Aclaremos conceptos

amor-unidosEstamos hechos un lío. Demasiada información sin procesar en una mente  sin gran capacidad para pensar y dilucidar. Mientras no vaciemos  nuestro sistema nervioso de todos los conceptos -ya caducos- que nos han ido introduciendo en nuestro cerebro y que nos mantienen en un mundo ilusorio, no tenemos capacidad real para llegar a ser en esencia quien somos.

La mente está para razonar. Discernir. Reflexionar. Crear. Inventar. Pensar… Pero una mente sin desarrollar, juzga. Rivaliza. Distorsiona. Se miente.  Interpreta. Disimula  y se engaña a sí misma.

El Yo observa a la mente … la controla o ella le descontrola …. la pone a su servicio o ella le domina.

La mente sin desarrollar te debilita, te agota, te enferma, te excita, te obsesiona, te angustia…

Pero el ‘Yo Superior’ (tu Alma)  que la observa, la desarrolla, la conduce y la hace trascender lo ilusorio. Conduce a la mente a encontrarse con la Intuición y descubren la Luz (energía elevada) que produce la Conciencia. Desde esa Luz aparece el conocimiento intuitivo.

Aclaremos conceptos; si hablamos a nivel del Plano físico, la vida, el mundo y el ser humano, tienen una interpretación básica y posiblemente distorsionada.

Pero si nos estamos refiriendo al Ser Humano, desde el Plano espiritual, -cuando ya ha trascendido el Ego- la visión del mundo, la vida y el Universo es otra, indiscutiblemente. Desde la Conciencia se percibe la Realidad sin fisuras.

Vernos  desde una dimensión superior, más allá de lo aparente, nos proporciona  una visión neutral de nosotros mismos, sin adornos ni justificaciones emotivas e infantiles.

Busquemos la ecuanimidad, la integridad y todos esos valores ya casi olvidados como la honestidad con nosotros mismos. Entonces sí, seremos UNO.

 

 

La Luz

hombre-tatuajes-lloraNo nos acomodemos en la aparente paz que ofrece  la rendición. No, que tu Ser no se rinda.

La luz no se modifica aunque alumbre la suciedad. Así que, si la Conciencia es Luz y el ser humano es Conciencia,  nada debería alterar nuestro estado de  pureza …

La toxicidad y la herrumbre, de nuestros pensamientos y sentimientos (rabia, odio, celos, envidia, etc),  son producto de una mente débil -atada a condicionamientos- y de un corazón vulnerable, abandonado a la deriva …

Tenemos una conciencia básica y dependiendo de su nivel de desarrollo así serán nuestros pensamientos, emociones, actitud, valores…

Es la Conciencia desarrollada la que transforma la mente, la que te ayuda a trascenderla para ir a conocer otras dimensiones de ti mismo.

Cuando el estado mental básico es sometido al Yo Superior, es capaz de percibir y enfocar su atención más allá del flujo de pensamientos y éste es el aspecto ‘luminoso’ de la mente. Entonces se abre ante uno el conocimiento intuitivo …

Practica la atención plena. Sé observador de ti mismo. No te rindas.

 

 

 

 

 

Yo Superior / Mente Superior

metatron ascensionSucede que al ser adentrados en la mente superior aparece -inesperadamente- un»nuevo proceder».

Un proceder de la mente superior que te brinda más fuerza de voluntad. Una fuerza de voluntad NUEVA porque hasta ahora desconocíamos nuestro potencial y ahora se hace evidente.

No hay esfuerzo, no hay resistencia, no hay diálogo interior para justificar el no hacer lo que habías planeado hacer: haces lo que tienes que hacer porque viene dictado por la mente superior o el Yo Superior, como la mejor idea. No hay lucha.

Soy Observadora y soy testigo de cómo me desenvuelvo guiada por la mente superior, cómo me desenvuelvo en este nuevo estado .

Y observo y siento cómo la mente inferior se deshace y se integra en está fuerza mayor. Me hago consciente de cómo mi YO responde a esta nueva energía vital que me anima e impulsa.

Desde el Yo Superior se hace fácil entrar en un estado meditativo o contemplativo para conectar con el corazón espiritual.

Todo sucede en su momento. No tengamos prisa pero tampoco nos estanquemos . Confiemos pero estemos atentos. Sin sobre-esfuerzo pero desde la constancia.  Y siempre agradeciendo.

