No hay fundamentos nuevos: lo que siembres cosecharás. Así de sencillo.
Entonces, por qué lo complicamos todo y nos metemos por caminos difíciles y que a veces son callejones sin salida…
Si mantengo hábitos que sé no me proporcionan nada bueno o no me sacan de mis dificultades, por qué continuo con ellos … es que es muy difícil cambiar, es la respuesta normalmente. Sí, es difícil cambiar pero peor es continuar con la carga pesada de la infelicidad y la frustración!!!
La verdad en nosotros mismos es lo único que engrasa y hace andar el mecanismo de la vida.
Terminemos con eso de echar la culpa a los demás, a las circunstancias del pasado, a los padres, al tiempo, … dejemos ya de justificarnos y enfrentemos la realidad de nuestro presente con la intención firme de solventar de una vez por todas, nuestras miserias.
Mientras que uno espera que el mundo cambie, pasó la vida. Es así.
¿Qué tengo que hacer para darle una motivación a mi vida? ¿Qué puede impulsarme a dar lo mejor de mí?… mi Ser.
¿Y cómo llegar a conectar con mi alma? Desde la meditación. Sentándome en silencio, con la mente en quietud, relajada, volcada a mi interior, sin expectativas ni exigencias… abierta a escuchar y sentir.