Hay salida

DIBUJO HUYENDONos encerramos pero hay salida. Nos quedamos con patrones fijos pero hay posibilidad de salir de ellos y crear unos nuevos.

Hay salida. Sin tener que tomar medidas drásticas ni irnos al otro extremo o salir huyendo.

Hay salida al sufrimiento. Salir del pasado que no nos deja vivir en el presente.

Hay salida a la dependencia que debilita nuestra identidad.

Necesitamos ser libres porque es nuestra condición. Marchitamos si no, en la resignación.

Hay salida a la sumisión, a la manipulación, al sentimiento de culpa, al sacrificio obligado, al miedo.

Al salir de lo que nos aprisiona surge lo nuevo. Salimos para manifestarnos.

Salir para resaltar quien uno es desde el Ser y sentirnos merecedores de amarnos, recibir amor y amar a los demás.

El Hombre y la Mujer.

abrazoTengo muy presente en mi memoria y ha sido mi referencia y patrón de vida, la situación y comportamiento de la mujer hace cincuenta años atrás. El mantenerse en segunda fila y en silencio era lo normal entonces aunque, como siempre, también hubieron mujeres de mucho carácter que eran las que manejaban los entresijos familiares. Pero la mujer en general, como tal, siempre estuvo relegada y la inmensa mayoría tenía asumida su posición y condición infravalorada.

El que no hubiese equilibrio entre las energías femeninas y masculinas. El que los hombres dominasen utilizando inclusive la fuerza bruta, desestabilizó el orden natural del propio ser humano en las familias y en las sociedades, llegándose a perder totalmente el respeto y el sentido de ecuanimidad entre ambos géneros.

Honro y valoro a todas esas mujeres -que han sido nuestras abuelas y madres- que desarrollaron una sabiduría extensa y profunda, como la paciencia y muchas otras virtudes como el silencio y el sacrificio desde el amor incondicional. Todo ello las fortaleció interiormente.

La «rebelión» llegó en su momento, cuando la mujer pudo independizarse económicamente. Muchos cambios favorables se han conseguido, indudablemente. Pero también es verdad que el péndulo de la represión hizo que se moviese hacia el otro extremo y se mal usó esa estrenada libertad en algunos sentidos y muchas mujeres adoptaron los mismos patrones que las oprimieron, como revancha….

Al no tener otras referencias a la vista, de sus propios valores y de su propia naturaleza, la mujer en su búsqueda por la libertad tan ansiada, comenzó a imitar al hombre y a rivalizar con él. El resentimiento ciega, tenemos que transformarlo como combustible para nuestro propio crecimiento. Y así lo han hecho tantísimas mujeres de vanguardia. La inmensa mayoría siguen siendo heroínas como mujer-madre-esposa-trabajadora, sin desfallecer en su tarea.

Se va avanzando, es verdad, pero que nuestras miras estén por recuperar la fortaleza y naturaleza de la energía femenina que es receptora, guardiana de lo interno, sabia, ternura, sacrificio, sanadora, amor, sensibilidad, generosidad, intuición…

Y además, complementarla con la naturaleza del hombre, que es el hacedor, el guardián de lo externo, el guerrero, el que pone orden, el que conquista desde la creatividad, … todo ello cuando está en el centro de su Ser.

La madurez emocional es necesaria para salir de relaciones alimentadas desde el rencor y el despecho. Ambos, hombres y mujeres, tenemos que crecer y posicionarnos desde nuestro Ser. Debemos sanar los patrones heredados. No olvidemos que los hombres hoy en día, tampoco tienen una referencia clara de su naturaleza, deben ser guiados y educados nuevamente, se sienten confundidos.

Superemos de una vez por todas la rivalidad entre hombres y mujeres. Valoremos y respetemos la naturaleza de cada uno. Debemos complementarnos. No estamos compitiendo en la vida, cada uno cumple su función. No somos adversarios.

El CAMBIO debe darse para que tomemos conciencia de nuestra naturaleza y valores.

Unirnos sinceramente desde el Amor.

¿Me he sacrificado o me he liberado?

yoga mujer solLas personas de alrededor cuando comienzas un camino espiritual creen que te estás sacrificando, se compadecen de ti pensando que estás dándole la espalda a los placeres de la vida; te tachan de infeliz, raro, inadaptado …

¿Es un sacrificio renunciar a la comodidad aparente de la vida mundanal a cambio de la paz que descubres en tu interior?

¿Es eso un sacrificio?

¿Renunciar a los apegos del amor interesado y posesivo por alcanzar la dicha que va más allá de lo expresable, es eso un sacrificio?

¿Es un sacrificio renunciar a cosas o estatus o dinero cuando a cambio te sientes libre de manipuladores, chantajes emocionales, ataduras, obligaciones impuestas, falsedades, condicionamientos limitantes, inquisidores, culpabilidad, miedos …

Renunciarse a sí mismo, eso sí es un triste e inútil sacrificio.

Quien se libera de las ataduras, provee a su corazón de nuevo aliento.

Hay que ahuyentar con firmeza a todos los miedos que nos estén acosando, inclusive esas personas que con sus consejos -y por nuestro bien- sólo pretenden reducirnos.

