
Ella es joven y aparentemente lo tiene todo para ser feliz, pero no lo es. Vive frustrada e insatisfecha, es irritable y necesita tener todo bajo su control. Los miedos y su mente dispersa e inquieta la dominan. El cuadro de su historia se amplía con ataques de pánico y ansiedad que aparecen sin motivo concreto, …
Ésta y muchas más historias parecidas, son las que trato con REIKI y Esencias Florales. Si la persona se rinde y acepta confiar en ser guiada hacia sí misma y enfrentarse a la raíz de sus conflictos, entonces tarde o temprano, podrá deshacerse de todo bloqueo emocional y sanará su Alma y corazón, sintiendo haber recuperado su vida.
REIKI se utiliza con total respeto, para percibir y descifrar las energías emocionales que bloquean el fluir de vida en otra persona, de forma presencial o a distancia, eso no es ningún impedimento para captar el problema y solucionarlo. Se trabaja el desapego; crear confianza para que la persona descubra y confíe en sus propia fuerza y valores.
Cómo funcionan las energías sanadoras que un maestro de REIKI canaliza no es cuestión de magia, aunque sí resulta ser un misterio para nuestras mentes tan limitadas. La intuición y no la mente es la que dirige y facilita la apertura y expansión de la Conciencia en sí mismo.
Para las mentes y cuerpos que se oponen, consciente o inconscientemente, es imposible llegar a ellos. Pero para aquellos que dejan a un lado toda resistencia, en su anhelo de salir sinceramente de la situación que los hace sufrir o no les deja avanzar, entonces es posible encarrilar su cuerpo energético.
A través del REIKI se percibe el estado de los Centros Energéticos y se conocen las necesidades psicológicas del cliente. Toda respuesta y comprensión las recibe el canalizador de forma directa e intuitiva (sin pasar por la mente).
Y es gracias a la imposición de manos, que la persona recibe la energía superior sanadora que equilibrará y desbloqueará los centros energéticos, haciendo este procedimiento tres días como mínimo, para en esas tres etapas deshacer cada vez en más profundidad todas las energías densas que estaban bloqueando y desequilibrando el cuerpo energético/emocional de la persona.
La sensibilidad despierta del chakra que hay en las palmas de las manos, capta y traduce las energías de los demás pero también es capaz de transmitir a través de ellas, como Canal, la energía superior del Amor Incondicional que es sanadora porque tiene la capacidad de equilibrar las vibraciones y frecuencias del cuerpo físico, mental, emocional y espiritual.