Tipos de Amor

Existen tres tipos de amor: HUMANO común (amor interesado en las propias necesidades). HUMANO desarrollado (amor compartido y respetuoso hacia el otro). ESPIRITUAL (amor incondicional). DIVINO (amor puro e impersonal)

AMOR es igual a LIBERTAD. La libertad nos empuja a desear experimentar la expansión y compartir nuestra felicidad. El amor nos inspira a experimentar la compasión y ésta nos lleva a sentir la unidad con el corazón de todos en Todo.

Los actos heroicos de amor incondicional se hacen sin pensar. Si se pensasen, solo por un minuto, uno temería primero por su propia vida. La generosidad y la compasión son actos espontáneos que no pasan por la mente.

El miedo, el resentimiento y el odio, bloquean la energía del amor que debería llegar al corazón. Así que, el corazón, podría ir apagándose, bloqueado y asfixiado por las energías densas que no le permiten manifestar su esplendor y magnitud.

La persona que percibe «la belleza del Alma de la vida» ha purificado su nivel de amor egoísta a Amor Incondicional.

Amándonos, nos adentramos en nuestro mundo interior y descubrimos el Universo.

MARZO, mes de inspiración

Honramos a la Madre Tierra y a la presencia del principio femenino, como símbolo del Amor Incondicional.

Para recuperar el control de nuestras vidas sobre la manipulación y la codicia elevamos plegarias de Amor y nos responsabilizamos del control de nuestra vida.

Para que desaparezca el miedo de las mentes y los corazones y en su lugar renazca la sensatez, la esperanza y la voluntad de acción.

Para recuperar la fe y la generosidad en el ser humano, elevamos plegarias con la intención de que nuestra Conciencia sea sostenida por la Conciencia Superior Universal.

Para que el grave problema con los desplazamientos migratorios debido a las guerras y la hambruna se solucionen lo antes posible por el bien de todos y que no nos sea indiferente, nunca, el padecimiento de ningún ser vivo.

Que así sea.

Mis experiencias de vida

De siempre me sentí fascinada y curiosa por conocer el mundo dentro de las cárceles. No sé la razón pero me gustaba leer o ver películas con este tema. Cuando por fin pude entrar como voluntaria en una cárcel sentí que me era un sitio familiar. Pero se necesita tener templanza y autoridad para comunicarte y relacionarte con personas forzosamente tan endurecidas para poder sobrevivir en ese ambiente tan poco humano por un lado y tan sobrecogedor y sensible por otro.

Me formé en La Cruz Roja en «Primeros Auxilios Psicológicos» y «Atención a Mayores» y realicé un voluntariado en la Cárcel de Mujeres de Albolote, donde inicié en REIKI a algunas mujeres y las enseñé algunas herramientas para sobrellevar la vida tan llena de ansiedad que se vive allí dentro.

Fue una experiencia increíble, triste y gratificante a la vez. Frustrante pero de mucho aprendizaje. Imprescindible moverse allí dentro sin juicio y desde la compasión, viendo las miserias humanas y lo que la ignorancia y las bajas pasiones pueden hacer del ser humano.

Frustrante porque el ambiente allí dentro es tan denso .a parte de las drogas que circulan- que resulta muy difícil motivar a esas mujeres más allá de lo más inmediato como puede ser , por ejemplo, conseguir puntos de buena conducta para tener acceso a una llamada telefónica.

Experimenté cómo todo ser es capaz de mostrar su lado más tierno e inocente cuando se le brinda Amor. Pero para ello, en muchas de ellas, tienes que traspasar bastantes capas impermeables de desconfianza y miedo.

Conocí a mujeres fuertemente condicionadas por el entorno de la droga y la marginación en el que han crecido. Mujeres pertenecientes a una misma familia: hija, madre y abuela … como no conocen otra cosa, les parece normal, no hay en ellas deseo o voluntad de superación, porque la sociedad les niega también la integración. Entran y salen de la cárcel varias veces. Ni siquiera hay un sentimiento de resignación sino de acomodamiento en un submundo donde se lucha por cubrir las necesidades y placeres básicos y aceptan de antemano que así será toda su vida.

Aunque dí charlas y formé un grupo donde hacíamos ejercicios de relajación y visualizaciones guiadas, asistí principalmente a cuatro mujeres con las que conecté desde el primer momento y se iniciaron en REIKI. Tenían en común haber sido engañadas para transportar droga y fueron pilladas. Una de ellas, rusa, estaba terminando la carrera de abogacía.

