
El REIKI nos abre la puerta para acercarnos y escuchar con nuestras manos a nuestros centros energéticos (los chakras). Entonces comenzamos a entender de forma vivencial que los chakras son puertas interdimensionales de nuestro microcosmos. Las chakras captan la energía cósmica y activan nuestros pranas (energías más sutiles), equilibrándolos y reactivándolos..
Utilicemos las manos como instrumentos para percibir, desbloquear, limpiar, equilibrar y proyectar energía superior para sanar y potenciar.
Cuando la ENERGÍA VITAL se absorbe y distribuye adecuadamente por todo nuestro cuerpo podemos decir que estamos SANOS.
REIKI es una herramienta que nos prepara para hacer un Camino de vida desde dentro; teniendo la Mente y Corazón en perfecta sincronicidad.
REIKI es altamente efectivo si lo incorporamos en nuestra vida cotidiana porque nos permite utilizar la energía vital en los procesos de recuperación de nuestro cuerpo físico, mental-emocional y en el desarrollo de nuestra alma.
Siguiendo las leyes naturales de la auto-sanación podremos trabajar con nosotros mismos en la limpieza de energía estancada y enferma. Podremos energetizar zonas debilitadas. Podremos revitalizar el sistema inmunológico. Podremos sanar en nosotros traumas pasados y todas las heridas emocionales y estados de miedos, ansiedad, angustia, rabia, etc. que nos afectan y bloquean.
Cuando escuchamos en nuestro interior una fuerza que nos pide un CAMBIO en nuestras vidas ES EL MOMENTO.
REIKI es un valioso regalo y nunca es casualidad cuando llega a nosotros. Aprovéchalo