Remontar toda limitación es elevarnos hasta nuestros orígenes.

Compromiso / Obligación

manos entrelazada.jpgLa diferencia es grande. El compromiso primeramente es con uno mismo. Debe ser voluntario y consciente; así es como se crea la perfección.

La obligación es impuesta o aceptada desde la manipulación o la fuerza. Se trata de ganar la voluntad del otro mediante el miedo, el sentimiento de culpa, el interés o el victimismo.

Cuando a nivel físico sentimos un peso en nuestros hombros quiere decir que emocionalmente tenemos un sobre-esfuerzo de responsabilidades y preocupaciones. El dolor y tensión física en toda esa zona e inclusive cuando la espalda comienza a deformarse debido a que la columna vertebral «cede» y se encorva … quiere decir que tenemos que comenzar a replantearnos nuestra actitud y vulnerabilidad ante los demás.

Sentirnos obligados a hacer algo o sentirnos obligados a comportarnos de una manera distinta a la que nos dicta nuestra naturaleza y entendimiento, simplemente por COMPLACER a los demás, nos perjudica tarde o temprano. Distinto es si esa obligación la convertimos en compromiso consciente y voluntario, por amor …

Las exigencias y la obligatoriedad vengan de quien vengan, inclusive las auto-impuestas crean tensión interior, represión.

Sentirnos en deuda con alguien o sentirnos obligados a devolver un favor, a hacer un regalo, poner nuestro empeño en agradar, todo ello lleva un esfuerzo   y gasto de energía a nivel mental.  Sin embargo, cuando es el corazón quien  siente el impulso sincero y espontaneo de corresponder o mostrar su compromiso de lealtad o lo que sea, lo hace desde la libertad.

Transformar la obligación en COMPROMISO crea libertad,  responsabilidad y conciencia.

Cuando el sacrificio por los demás nos enferma

reiki pacienteVino a verme una mujer de mediana edad por  su gordura ya que «nunca me siento llena y estoy comiendo a todas horas y encima la comida me sienta mal. No tengo arreglo».

Dice que cuida por amor a su marido impedido, que a sus hijos les da todo, complaciéndolos con gran esfuerzo, dice que todo eso lo hace gustosamente. Aparentemente, su imagen y su sonrisa confirman lo que me está contando sobre su vida llena de penalidades y sacrificios. Su historia, en la que ella es una víctima amorosa y entregada, es poco creíble. No es que ella me esté mintiendo al explicarme su situación sino que ella misma vive engañada y alejada de su realidad que no quiere o no sabe ver.

Al practicarle  Reiki,  examino la energía de sus centros energéticos. A través de las manos siento si están bloqueados o hay exceso/deficiencia de energía vital. También se pueden sentir las energías tóxicas y densas que obstruyen el paso y fluidez de las energías.  Conectar con el campo astral es también importante para hacer la limpieza energética conveniente y recibir información de la raíz del problema.

Lo primero que siento es toda la rabia que tiene guardada, todo su inmenso resentimiento que la está enfermando. Termino haciéndole una armonización y alineamiento de los chakras y limpieza del aura.

Desde esa relajación es cuando ella se atreve a hablar y   contarme la verdad: «No puedo más, si al menos me dijeran las cosas de otra manera… todo son exigencias. Me siento agotada física y mentalmente. No me valoran».

Al reconocer su inmensa rabia es cuando podemos ponernos a trabajar; yo como facilitadora y ella para tomar las riendas de su vida y salir de una actitud mecánica de queja y amargura. Teniendo ahora la fuerza y la valentía para expresar sin miedo lo que siente,  comenzando por valorarse a sí misma.

Si  actuamos  desde la resignación por un sentimiento negativo de «deber y obligación», nos estamos envenenando por dentro . Si nuestra actitud sacrificada es auto-impuesta,  tenemos unas expectativas de reconocimiento y agradecimiento por parte de los demás, que nunca llegan en la medida que consideramos justas.

Ese veneno que se va acumulando secretamente es lo que nos termina enfermando y desgasta toda la energía vital que utilizamos para guardar las apariencias.

Cuando conscientemente nos sacrificamos por alguien y lo hacemos desde el Amor, cuando no podemos cambiar una situación que exige de nuestra entrega, si  aceptamos desde el corazón, todo se pone en su sitio. Si nos damos a los demás desde el Amor, ese mismo Amor dado es la recompensa.

Cada día

mano extendidaCada día se nos da la oportunidad de rectificar y mejorar nuestra actitud hacia nosotros mismos y hacia los demás.

Cada día podemos buscar un hueco en el tiempo  para ir a nuestro interior y respirar la liviandad y frescura de nuestra alma.

Cada día podríamos conscientemente sonreír desde el corazón y llevar al exterior nuestra fragancia.

Ahora decidimos que, cada día, ponemos la intención de  acrecentar el amor hacia  nosotros y hacia los demás.

Cada día tenemos la tarea de aceptar desde el corazón lo que no podemos cambiar y transformar lo que sentimos como un sacrificio, en  generosa caridad desinteresada.

Esta es una pequeña lista de oportunidades para este año que empieza.