Si nos quedamos en la superficie de la vida -sin ahondar en ella- estamos únicamente existiendo, metidos en la nebulosa de la inconsciencia . Seremos el centro de nuestro mundo ilusorio ¡que tanto esfuerzo nos cuesta mantener a flote!
Nos educaron para mantener nuestros sentidos dormidos. El poder de la creatividad, de pensar e idear, totalmente enterrados. Nos quieren dóciles y obedientes. OBEDIENTES… porque si no, somos malos… y ahí ya entra el sentimiento de culpa …
Todo eso se ha acabado. Hay que ponerle fin. Vamos a tomar CONCIENCIA. Vamos a despertar nuestra Conciencia de ser un Ser original, creativo y lleno de Luz.
Comencemos por saber que tenemos una conciencia celular (ADN). Tenemos una consciencia del cuerpo físico-mental-emocional como vehículo de existencia y una Conciencia espiritual que nos proporciona conocimiento directo de nuestro ser esencial y eterno.
Cuando vivimos armónicamente y sintonizados con todas ellas podemos acceder a otras dimensiones de nuestro ser.
Podremos, desde la práctica espiritual, crear y proyectar energía consciente a nuestras células para crear salud.
Esto se llama ENERGÍA PROYECTADA para hacer que la frecuencia de las células se eleven y convertirnos en seres de luz.
Nos han hecho creer que es normal enfermarse y que la vejez es decrepitud y decadencia. Tenemos que comenzar por hacernos responsables de nuestra salud, de nuestro bienestar mental y emocional, de nuestra felicidad y de todo lo que nos propongamos en nuestra vida.
Siendo conscientes de nuestras capacidades y potencialidad tendremos acceso a la Realidad y a la Verdad que están detrás de los velos de la ilusión, los miedos, etc.
A partir de ahí podremos sintonizarnos con la Conciencia Planetaria y sentirnos parte del Todo.