Muchas mujeres estaban allí haciendo un voluntariado, y esta era la parte más conmovedora y esperanzadora; ver que existe la solidaridad y que la humanidad avanza desde el Amor desinteresado e incondicional.

Adentrarse en uno mismo

Una cueva o caverna, es un símbolo universal del lugar de unión del Yo y el ego; el punto de encuentro entre lo divino y lo humano.

Soñar o hacer un trabajo de visualización con una cueva nos da una dimensión superior del conocimiento oculto en nuestro interior, como lugar de iniciación.

Así como la montaña es el principio masculino, la caverna en la montaña representa el principio femenino, la matriz de la Madre Tierra en su aspecto protector. Entrar en ella con la intención y sinceridad de encontrar el conocimiento de nosotros mismos tiene un gran beneficio como experiencia trascendental.

Como lugar de iniciación, la cueva está ligada al corazón espiritual. Profetas, santos y visionarios se han resguardado en una cueva esperando recibir revelaciones o el estado de iluminación.

Soñar que uno se adentra en una cueva representa un cambio de estado y la victoria sobre el peligro.

Vivimos en el mundo dual de la manifestación. El simbolismo habla de que lo terrestre es sólo un reflejo de lo celestial. Lo superior contiene el significado de lo inferior. Comprender el simbolismo nos aleja de las supersticiones. Aceptar y agradecer la vida, adentrarnos en ella con valentía y curiosidad sana, nos ayuda a avanzar con confianza; sintiéndonos plenos.

Limpieza emocional

Si sentimos la necesidad de hacer una limpieza emocional, tenemos que estar dispuestos a vivir el proceso de ajustes que nuestro cuerpo físico, mental y emocional van a ir sufriendo a lo largo del tiempo que necesitemos para ello. Paciencia.

La purificación y transformación no suceden por obra y gracia de la Mente, con solo desearlo, sino que tenemos que poner nuestra intención y voluntad al completo y con toda sinceridad trabajar con disciplina y constancia en ello. Paciencia.

Aparecerán síntomas físicos debido a la «crisis emocional» que aparecerá pues comenzaremos a mover energías y emociones que estaban bloqueadas o escondidas profundamente, que no queríamos ver. Puede traducirse en palpitaciones, náuseas, zumbidos en los oídos, fiebre, diarrea … todo ello es sinónimo de purificación así que alegraros. Paciencia.

Hay que deshacerse de la carga; sentimientos de culpa, rabia, reproches, resentimiento, celos, envidia, odio, sentimiento de abandono, de no sentirse merecedor, …

¿Cómo? La RESPIRACIÓN RÍTMICA CONSCIENTE genera y estabiliza el Prana (energía sutil). La MEDITACIÓN nos lleva al desapego emocional y la ALINEACIÓN DE LOS CHAKRAS nos conecta con nuestro Ser esencial y con las energías superiores cósmicas.

Condenados a la frustración

Debemos prestar atención al estado de nuestra mente. Porque ella tiene el poder de crear nuestro estado de ánimo, mientras le cedamos ese dominio. Pero a quien corresponde la guía de nuestro Ser es a nuestra Conciencia.

Estamos condenados a la frustración si seguimos poniendo nuestros objetivos y felicidad en el mundo material, desde una mente sin desarrollar, dominados por el sentido «de los deseos».

Cuando se nos priva de lo que deseamos nos sentimos frustrados, nos sentimos fracasados, … desilusionados. La causa parece estar siempre en el exterior, otro es el que ocasiona nuestra frustración e infelicidad. O la vida misma que sentimos va en contra nuestra.

Interpretamos la vida desde una perspectiva muy limitada y egoísta; desde el cuerpo físico y el pensamiento básico. Y si es amor lo que deseamos, es un amor interesado, exigente, calculador … un amor que trae sufrimiento no es amor, llamémosle APEGO.

EL CUERPO ENERGÉTICO.- Además de tener un cuerpo físico, tenemos un cuerpo energético. Experimentemos que somos energía en cambio constante, como el universo mismo. SOMOS una expresión de esta Energía Superior que es pura inteligencia. Sintiéndolo así nuestra perspectiva de la vida y de nosotros mismos cambiará por si misma.

Tenemos por descubrir nuestro CUERPO ENERGÉTICO que nos ayudará a salir de repetir comportamientos que nos estancan en el sufrimiento y deshacer patrones que nos impiden avanzar.

