
En mis adentros soy testigo del gradual envejecimiento de mi cuerpo. Me hago consciente del campo de batalla por el que ha pasado mi piel y mis huesos. Lo poco que me he cuidado y el sobreesfuerzo al que tantas veces me sometí. Ahora se manifiesta lo que la prisa de mi juventud y la inconsciencia y las circunstancias de los siguientes años hicieron y mi cuerpo soportó.
Siento mi corazón pidiéndome reposo, sosiego. Pero las pruebas ahora son un reto directo y me enfrentan a que aplique lo que he estado predicando: el amor incondicional.
Soy testigo de mi personaje, ya defendiendo mi Ser esencial. Ya dejándome llevar desde mi naturaleza. No me queda otra que ser honesta conmigo misma. Hay un enfrentamiento entre la Mente y el Corazón.
Mi elemento es el fuego. Fui incendiaria, a veces descontrolada e impulsiva. Ya hoy, soy el rescoldo que todavía quiere y pretende dar calor a quien se me arrime. Tomar consciencia de quien uno es te da fuerza, seguridad en ti mismo, claridad mental y emocional. Y uno entiende entonces de que no hay vuelta atrás. Lo que uno va descubriendo de sí mismo, eso queda grabado; es un añadido que reemplaza lo falso por lo real. Y es así como uno llega a reconfigurarse.
El MOMENTO PRESENTE es el espacio en el que ocurren las cosas. La Conciencia le brinda Luz.
El momento presente NO es lo que ocurren. (Las situaciones son cambiantes pero el AHORA siempre es el mismo). No es fácil de entender… el momento PRESENTE NO ES LO QUE OCURRE sino CÓMO lo vivimos.
Ocurra lo que ocurra ahora, eso no es en donde tenemos que poner la atención.
Seremos Observadores de ese ESPACIO que llamaremos CONCIENCIA. Lo que somos, ligados a la Conciencia Superior que llamamos Dios.
En lugar de identificarnos con lo que ocurre, nos haremos conscientes del Presente en sí, más allá de lo que ocurra porque en ese AHORA también existe la serenidad y el silencio. Nosotros elegimos cómo vivirlo, con qué actitud.
Y llega un momento en el que te familiarizas con ello y sabes que lo puedes dirigir y transformar… crear, según tu Conciencia (lo que consideras correcto desde tu corazón).
