
La Mente interpreta, no es de mucho fiar. Recibe información y le da un sentido u otro; la manipula, siempre justificándose y de acuerdo a sus propios intereses, según sus prejuicios, sus creencias condicionantes … sabe convencer …
La Mente inferior no es auténtica, puede fácilmente falsear según su conveniencia. Hace de juez y sentencia sin hacer justicia a la verdad sino a sus propios intereses.
Por todo lo dicho y teniendo en cuenta que la Mente nos distrae de lo realmente importante y nos hace perder el tiempo, podremos ahora preguntarnos cómo invertir el Tiempo y cómo salir de esa parte de la Mente que nos desconecta de la Realidad.
Es la CONCIENCIA la que percibe el conocimiento de forma directa.
La Conciencia, en la medida que la vamos depurando y desarrollando es Luz; da claridad y simplifica las ideas y los pensamientos hasta enfocar con precisión la Verdad.
La CONCIENCIA nos lleva a un estado de comunión con la Realidad.
La Mente inferior, donde se asientan los miedos y la inseguridad, van desapareciendo de forma natural. Entramos entonces en un estado de conciliación y de desapego. Las máscaras que utilizábamos de cara al exterior las dejamos atrás.
Para hacer este trabajo necesitamos invertir tiempo en nosotros mismos.
Para comenzar a navegar por nuestra Mente y descubrir cómo funcionamos… y darnos cuenta de que NO SOMOS LA MENTE … de que tenemos una Mente a nuestro servicio… A partir de ahí podemos comenzar a reconocernos y reconstruirnos con ayuda de la Conciencia que somos.
Un comentario en “Invertir tiempo en uno mismo.”