Seres de Luz

hombre guerrero jovenLas formas y todo lo material nos atrae, aun sabiendo que pertenecen al mundo de lo Ilusorio.  Ponemos toda nuestra atención en las necesidades que vamos creando al mismo tiempo que decimos querer  mejorar nuestra existencia.  Intuimos que ‘algo’ no nos deja avanzar;  nos sentimos velados a saber la razón y eso nos hace sentir confundidos o incapaces de intentarlo …

Si queremos ir al encuentro de nuestro Espíritu, el  propósito debe ser firme. Y en primer lugar tenemos que saber que la Conciencia -que es la que tenemos que desvelar- no tiene forma. La Conciencia es la esencia de ti mismo; tu Luz.

Esa revelación de qué está sucediendo conmigo que todo me sale mal y  no consigo salir de la infelicidad y la frustración … sucede cuando tomo consciencia de que soy un ser de Luz.

No es normal que ese conocimiento suceda de un momento a otro, ni siquiera en una sola experiencia, es todo un proceso que puede llevarnos toda la vida, si es que queremos contabilizarlo en el Tiempo.

Por encima de la Razón y la Lógica del Plano material, existen la Intuición y la Percepción de otros mundos al que sólo tenemos acceso desde nuestro Yo Superior.

 

 

El despertar de la Presencia

mujer mariposa azulEl despertar de la Conciencia abre las puertas a la ‘Presencia‘. Da igual cómo la llames o la identifiques, SIENTES SU PRESENCIA en tu interior con total certeza y ¡sabes¡ que es Ella     -la divinidad en ti-.

Tu ‘Yo’ es el sujeto que vive mecánicamente hasta que comienza a experimentar su sentir profundo y  a partir de ahí, se desarrolla, se expande su Luz espiritual.

Entonces comienza a manifestarse un Yo superior que es capaz de percibir más allá de lo material. Ahora estás atento a las señales de la Naturaleza.  Comienza a vibrar desde lo más profundo de tu ser una energía de Amor y Compasión hasta ahora desconocido.

Si te sientas en silencio ante la  Presencia dentro de ti, llevando tus cinco sentidos hacia adentro, ella encenderá la Luz de tu espíritu, para que el conocimiento intuitivo te guíe y llegues a ser tu propix maestrx bajo Su protección.

¿Cómo conocernos a nosotros mismos?

mujer jovenA la mente hay que desarrollarla porque por sí misma no quiere adentrarse en áreas desconocidas. Así que si nuestro mundo mental es limitado y se resiste a ir más allá de lo que conoce,  como no hagamos un esfuerzo por ampliarlo y por crear nuevos y mejores hábitos, nos quedaremos estancados en un espacio que se hará cada vez más obsoleto y denso.

Para comenzar a entendernos a nosotros mismos debemos partir de la base de que somos energía y de que estamos formados  por varios cuerpos: físico, mental-emocional, astral-etéreo y espiritual. Existen prácticas y métodos para experimentarlos, no es cuestión de creencia ciega o de fe.

Igual de importante y vital para el desarrollo de nuestra Conciencia es  comenzar a observarnos a nosotros mismos: cómo actuamos, cómo reaccionamos, cómo nos movemos y cómo son nuestros humores, etc. para que poco a poco podamos distinguir y separar  en nosotros al “personaje”  del ser esencial. Es decir, identificar los patrones y creencias heredadas para poder deshacernos de todo lo que no nos pertenece y nos limita. Deshacernos de todo hábito dañino e inútil.

Es así como nuestra Conciencia, al clarificar la mente y desarrollar el yo-inferior,   comienza a crecer y a domar al cuerpo mental  para ponerlo al servicio del ser.

Si hasta ahora lo primordial era TENER y HACER,  empujados por la idea   imperante de «llegar a ser»  en el futuro… y  poder ser  feliz, realizado, importante, rico,  etc. Al variar el orden de prioridades,  conseguiremos, en primer lugar, SER quien somos y luego hacer  y tener  de acuerdo a nuestros propios planes y deseos.

Cuando ponemos la mente a nuestro servicio y logramos una percepción ampliada y sensible de nosotros  mismos y de los demás, la intuición,  igualmente está despierta y nos dejamos guiar por ella. La mente opina desde los prejuicios pero la intuición, que nace en el chakra del entrecejo y está conectada con el corazón y con la fuente de la Verdad, sabe, tiene conocimiento.

