No más sufrimiento

Me ha costado toda una vida pero por fin lo entiendo y me siento libre del sufrimiento.

La Mente es la que lo complica todo. La que crea el trauma. La que dramatiza y magnifica los conflictos. La Mente es la que distorsiona, malinterpreta, la que se hace la víctima. La Mente es la que perpetua el enfado, los reproches, la envidia, los celos … Y todo eso crea el sufrimiento,

¿Cómo acabar con todo este sinsentido? ¿Acaso estamos aquí para sufrir? ¿Qué hace que nos abandonemos, nos rindamos y caigamos en la infelicidad o la desesperanza?

Lo dicho mil veces YO NO SOY MI MENTE.

De acuerdo, lo estoy diciendo desde el razonamiento (desde la misma Mente) así que eso no me sirve: me está engañando (ella misma repitiendo «vale, yo no soy mi mente«) para luego, cuando surge de nuevo el conflicto volver a caer y eternizar el drama.

Vamos a observar lo mismo desde otro ángulo «Yo no soy mi mente» lo digo desde el corazón. No como un pensamiento de mi mente sino como un sentido de mi corazón o de mi intuición o -mejor aún- digo «yo no soy mi mente» desde mi Conciencia, que reconozco ahora como mi Ser.

Hay que practicar. Ir hacia el interior, sentirlo … ¿Qué parte de mí vibra al decir yo no soy mi mente? … ¿Qué entiende mi corazón cuando escucha ese pensamiento, cuando doy esa orden «yo no soy mi Mente«?

Hay que practicar y guardar silencio. Practicar y guardar silencio. Practicar y guardar silencio, yendo hacia dentro, prestando oído al corazón hasta que nos responda.

«Yo no soy mi Mente» … y de pronto ella misma se coloca en su sitio, deja de ser dominante. Ya el enfoque no está sobre ella sino que nos enfocamos en nuestro corazón y en nuestra Conciencia.

Y, ni el corazón ni la Conciencia, están por la labor de sufrir sino de AMAR.

La necesidad de AMOR

Tu soledad y la mía. La necesidad imperiosa de sentirnos amados. El hastío del momento en el que sentimos el vacío dentro de nosotros. Todo ello contribuye a que se actúe con precipitación desmedida y uno se aferre a espejismos de oasis por culpa de sentirnos sedientos. Sin capacidad para sopesar nuestras emociones que nos empujan al desatino sin control.

Es imprudente, arriesgado, poco reflexivo, inclusive insensato e irresponsable, dar rienda suelta a los sentimientos que no están basados en el Amor sino en la simple necesidad de amor físico del momento, que es algo bien distinto… hoy en día se confunde más que nunca (sexo reemplazando el amor) lo que crea mayor sentimientos de insatisfacción e infelicidad al corazón.

¿Cómo llenar ese vacío cuando no hay amor por otro a la vista? Existe un tremendo desgaste debido a la impulsividad, a las decepciones, los fracasos, las expectativas, la falta de comunicación sincera, los miedos …

¿Y qué hay del amor que debiéramos sentir primeramente por nosotros mismos? Éste también es un aprendizaje pendiente. Si no nos valoramos a nosotros mismos difícilmente atraeremos a la persona adecuada. A veces, un error en la elección de la acción apropiada sea la causa de la infelicidad que nos lleva a tocar fondo.

La falta de claridad mental, el no querer ver nuestra realidad, el no querer asumir que el final de una forma de vida llega cuando tomamos conciencia de que ya hemos sufrido lo suficiente y ahora es tiempo de amarse y amar de verdad.

Nuestra mejor versión

No tenemos que construirnos sino re-construirnos. Destapar nuestros talentos. Romper limitaciones impuestas y dejar salir nuestra propia creatividad y sentido de la vida.

Ya somos espíritus, sólo que la espiritualidad hay que despertarla. Hay que encontrarla dentro de nosotros; haciendo un trabajo de conocimiento interior, y darle su espacio.

