolencia grave.

Contaré el caso de Carmen que al finalizar la primera clase de «Entrenamiento para la Nueva Conciencia» que dí hace unos años en Monachil, se me acercó para presentarse y sonriente me comunicó que le había gustado mucho la clase pero que no sabía si podría volver a la siguiente. Cómo es eso, le pregunté. Con toda naturalidad me respondió que tenía un cáncer terminal y que le quedaban días de vida.

Intenté no se notase mi asombro, así que escogí mostrar lo maravillada que estaba por su actitud tan positiva y le dije: me encantará verte de nuevo la próxima semana.

El curso duró un año y medio. Y ella estuvo asistiendo puntualmente cada semana y siempre con su sonrisa llena de Luz. Cada semana agradecía el haber podido asistir. Recibimos todas las demás mujeres una gran enseñanza de su parte. Ella tenía algo que las demás no teníamos; el brillo que da la autenticidad. Ella era totalmente consciente de lo que es la vida y la muerte.

Es normal que el miedo se apodere de uno en los primeros momentos pero luego hay que asumir la realidad y aceptarla. ¿Cómo decides vivir esta prueba? – En primer lugar con valentía. Abiertas a recoger la enseñanza que viene a ofrecer.

Yo podría decir con toda sinceridad que los casos que he conocido y tratado han tenido todos un final feliz, independientemente de si les llevó a dejar este cuerpo o continúan con él.

Organización de los chakras

La recarga energética de nuestro cuerpo físico, el almacenamiento de energía vital, el desbloqueo emocional, todo ello se realiza en nuestros CENTROS ENERGÉTICOS, los Chakras.

Tenemos siete chakras principales: Tres SUPERIORES (Coronilla. Tercer Ojo. Garganta) y Tres INFERIORES (Plexo Solar. Sacro. Raíz). En medio se halla el chakra del corazón. Los chakras inferiores producen una energía vital más apropiada para el cuerpo físico. A los chakras superiores llega la energía purificada -más sutil- y es reenviada principalmente al chakra del corazón.

Cuando hay un exceso de energía densa atascada en los chakras inferiores, en comparación con la energía sutil y refinada de los superiores, se producen reacciones descontroladas; agresividad, rabia, intranquilidad, sexualidad exagerada. Físicamente puede haber reacciones como fiebre, depresión nerviosa, inflamaciones …

(1) CHAKRA RAÍZ.- Responsable del mantenimiento de la especie y la Supervivencia.

(2) CHAKRA SACRO.- Responsable del Placer sexual y encontrar la satisfacción propia y la Alegría en relación con el mundo en general.

(3) CHAKRA PLEXO SOLAR.- Esfuerzo por el dominio y control. Autodeterminación. Sentirse capaz de hacer y lograr objetivos. Decir NO.

(4) CHAKRA CORAZÓN.- Fuente de Amor. Compasión. Unión. Saber decir SI. Valores. Fe. Motivaciones.

(5) CHAKRA GARGANTA.- expresión. Comunicación. Creatividad. Equilibrio psíquico/espiritual. Identidad. Autoridad natural.

(6) CHAKRA TERCER OJO.- Intuición. Desarrollo de la Conciencia. Capacidad de visionar.

(7) CHAKRA CORONARIO.- Conciencia Universal. Unión con lo transpersonal. Favorece la evolución.

Recomendamos hacer la ALINEACIÓN de los centros energéticos (el ejercicio lo puedes encontrar en el Blog) para mantener una buena salud física, mental, emocional y espiritual.

Los beneficios de ello son notorios si se ejercita con regularidad. Experimentarlo por vosotros mismos.

La capacidad de sanación

El poder sanador de la palabra y los pensamientos positivos.- Somos seres vibrantes en transformación continua. Es la resistencia a movernos según nuestra naturaleza, lo que crea sufrimiento. Entendiendo ésto, cesa el conflicto en nosotros y fluimos, permitiéndonos ser quien somos.

El poder sanador de la Intención y la Invocación.- Por el Poder de la intención y la invocación, conectamos con las Fuerzas Superiores del Amor Puro Incondicional. Solicitamos, según nuestras creencias, que se hagan presentes en nosotros la energía del «Yo Soy Amor», los ángeles, arcángeles, seres de Luz, los maestros espirituales ascendidos y la Madre divina.

El poder sanador de la Respiración consciente y la meditación.- Cuanta más pausada y profunda la respiración más larga es la vida. Debemos evitar que la respiración agitada que nos está indicando hay ansiedad, enfado, estrés, se prolongue sin control. Y podemos controlar estos desórdenes con la respiración consciente; inhalando lentamente con la atención puesta en las fosas nasales o en el corazón, retenemos el aire unos segundos y exhalamos con la intención de soltar los miedos, las preocupaciones … y experimentaremos cómo conseguimos relajar nuestra mente y volver a la normalidad.

Oración: «Invoco mi capacidad para amar y dejarme amar. Hago presente mi habilidad para soñar nuevos sueños que me nutran. Conecto con mi Alma para que renazca en mí la alegría. Invoco a mi Ser de Luz para que fortalezca mis alas».

Descubro mi Camino. Acepto quien soy.

Lo que enferma el Alma

hombre mundo azulSólo hay una enfermedad, se manifieste como se manifieste en nuestro cuerpo físico, y es el alejamiento y desconocimiento de nosotros mismos.

El modelo médico convencional tiene grandes limitaciones para sanar  debido a los intereses económicos y de liderazgo de la industria farmacéutica.  La mayoría de las personas se mantienen enfermas, -se hacen crónicas voluntariamente-   por un sentimiento  de indefensión  y una actitud  de dependencia, que la misma Medicina alienta.

No prestar atención al Alma ha debilitado y enfermado nuestro cuerpo emocional y nuestra Voluntad. El habernos alejado y olvidado de nuestro espíritu -nuestro ser esencial y natural- ha debilitado y enfermado nuestra Alma -el ánima que nos sostiene-. Y todo ello, de forma silenciosa y gradual, ha enfermado nuestro cuerpo físico, da igual cómo llamemos a la enfermedad o a qué órganos ha afectado.

La fragilidad del Alma es lo que tenemos que atender. Estimular el sistema energético de nuestro cuerpo es ahora prioridad. Centrar nuestras energías, hacernos responsables de nuestra salud, haciendo una limpieza emocional, mejorando nuestras condiciones y calidad de vida y felicidad.

Nuestros cuerpos físico, mental, emocional y espiritual, están interconectados y cada uno de ellos afecta a los demás.  Podemos sentir que las emociones afectan al cuerpo físico. Podemos hacernos conscientes de cómo nuestra mente puede llegar a desgastarnos energéticamente con pensamientos recurrentes o con obsesiones y miedos que son sólo imaginarios .

Ocupándonos de nuestra mente y corazón. Estos primeros pasos nos darán la fuerza vital necesaria para impulsar los cambios y toma de decisiones necesarias para hacernos con las riendas de nuestra vida.