Cuando nos situamos en nuestro Centro, despierta la escucha interior de la intuición,  vemos como válidas  las ‘coincidencias’ y vemos en ellas las señales que la Naturaleza nos hace llegar. Cada acto cotidiano de nuestra vida es consciente, está cargado de pensamientos positivos y actuamos desde una actitud sincera y honesta. Nunca egoísta. Sabiendo que eso mismo es lo que atraeremos.

Cuando comenzamos a conocernos a nosotros mismos,  el mundo exterior deja de ser relevante y de forma natural vamos al encuentro de nuestro maestro interior.

A partir de ese momento  es cuando nuestra Conciencia, nuestros  pensamientos y nuestras emociones estarán vibrando en la frecuencia del Amor Incondicional, estando la mente y el corazón conectados y formando un Canal.

Ahora es cuando nuestro Yo Superior  gobierna en nosotros y tiene el poder de manejar nuestra salud física y emocional y crear felicidad  y paz interior de forma permanente.

 

Un poco de mi sentir

yo.fran espaldasHan pasado muchísimos años desde que elegí entrar en el Camino de la espiritualidad y el crecimiento personal. Son muchas también las experiencias vividas que me han ido confirmando y afirmándome que ese es el verdadero Camino… por el que se puede transitar de muchas formas pero donde el propósito y la intención es una: evolucionar como ser humano. O sea, salir de la mediocridad.

Comencé siendo muy joven, desde la confusión total. Desde la frustración y también desde la rabia, el desánimo y hasta desde la desesperación … porque este mundo -esta sociedad- me parecía absurda y extraña a mi sentir y no lograba encontrar mi lugar ni conseguía encontrar un sentido a mi vida.

Pero todo eso ya quedó muy lejos. Ahora mismo, que ya llevo más de  tres cuartas partes de mi vida vividas, estoy en la posición de ayudar a otros facilitándoles ese comienzo. Es curioso, porque cada persona llega explicando su problemática personal, los sufrimientos que padecen y todas las circunstancias particulares de su vida…

Les escucho pero la respuesta y consejo siempre es el mismo, de alguna manera no hay diferencias. No hay distinto consejo ni siquiera para los distintos conflictos y enfermedades porque sólo hay una única raíz a todas las infelicidades del ser humano.

Conócete a ti mismo, les digo, empieza por ahí. Ve al encuentro de tu ser esencial. Conecta con tu corazón y sé tu mismo. Escúchate. Ámate. Dedícate tiempo, en silencio, encuentra la paz y la felicidad en tu interior…

No hay otra Verdad. No hay otra respuesta ni otro camino. Hazte responsable de tu felicidad. Ve hacia adentro …

Relativiza todo lo que viene del exterior que es todo ilusorio. Porque nada -nada real- puede ser una amenaza; en esto radica la paz interior que nos acerca a nuestro Yo superior, a nuestra esencia divina …

La valoración del Yo

ser de luz 5

Solo desde  el conocimiento de nosotros mismos es posible valorar el ‘yo’ y ponerlo al  servicio del Ser.

Llamamos ‘yo inferior‘  a una mente poco  desarrollada-  dominada por el Ego. Moviéndose en la dualidad, la distorsión y el desorden mental por lo que no es capaz de concentrarse. Vive de forma  inconsciente, entre el pasado y el futuro.

Cuando ese yo inferior es cultivado y guiado desde alguna disciplina, reforzando la voluntad, el control mental y la atención dentro de los valores intrínsecos a la Conciencia, ese ‘yo’ se expande, transformándose en un ‘Yo Superior‘. Siendo ya capaz de conectarse con el corazón y entrar en el Silencio y la quietud del Alma.

Podemos valorar y entender el ‘yo’ cuando hay comprensión de uno mismo. Podemos comenzar a distinguir las señales que nos envía nuestra intuición -a través del Yo Superior- diferenciándolas  de lo que son solamente reacciones impulsivas del Ego.

Los pensamientos negativos bloquean la energía vital. Las actitudes y sentimientos negativos como inseguridad, angustia, ansiedad, depresión, desconfianza, son creados por la desvalorización o desconocimiento de nuestro Ser.

Comencemos por hacernos conscientes de que «Yo no soy mi mente» «‘Yo Soy’ la Presencia de la parte divina que hay en mi».

Debemos dejar de identificarnos con el ‘yo inferior’; la parte de la mente que juzga, critica, sufre, manipula, es obsesiva, tiene miedos y vive en la inseguridad.

Nuestro ‘Yo Superior’ fluye junto con nuestra  Conciencia, que es Luz, y ésta fluye con la Conciencia Suprema Cósmica. Así que, anhelemos desarrollar nuestro yo para poder alcanzar un estado elevado como seres humanos.