Despertar la Conciencia, pues eso es lo que somos: CONCIENCIA. De ahí la necesidad de reconstruirnos: deshacernos de dogmas, creencias, falsos conceptos, fantasías infantiles … necesitamos madurar.

No insistamos en lo que ya claramente ha quedado obsoleto, innecesario y sólo nos lleva al sufrimiento e infelicidad. Que los cambios sean bienvenidos para tener una mejor calidad de vida. Nos lo merecemos.

Un árbol se da por contento brindando sombra. Pero el ser humano es perfeccionista y competitivo -así hemos criado a nuestros hijos- y por ello el humano nunca llega a sentirse satisfecho consigo mismo.

Como terapeuta soy testigo de ello; en la inmensa mayoría de personas que he tratado, la raíz de su infelicidad y vacío, era esa sobre-exigencia consigo mismas y también con las personas más cercanas. Por otro lado, además de ese estado de insatisfacción casi permanente y que se toma por «normal», está la rigidez mental que no permite el hacer una revisión imparcial de nuestros actos para poder ser consecuentes con lo que pensamos-decimos-hacemos.

Hay que hacer un reseteo de nuestro carácter, nuestra personalidad, reacciones. Para ello tenemos que hacernos Observadores de nosotros mismos, lo más imparcial posible, y nos sorprenderemos de hacernos conscientes de lo poco que nos conocemos.

¿Cuál es nuestra forma de reaccionar? ¿Cuan racionales e inflexibles somos? ¿Cómo son nuestras emociones? ¿Cuál es nuestra capacidad de comunicarnos con nosotros mismos y con los demás?

Primero SER: Ser Paz. Ser Alegría. Ser Amor. Ser Felicidad. Ser uno mismo. Ser desde la Libertad de Ser.

Luego HACER: Hacer lo correcto. Hacer lo que nace en el corazón. Hacer de forma responsable.

Los límites los ponemos nosotros, y serán los correctos desde el conocimiento que tengamos de nosotros mismos. A partir de ahí actuaremos desde la aceptación, siendo nuestra mejor versión.

Atender al Alma

«Una vida significa muy poco en el extenso ciclo del Alma».

El Ego sufre por actitudes emocionales erróneas … actúa llamando la atención produciendo malestar en los órganos … se manifiesta a través de la crítica, el odio, la rabia, la envidia y la codicia. Limpiar y ajustar el Ego se puede hacer sin necesidad de dramatizar ni perder nada.

Pero al Alma herida sí la vamos a sanar sin demora. Porque de ella depende los aspectos esenciales de la vida.

Los conflictos del Ego no nos deben causar irritación y tendríamos que aprender a solventarlos de forma rápida, sabiendo que es nuestro orgullo el que sufre. Y no vale la pena gastar tiempo y energía sino lo justo, sin involucrarnos demasiado en las cosas del Ego. Se trata de los vaivenes naturales de la vida, que solo afectan al «personaje» en nosotros.

Pero lo que concierne al Alma y al corazón, entonces sí estaremos atentos y solícitos.

Al Ego le daña su ignorancia, la sobre-valoración de sí mismo. La falta de reconocimiento, que uno no necesita cuando uno sabe quien es.

Pero al Alma y al corazón les daña la falta de Amor. Y esto sí requiere cuidado.

A veces no sabemos dar y a veces no nos sentimos merecedores de recibir.

Si el AMOR es la base proveedora de nuestra existencia y de nuestra felicidad, y el ALMA nuestra esencia inmortal, cuidémosla, atendámosla, hagámonos conscientes de ella y el Alma nos guiará.

Próximo nivel de Conciencia

¿Estás preparado para experimentar el cambio necesario para pasar a un nuevo nivel de Conciencia?

