A través de la energía de nuestros sentimientos y emociones es como damos forma y materializamos nuestros pensamientos, fortalecemos nuestra identidad, desarrollamos nuestra creatividad y construimos nuestra personalidad.
La calidad de nuestras emociones y sentimientos determina cómo nos expresamos en la vida y cómo nos desenvolvemos en ella. Desde el Amor creamos felicidad y paz o por el contrario, son los miedos los que dirigen nuestra vida desde la inseguridad y el desamor hacia nosotros mismos.
Todos nacemos con miedos. Se posicionan en la mente inferior y a través de ellos comenzamos a interpretar el mundo y a los que nos rodean. Sin darnos cuenta, esta será la causa de que seamos nosotros mismos los que nos pongamos límites y estrechemos nuestro campo de posibilidades. La mente crea una auto-exigencia desmedida que nos lleva al auto-castigo e insatisfacción y al sentimiento de culpa, entrando así en un círculo vicioso de los que uno -con una mente y fuerza de voluntad débil- no sabe cómo deshacerse de ello.
Existe una emoción que es primordial y de donde parten todas las demás y es el AMOR. El Amor está en el centro de todas las posibles emociones y sentimientos; su Centro está en el corazón espiritual. Podríamos decir que la Mente inferior se mueve en la periferia, sin conectar con el corazón, originándose así los miedos.
Sólo desarrollando la mente y conectándola con el corazón espiritual conseguiremos salir de esa esclavitud mental que hemos creado inconscientemente y de la que no sabemos zafarnos. Terminamos sin energía; rindiéndonos, resignándonos, …
Los miedos son energía negativa densa: crean rabia, frustración, ansiedad y depresión. La energía de estas emociones están dispersas, desequilibradas, sin dirección. Están creando bloqueos que ocasionan confusión y sufrimiento.
¿Cómo resolver los miedos, el estrés, la ansiedad y la angustia? Podemos comenzar a cambiar hábitos desde la introspección, ejercicios de concentración y la meditación. Existen técnicas y disciplinas que nos ayudarán a dar esos primeros pasos para salir de una conducta rígida comandada por los miedos y la inseguridad.
Ejercicio de la respiración consciente : Inspira con la intención de cargarte con la energía de vida. Pon la atención en las fosas nasales y siente cómo entra el oxígeno en ti y se expande por todo tu cuerpo. Guarda dentro de ti el PRANA. Expulsa el aire viciado.
Sin diálogo interno. Haz siete inspiraciones conscientes y en cada una de ellas, muy lentamente, vacíate de toda tensión y preocupación. Inspira vida y al exhalar devuelve al Universo la energía que no necesitas y que ella arrastre las impurezas fuera de ti.
Este ejercicio hecho cada día fortalecerá tu mente y tu voluntad. Al fortalecer tu voluntad estarás nutriendo tu autoestima. Acrecentando tu autoestima te harás dueño de tu vida y desaparecerán los miedos.