 

La Presencia divina que hay en mi

hombre ante las estrellasTu verdadero Ser -tu espíritu- es parte de todo el  Universo.  Entonces, qué trozo o fracción de tu Ser se queja, se siente incomprendido, se siente abatido, sufre de soledad. Es el Yo inferior o Ego.

El «Yo Superior» que clama en tu interior, es tu Alma. El Alma siente el anhelo de elevarse y volver a sus orígenes.

El Alma es la que «sufre» añoranza,  al permanecer estancada y no poder expandirse y diluirse en la Conciencia Suprema. Debe ser liberada de todo condicionamiento y miedos que la mantienen maniatada.

La sanación espiritual tiene lugar con la Luz de la energía cósmica del Amor Puro Universal. Podemos crear esa conexión/Canal para que fluya esta energía superior,  ésta es la que reactiva nuestra energía vital para poder seguir avanzando. Hay que despertar la Conciencia.

La Medicina del Alma tiene efecto cuando el Ego deja de poner resistencias y se entrega -se abre- permitiendo que la  Luz entre en él y lo deshaga, perdiendo así la persona toda su rigidez física y mental. Es ahora cuando puede comenzar el proceso de armonización y purificación de toda energía negativa que obstaculiza la evolución del ser para poder elevarse a Planos superiores.

Yendo al cuerpo astral para contactar con el Alma de uno mismo o de otra persona, es la práctica que se utiliza en REIKI y otras disciplinas,  para  armonizar todas las  energías; refinarlas hasta convertirse en alimento para nuestro espíritu.

Esto nos permitirá descubrir nuestra dimensión no racional. Desde nuestro Yo Superior podremos centrar todas nuestras energías dispersas. Estaremos listos para escuchar y  ver, con nuestros sentidos internos desarrollados. Solo entonces estaremos abiertos y receptivos a  la Verdad.

Desde nuestro Yo Superior se expresa nuestro Ser, nuestra Alma, nuestro maestro interior, la Presencia divina que siempre está protegiéndonos, a la espera de que conectemos con ella, que entremos en comunión y nos dejemos guiar.

El Ego quiere lucirse

mujer dibujo en naranjaEl Ego se manifiesta desde la personalidad, creyéndose importante de forma desmedida y engañosa.

El Ego invade las mentes débiles y domina desde ellas. Un mal entendido amor por sí mismo -ese personaje que uno cree  ser- es el causante de nuestras desgracias y sufrimientos.

Cuanto más poder tenga el Ego sobre la mente más limitada y constreñida estará nuestra verdadera naturaleza.

Si el ego representa al yo inferior, con toda su negatividad, egoísmo e impulsos básicos, su opuesto es el Yo Superior, cargado de sensibilidad, creatividad,  compasión, generosidad e intuición.

Por lo general, es el yo inferior quien domina y se resiste a cualquier idea de cambio, no dejando espacio ni posibilidad, desde el engaño y la ilusión,  a  que el Yo o Mente Superior se desarrolle.

Para que entendamos las diferencias entre uno y otro diremos que el YO INFERIOR es complicado, denso, oscuro y le hace fuerte las energías del sufrimiento, miedo, de odio, de resentimiento, etc. Mientras que el YO SUPERIOR es sencillo, claro, transparente y su energía es la del amor, la alegría, la aceptación y el contentamiento.

Para las personas que, después de toda una vida de sufrimiento y frustración, han decidido comenzar  un camino espiritual y de crecimiento personal, no deben desanimarse. Estén atentos,  porque el ego utilizará su arma preferida para obstaculizar el avance: LA DUDA Y EL DESÁNIMO.

El mayor enemigo está dentro de nosotros y ese es el Ego. Acabar con él es el mayor desafío que se nos puede presentar. Y la mejor arma está en ser Observadores de nosotros mismos para fortalecer nuestra Conciencia, que es Luz.

Comenzar a vivir desde la Conciencia de Ser, es un ejercicio mental  que precisa de esfuerzo y disciplina al principio. Conozcamos las trampas de nuestro enemigo. Enfrentémonos y sintámonos capaces de salir victoriosos. Duele ver que no somos tan perfectos como creíamos. Duele reconocer nuestros fallos y debilidades. Aceptarnos como somos y querer mejorar es la actitud ideal.

Escuchemos la voz de nuestra Conciencia. Digamos «Yo no soy mi mente; tengo una mente a mi servicio».