No queríamos reconocerlo pero cada día estaba más claro que nuestras vidas no iban por buen camino: ansiedad, estrés, frustración, desánimo, depresión, infelicidad …

Después de más de cuarenta días en quietud forzada, vamos aprendiendo poco a poco a ser más pacientes, más tolerantes, más nosotros mismos cuestionándonos cosas esenciales no sólo para nuestro bienestar personal sino, lo más importantes, comenzando a pensar en los demás también.

Nuestra sociedad. Nuestra humanidad. Nuestro planeta.

¿Cuál es el siguiente nivel de Conciencia que podemos alcanzar?

Tercera, Cuarta y Quinta Dimensión. El SALTO CUÁNTICO DIMENSIONAL que nos vienen anunciando significa un cambio de estado. Es un cambio de frecuencia energética que nos lleva de la 3D (cargada de emociones y miedo) a una 4D (despertar de la Conciencia) y a una 5D (Amor Incondicional). Se le llamó «Salto» por ser el cambio instantáneo o brusco. Este cambio trata del «desorden» mundial de este momento que ha colapsado los sistemas, a todos los niveles, globalmente. Tomó la forma de un virus, pero eso es lo de menos, el cambio tiene que suceder.

Si conseguimos vibrar sincronizados avanzaremos más ligeros y conseguiremos experimentar la elevación de nuestra frecuencia, simplemente siendo Observadores de que nuestros pensamientos se vuelven menos egoístas, más calmos.

Podemos descender o ascender. Podemos estancarnos o avanzar. Podemos seguir en la oscuridad (ignorancia) o movernos hacia la Luz (tener claridad mental). No pongamos resistencias, nos tenemos que preguntar di estamos dispuestos a ser parte activa para nuestra evolución como humanos.

Tomemos Conciencia de que formamos parte de una UNIDAD INTELIGENTE CÓSMICA DE PURO AMOR. La UNIÓN hace la Fuerza.

¿Qué es normal?

Normalizar una forma de vida no garantiza sea la correcta. Y la prueba está en que habíamos normalizado la infelicidad, los miedos, la ansiedad, el alejamiento de nosotros mismos: llevar una vida mecánica.

Habíamos aceptado el estrés y la culpa como parte de nuestra carga. Habíamos aceptado vivir para trabajar.

Habíamos regularizado el tiempo de los hijos acorde a nuestras necesidades y no la de ellos. Y esa es quizás la parte más tremenda o igualmente horrenda a cómo se han ido encaminando nuestras vidas, las de la inmensa mayoría de los trabajadores, sin más posibilidades que las de sobrevivir.

Ahora, desde nuestro confinamiento y detención del tiempo y de la economía para todos, podemos ser observadores de lo que nos pareció NORMAL como vida, creyendo que no podía ser de otra manera.

Ahora, una nueva Era se presenta ante la Humanidad y muchos están descubriendo en sí mismos, virtudes como la solidaridad y la compasión.

Ahora, muchos están cambiando el orden de sus prioridades, descubriendo el valor de la familia y de que, llevar una vida más sencilla y calma, no solo es posible sino que además nos hace más felices.

Podemos vivir más acordes a nuestra naturaleza.

Hemos estado perdidos en la Mente, ahora es tiempo de ir al corazón.

Mujeres y esencias florales

La Mente normaliza circunstancias que son perjudiciales y no nos queremos dar cuenta de ello. Una Mente débil justifica el ser infeliz y se habitúa a padecer molestias inútiles o exceso de diálogo interno torturante.

La persona débil emocionalmente en su miedo al cambio (a lo nuevo) busca inconscientemente personas y situaciones parecidas que le hacen repetir una y otra vez los mismos errores.

Teniendo en cuenta de que las emociones tóxicas se vuelven patrones de conducta, es una de las razones por las que las Esencias Florales, tienen un papel importante para la salud emocional y por lo tanto para la salud integral, al despejar la Mente y los Centros Energéticos de todo lo negativo.

