
Poseemos cinco sentidos que precisamos para relacionarnos con el exterior. Según la claridad de los mismos nuestra captación a través de ellos estará o no distorsionada. Estos sentidos nos llevan a conectar con nuestra facultad interior de amplificar de manera ilimitada todo nuestro potencial humano.
:La vista –visión interior. Visualizar otros planos de nuestro ser.
El oído – audición interior. Escuchar la voz interior de nuestro Yo Superior.
El olfato – percibir el aroma y fragancia de algo que está en otra dimensión.
El tacto – sentir la energía, percibir el mundo invisible.
El gusto – paladear el sabor de algo que nos transporta en el tiempo…
Los sentidos INTERNOS nos ayudan a trascender el plano lineal de nuestra vida exterior y física. Cuando desplegamos y comenzamos a usar estos sentidos, nos dan el Poder de desarrollar todas nuestras capacidades; la intuición, la percepción extrasensorial, la clarividencia, la telepatía, la comprensión multidimensional, viajar desde el cuerpo astral…
Existe un SEXTO SENTIDO del que no hacemos uso y es la Intuición.
El sexto sentido es el desarrollo máximo de los otros cinco. Se trata de ESCUCHAR la voz interior de la Conciencia. VER desde una visión profunda e ilimitada. PALPAR con una percepción muy amplificada energías sutiles. GUSTAR hasta la embriaguez del eter que existe en la Naturaleza. OLER desde los aromas más exquisitos hasta «el miedo» que nos previene de los peligros.