La Conciencia tiene dos aspectos que deberían ir unidos: ATENCIÓN e INTENCIÓN.
Desde la atención plena, llenamos de energía lo que queremos conseguir o desarrollar. Podemos crear. Partiendo de una idea damos vida a un deseo y en la medida en que nuestra atención sea completa veremos materializarse nuestro deseo… si somos perseverantes y pacientes.
La intención es necesaria para seguir avanzando, con ella transformamos desde la acción. Pero existe un requisito: claridad mental y anhelo puro.
Pasamos a una Conciencia más elevada cada vez que, como Observadores, experimentamos nuestro avance gracias al entendimiento. Y también a la fluidez mental.
El Saber aligera la densidad de la mente. Cada vez más, la vida se va simplificando a la par que avanza en comprensión.
Y en la medida en que se prospera en conocimiento de uno mismo, también crece la compasión y el sentido de unicidad.
Todo esto nos lleva una vida …