La vida

La vida misma es mi amiga y compañera. Así lo siento. Para definir la vida hay que sentirla.

Todo tiene vida y está interrelacionado. Todo cobra vida cuando estamos atentos. Todo el espacio que respiramos está cargado de vida.

Entonces, si soy consciente de ello y mi Conciencia está despierta, percibiendo la vida en cada suceso, en cada parpadeo y respiración, me siento vibrante y en sintonía con mi alrededor.

La vida me muestra y me recuerda muchas veces de que estoy viva; me facilita lo que yo necesito para crecer. Ya no me resisto a vivir lo que ella me brinda. Me fue dada mi «porción» de vida y la hice mía en principio, la metí en un molde y la programé, la discipliné y la sometí; ese fue el error.

Ahora, una vez entendí que ella es mi maestra porque ella es muchísimo más que mi inteligencia finita y muchísimo más que mi capacidad de comprensión y sólo ella me puede enseñar la sabiduría de la vida, la he liberado y al mismo tiempo fluyo en ella, desde la confianza absoluta.

La vida en sí es impersonal en su pureza. Es cuando la domesticamos que la constreñimos a un espacio cuadriculado sin horizonte, llamado YO.

Cuando nos apropiamos de la vida, se apaga el sol interior, deja de manar la Fuente, desaparecen nuestras alas y perdemos la capacidad de admirar la belleza de la Madre Tierra.

La vida, si le permitimos hacer, nos deja ver los milagros como algo cotidiano.

La vida, cuando nos sonríe, expande nuestros cinco sentidos y nos sentimos plenos, sólo por el hecho de estar vivos.

No tiene que ver con nuestra condición o situación externa. La vida se lleva dentro y se siente a flor de piel y en el corazón. La vida es infinita, va más allá del espacio-tiempo.

Lo demás es subsistir.

Conciencia

ser-lucesComencemos por saber que  no somos lo que hacemos sino lo que sentimos ser desde nuestro Ser. Y para poder percibir a nuestro Ser, debemos EXPANDIR nuestra Conciencia que hasta ahora está encasillada y maniatada entre conceptos y creencias (de otros).

La Conciencia es LUZ y por ello, cada vez que, nuestra intuición, nos hace llegar un pensamiento puro (sin pasar por el tamiz de la mente inferior),  el sentimiento que tenemos es de expansión. Estas Luz ilumina un espacio nuevo en nosotros, que no nos percatábamos que ya existía.

Nuevos sentimientos creando nuevos pensamientos y viceversa. Nuevas maneras de pensar creadas desde un nivel de Conciencia superior. Los resultados de nuestras decisiones no dependen solo de nuestra claridad mental sino además de nuestra Conciencia, que es la percepción de lo que es correcto.

Nuestra Conciencia nos ayudará a estar en PRESENCIA de nuestro Ser y de la Divinidad en nosotros. Para ello tenemos que entrar en el Silencio y en el Vacío en nosotros desde la quietud mental.

Todo esto -este despertar de la Conciencia- es un proceso largo y lento, es un Camino sin atajos. Requiere de anhelo por evolucionar, por crecer, por Saber, por encontrarse con uno mismo. Es el Camino hacia la Paz interior, hacia la plenitud.  Vivenciar por fin la Dicha y el Gozo de sentir la Presencia de la divinidad en uno.

 

Cuando me amé de verdad

mujer anciana hermosaEl autor de este hermoso escrito es Charles Chaplin.

Cuando me amé de verdad comprendí que en cualquier
circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora
correcta y en el momento exacto y entonces, pude relajarme.
… Hoy sé que eso tiene un nombre…”AUTOESTIMA”

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y
mi sufrimiento emocional, no es sino una señal de que voy
contra mis propias verdades.
Hoy sé que eso es…”AUTENTICIDAD”

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera
diferente y comencé a ver todo lo que acontece y que contribuye a
mi crecimiento.
Hoy eso se llama…”MADUREZ”

Cuando me amé de verdad, comencé a percibir como es
ofensivo tratar de forzar alguna situación, o persona, solo
para realizar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el
momento o la persona no está preparada, inclusive yo mismo.
Hoy sé que el nombre de eso es…”RESPETO”

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que
no fuese saludable…, personas, situaciones, todo y cualquier cosa
que me empujara hacia abajo. De inicio mi razón llamó esa actitud
egoísmo.
Hoy se llama…”AMOR PROPIO”

Cuando me amé de verdad, dejé de temer al tiempo libre y desistí
de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro.
Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero
y a mi propio ritmo.
Hoy sé que eso es…”SIMPLICIDAD”

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y
con eso, erré menos veces.
Hoy descubrí que eso es la…”HUMILDAD”

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y
preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es
donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez.
Y eso se llama…»PLENITUD”

Cuando me amé de verdad, percibí que mi mente puede atormentarme y
decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, ella
tiene una gran y valiosa aliada.
Todo eso es…»SABER VIVIR!»

