Lo menos esperado

Desde el sumo respeto quiero compartir con vosotros algo que me sucedió anoche.

Recibí en el Messenger un mensaje de una mujer que no conocía y decía «Hola Cris. Estoy muriendo de cancer. Te admiro mucho». Le contesté «Lo siento mucho. Qué puedo hacer por ti.» Seguidamente un segundo mensaje «¿Puedo llamarte por teléfono?» a lo que accedí,

Me dijo que estaba sola en la casa y que tenía miedo de que su marido no llegase a tiempo para despedirse. Se puso a llorar, su respiración estaba muy agitada. Sentí que efectivamente estaba ya por irse.

Sin pensarlo le dije «Llamemos juntas a tus ángeles guardianes para que vengan y rodeen tu cama. Ellos te aman. Llamemos juntas a Jesucristo para que se ponga a los pies de tu cama y con su amor te envuelva. Llamemos juntas a la Madre divina para que se coloque en tu cabecera. Siente cómo entra por tu coronilla una Luz de Amor divino y va bajando por todo tu cuerpo hasta la punta de tus pies…

Mucho rato le estuve hablando y de pronto me di cuenta de que ella misma era un ángel para mi y entendí el mensaje que me hacia llegar y me puse a llorar mientras su respiración se iba haciendo más suave, más débil.

Me puse a decirle muchas veces ¡estoy contigo, estoy contigo! TE AMO, TE AMO una y otra vez hasta que se manchó… y me quedé ahí, mucho rato después, con el teléfono en la mano pegada al oído, en total silencio, sobrecogida ¡Dios mío! gracias. Me había enviado un mensaje de aviso, un toque para que no me distraiga … yo, que estaba en la queja …

Ahora sonrío y no sé explicaros porqué me nace el sonreír, pero sé que me entendéis.

Dejé un mensaje a su marido que supuse lo leería. «Gracias Jael por llamarme, te has ido en paz. Si su marido lee esto que sepa que estuvimos hablando hasta que se marchó en paz» …

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