Como lo que realmente nos sana es la toma de Conciencia de nuestro estado de salud y el propio compromiso a querer sanarnos, es aquí donde las Esencias Florales nos ayudan a cumplir con este objetivo.

En mis veinte años como terapeuta floral, principalmente he tratado a mujeres jóvenes y de mediana edad, profesionales y también amas de casa, divorciadas, solteras, casadas o viviendo en pareja. Madres, hijas… y casi todas con el mismo problema de fondo.

Las características principales que les trae a mi consultorio son la ansiedad, depresión, estrés, miedos e inseguridad, malestar consigo mismas, vacío emociona, diferentes trastornos mentales ,… además de dolencias en el cuerpo físico.

Frases usuales: «toda la vida arrastrándome», «me siento enjaulada», «soy mi peor enemigo», «estoy muy enfadada con mi padre/madre», «me da pánico mirarme al espejo», «no puedo estar conmigo misma», «me he perdido, no sé quién soy», «agotamiento mental y emocional». «Me siento desbordada», «no sé qué me pasa».

Causas puntuales: Rupturas conflictivas, situaciones repetitivas sin resolver, miedo a rehacer la vida, bloqueos emocionales, frustración y pérdida de motivación, falta total de autoestima. Obsesiones. Jaqueca. Maltrato físico y psicológico. Tratamientos psiquiátricos que anulan la voluntad y deseo de vivir.

Raíz del problema: Auto-exigencia. Sentimiento de culpa. Rabia profunda contenida. Resentimiento venenoso. Miedos. Traumas infantiles.

¿Cómo reaccionamos ante situaciones que nos desbordan o simplemente nos enfadan? ¿En qué medida permitimos que nos afecten y en qué órgano del cuerpo lo sentimos? ¿Cómo deshacernos de ello?

A nivel consciente pedimos ayuda. Pero a nivel inconsciente, cuando todavía no tenemos conciencia de nosotros mismos, hay resistencia a reconocer y enfrentarnos a nuestra realidad.

Cierra los ojos, Pon atención en el centro de tu pecho y comienza por preguntarte y valorar (del 1 al 10);

¿Con qué nivel de auto-exigencia vivo?

¿Me amo y me siento merecedora de ser feliz?

¿Estoy lista para algo nuevo?

Y busca ayuda si la necesitas.

Movernos hacia adelante

corazon con alas¿Te sientes conforme y contento contigo mismo?…Más bien es la frustración la que nos invade a todos en alguna medida, también el desaliento y la resignación ante la insatisfacción que intentamos esconder y preferimos desconocer.

¿Cuánto estamos avanzando como humanidad? ¿Acaso no queremos pasar al siguiente nivel de Conciencia y evolución? ¡Ah, pero se requiere dedicación y estusiasmo!

¿Puedes imaginar el beneficio que te produciría el alcanzar el siguiente nivel de Conciencia?

¿Estamos preparados, en suficiente número, para sufrir en nuestro cuerpo físico el cambio necesario para poder elevar nuestra frecuencia vibracional?

Experimentar el paso a un nuevo despertar de la Conciencia es posible cuando uno se permite vivir, sin miedo, esta transformación interior.

Explorar confiados nuestras posibilidades y potencialidad, es la única manera de avanzar.

¡Que se manifieste en ti y en todos el espíritu del Aliento divino que está ahora mismo presente!

Auto-exigencias

mujer-corriendoLa auto-exigencia,como exceso,  fácilmente   deriva en enfermedad  si no  detenemos a tiempo esas auto-imposiciones desmedidas y ese ritmo feroz que nos obligamos seguir.

Además de crear insatisfacción e infelicidad, finalmente puede crear crisis de ansiedad y otros  trastornos mentales como  miedos, obsesiones, depresión y fobias. ¡Y hasta los niños ya comienzan a padecerlas!

