Humanidad somos todos. Introduzcamos en nuestra mente la idea de UNICIDAD como mejor forma de hacer una r-evolución, positiva y constructiva para todos. Se trata de movilizar la responsabilidad colectiva, creando nuevos hábitos de cooperación y defensa del interés general por encima de los intereses codiciosos y egoístas de unos cuantos.
ACCIÓN GLOBAL– Tengamos una actitud unificadora para poder avanzar hacia la Sostenibilidad, entendida como un profundo replanteamiento de las relaciones de los grupos humanos entre sí y la Madre Tierra, a la que pertenecemos TODOS.
Hagamos un esfuerzo por salir de la mente dual que nos constriñe al SI o al NO, sin querer ver ni aceptar los cientos de matices que conforman las ideas, creencias, culturas, mentalidades, …
Solo tenemos que abrir la mente y conectarla con el corazón, eso nos dará una nueva percepción -más amplia y profunda – de nosotros mismos y del mundo.
Ninguna especie animal es tan depredadora y cruel como es el ser humano, que es capaz de aniquilar por codicia a su propia especie.
Da la impresión de que retrocedemos en cuanto a virtudes y valores como seres humanos… cada uno está eligiendo su Camino. Pero es importante saber que existen seres anónimos que están despertando la Conciencia en sí mismos y a su alrededor. Seres de Luz que están al servicio de los demás, y esa es la esperanza que nos sostiene para seguir evolucionando; ese pequeño por ciento de personas comprometidas consigo mismas, con su entorno y también con la humanidad.
Reformemos nuestra vida desde ese entendimiento y haremos evolucionar la humanidad hacia el Amor incondicional.

Muchos dicen quererla… pero a mitad de camino se cansan, desisten, siguen probando otras cosas nuevas o deciden ya tienen bastante… pero llegar hasta el final para alcanzar la tan deseada paz interior de forma estable, es una tarea ardua que pocos consiguen.
Si somos seres de luz, tenemos un cuerpo energético que nos abastece y nos sostiene. Y, en nuestro organismo, son las células las encargadas de emitir esa luz.
Dijo la abuela Margarita de la tradición Maya: «Cuando quiero algo me lo pido a mi misma».
La Madre Tierra sufre en sus entrañas tanto o más que los humanos en su superficie.