«No tengamos miedo:
…los planetas también chocan, y del caos, nacen las estrellas.»

Manipulación en el amor

hombres ayudandoseEl Amor es libertad de ser. El Amor tiene que producir un sentimiento inequívoco de plenitud y felicidad, si no, no es Amor.

Trascender el ego emocional y sus manifestaciones de posesividad, dependencia y apego, es un trabajo ineludible en nosotros si queremos llegar a la esencia de lo que es el verdadero Amor y poder así dejar de sufrir innecesariamente debido a nuestra inseguridad o egoísmo,  creando dramas complicados,  en nuestras relaciones con los demás.

Tendremos en cuenta a la hora de valorar  los problemas y sufrimientos que padecemos de que todos ellos surgen de siete malos hábitos que utilizamos como armas de control sobre las personas cercanas.

Amar es dar lo mejor de uno mismo. En qué medida utilizamos los sentimientos para  forzar a que los demás  se comporten como nosotros queremos. Aunque nuestra intención  esté llena de  «buenos propósitos»  estamos coartando la libertad de los otros.

> Pequeño test, puntuar  del 1 al 10.  ¿Cómo me relaciono con las personas cercanas?.

¿Las domino …

1) Desde el castigo emocional «ya no te quiero».

2) Desde la queja «…después de todo lo que he hecho por ti»

3) Desde la culpa «por tu culpa caí enferma»

4) Desde la amenaza «si me abandonas me suicidaré»

5) Desde la crítica «no vales para nada, suerte tienes de tenerme»

6) Desde el soborno «si te quedas en casa te daré… »

Llegar a ser maestro de uno mismo y dueño de la propia vida, es algo a lo que debemos aspirar, para así no depender de nadie. Si nuestra intención es  firme para conseguir la paz interior y la independencia emocional, lo lograremos.

Ser y dejar ser. Para ello debemos encontrar el equilibrio, la armonía y la moderación en todo lo que compone nuestra vida. Si estamos contentos con nosotros mismos y si nos aceptamos a nosotros mismos, no sentiremos la necesidad de controlar y dominar a los demás. No crearemos dependencias emocionales.

El Amor es libertad. El Amor tiene que producir un sentimiento inequívoco de plenitud y felicidad, si no, no es Amor.

El Cuerpo Emocional

mujer raicesTodo lo que siento y se queda sin expresar no me enriquece. Es más; me limita. La autorrealización es vivirse a sí mismo de forma plena; aceptarse, respetarse, amarse … de forma armónica y equilibrada.  Esto sucede cuando conseguimos sanar nuestro cuerpo emocional y conectar mente-corazón.

Responsabilizarnos de nosotros mismos y permanecer inalterables -desde el desapego-  a lo largo de todos los cambios y circunstancias que sucedan en nuestra vida, sabiendo ya que todo es relativo y depende de nuestra actitud y decisión el  cómo queremos vivir nuestra vida.

Hacernos conscientes de quiénes somos es fundamental. Es entonces cuando se despejan todos los  «velos del olvido»  que cubren nuestra existencia. Descubrimos el sentido y propósito de nuestra vida, la aceptamos y la enriquecemos. Esta conciencia interna  proporciona  un estado de madurez y plenitud a nuestro cuerpo emocional.

Es así como crecemos en un sentido externo; en capacidad de desarrollar nuestra  Conciencia siendo observadores de nosotros mismos y crecemos internamente creando un estado sólido y permanente de confianza y amor.

En la medida que fortalecemos nuestro cuerpo emocional,  nuestro Yo Superior se hace cada vez más concreto y fuerte. Y no nos olvidemos de que, nuestro Yo Superior, somos nosotros mismos experimentando otras dimensiones  más elevadas, de nuestro ser, desde el Amor Puro.

Vamos a cultivar la meditación o la introspección, el Silencio y la Quietud … para  Bien de nuestro cuerpo emocional.

Es así como descubriremos nuestras sombras y emociones negativas -algunas de ellas incluso destructivas-. Y vamos a ir disolviéndolas y transformándolas desde el perdón y la aceptación. Ver la Realidad sin la mente que juzga y castiga es ver la Verdad, que es todo Compasión. 

Vamos a ordenar nuestra vida afectiva sobre una base positiva.  Podremos entender entonces que actuar desde la  compasión hacia nosotros mismos y hacia los demás, es lo que nos mantiene en la Salud y la Felicidad.