De ahí la importancia de conocerse a uno mismo. La importancia de ser Observadores del personaje en nosotros que, en este caso, exige más y más, pero no encuentra el límite para sentirse satisfecho consigo mismo y disfrutar de la vida.

Son patrones quizá heredados o característica del propio carácter y naturaleza, que pasan a un primer plano de forma inconsciente y exagerada. Querer destacar, necesitar reconocimiento, sentirse valorado … puede ser  un aliciente y nos ayuda a avanzar, pero cuando ya se convierte en un desafío más allá de nuestras limitaciones y una sobre-exigencia y sobre-esfuerzo, termina por repercutir desfavorablemente en nuestra salud física, mental y emocional.

El sistema educativo de competitividad no favorece en nada. El que los padres hagan comparaciones entre los hermanos o exijan a sus hijos más allá de sus capacidades, son el caldo de cultivo para tener adultos infelices.

Conócete a ti mismo. Acepta tus limitaciones y disfruta de tus talentos. Desarróllate al ritmo que tú te marques, de manera que te permita disfrutar  de la vida.

Valora las pequeñas cosas de la vida. Respira hondo.

 

 

Sálvese quien pueda

hombre cima corazonTodos hemos sido avisados. El Mensaje ha llegado a oídos de todos. Y ahora hace falta pasar a la acción.

¿Qué quiere decir  PENSAR EN UNO MISMO… ? Nos hicieron creer que era muy egoísta pensar en uno mismo pero -en este preciso momento- quien no ha hecho nada por sí mismo (conocerse, amarse, salir de todo condicionamiento represivo e insano, reforzando los valores éticos, creciendo espiritualmente…) está perdido.

Todos hemos sido avisados de que amásemos al prójimo como a nosotros mismos, y no entendimos el mensaje. Nos hemos alejado de nuestra esencia y espíritu, quedándonos indefensos, para intentar sobrevivir en un mundo exterior cruel y egoísta.

Ahora es el momento de alcanzar la Conciencia Crística para nuestra propia salvación, elevando nuestra Conciencia hacia la Compasión y Amor, sintiendo somos uno con todos los seres vivos.

Todo aquel que se resiste al cambio, desde su baja frecuencia vive en conflicto consigo mismo.  Actuando desde la mente inferior reacciona sin pudor; dejando salir al exterior su odio y su maldad: desde el Miedo y la ignorancia.

La Conciencia celestial se despliega y revela la Luz a quien está atento y abierto a someterse voluntariamente a lo Superior. Ahora toca «ascender» desde el cuerpo material al Espíritu en nosotros para  entonces fusionarse con Dios que  es la CONCIENCIA CÓSMICA.

Sí, tenemos que pensar en nosotros mismos y dedicarnos ahora a la purificación de nuestra mente y corazón -nuestra sanación mental y emocional-. Reconociendo que estamos  atrapados en algún nivel de la oscuridad, en la infelicidad.

El ser humano ha perdido la Fe -en sí mismo-  y por ello está vagando sin encontrarle sentido a la vida. Ha perdido el amor por sí mismo y por ello se siente desgraciado, abandonado, sin saber qué ocasiona estos sentimientos y estado.

Hagamos uso de la oración.- La plegaria que dirigimos al Universo la utilizamos para comunicarnos con la Inteligencia Suprema que es Amor Puro (eso que llamamos Dios). La fuerza que conlleva  la oración está determinada por la intención y sinceridad que ponemos en ella; es vibración de conciencia y será ‘escuchada’ según su intensidad.

La transformación a través del pensamiento.- No tengas miedo de pronunciar YO QUIERO SALVARME. Está en tu decisión y voluntad el hacerlo.  En la afirmación de pensamiento está la causa original que da paso a la voluntad. Desde el corazón dí: «Yo puedo salvarme. Yo soy Paz y Amor».

El poder sanador de la mente, en conexión con el corazón, se pone en acción a través del pensamiento positivo.

Ánimo.