Desde el cuerpo energético podemos subir a una frecuencia y vibración más alta para así ya no dejarnos atrapar por personas y situaciones que no queremos más en nuestra vida. La Conciencia es Luz y nos guía hacia una Luz mayor; la del Amor Incondicional.

El cuerpo energético es el que nos ayuda a entender y descifrar nuestro cuerpo emocional y mantenerlo equilibrado y en armonía.

La realidad de la vida es inmensamente más grande que lo que nuestra mente puede entender. Relativicemos nuestra importancia personal y fusionémonos con esa expresión dinámica que abarca el Todo y que llamamos VIDA.

Renacer

Duele deshacerse de lo que formó parte de ti y ahora ya no te beneficia ni sientes como tuyo.

Duele reconocer las carencias y debilidades. Las heridas del corazón que creíamos sanadas… pero no, siguen doliendo en lo profundo.

Duele, como cuando la mujer está pariendo, desprendiendo de sí una nueva vida. Pero ese dolor tan intenso crea a la vez éxtasis, sino sería imposible de sobrellevar.

Tu renacer estuvo gestándose ya gracias a los conflictos y sufrimiento que te han obligado y empujado a decir basta e intuir que era/es el momento de soltar y dejar salir lo nuevo que hay en ti.

Pero ahora tienes miedo a no saber qué hacer, qué decisiones tomar, a no sentirte ser merecedor -hombre y mujer- de todo el mundo de posibilidades que tienes delante.

Renacer es la nueva oportunidad que te brinda la vida. Hace falta valentía. Hace falta no tener miedo a soltar toda la carga del pasado. Quedar vacío y listo para la nueva reconstrucción. Con confianza absoluta.

Purificar la Conciencia es el primer paso para fortalecer tu decisión, si quieres realmente conseguir resultados. Ya no es tiempo de reprimir. ni dejarte influenciar por otros. La auto-disciplina ahora es necesaria. La atención plena en tu Ser esencial.

Los patrones grabados en la memoria debes deshacerlos creando hábitos nuevos, Teniendo paciencia con los objetivos claros de lo que quieres conseguir. Lo que nos libera es el descondicionamiento, el desaprendizaje, Esto quiere decir, ser Observadores del «personaje» que actúa, e ir cambiando actitudes y comportamientos que nos vamos dando cuenta NO somos nosotros.

Siéntete bienvenido. Siéntete con derecho a Ser quien eres.

Maestría del Amor

Lamentablemente el Amor se vive desde la Mente, cuando en realidad deberíamos sentir que SOMOS AMOR.

Hablar de maestría del amor puede sonar pedante pero quien se adentra en el REIKI sabe que la única manera de ser totalmente íntegro y honesto consigo mismo es a través de conseguir la maestría del Amor. Esto quiere decir que si REIKI es la energía sanadora del AMOR INCONDICIONAL, todos los que estamos en el Camino de la sanación a través del REIKI, debemos hacer uso de esta energía.

Y no es fácil llegar a ella. Porque el Ego siempre se mete por medio a obstaculizar el proceso en el que nos aventuramos todos los que anhelamos el conocimiento de nosotros mismos y de lo que significa el AMOR INCONDICIONAL; amor fuera de todo juicio, cálculo y miedo.

¿Qué sucede en la iniciación al REIKI? Lo primero es darnos cuenta de que no sabemos nada sobre el Amor verdadero y su incondicionalidad. Queremos ayudar a los demás, sentimos que tenemos vocación para sanar a los demás… pero ni se nos ha pasado por la mente que primero tenemos que hacer este trabajo con nosotros mismos.

¿Estamos preparados para recibir y dar Amor? Desde la iniciación tomamos conciencia de que en nosotros existen varios cuerpos: físico, mental, emocional, etéreo y espiritual. También diferentes Planos y dimensiones y REIKI nos enseña de forma gradual, primero a alinear y purificar nuestros centros energéticos. Segundo a generar energía y almacenarla. Tercero a transformarnos en Canal transmisor y receptor de la Energía del Amor Incondicional.

REIKI nos ayuda a experimentar que somos seres de Luz. Permanecer en el Presente en contacto con nuestro Yo Superior nos brinda un estado de Paz interior permanente.

«Yo Soy una expresión de la Inteligencia del Universo. No pongo resistencia a la transformación en mí para actualizar mi Ser».

Más que teoría

Si lees un libro sobre REIKI que sea sobre experiencias porque la teoría solo ofrece explicaciones especulativas que seguramente te van a condicionar.

REIKI debe ser vivenciado por uno mismo desde sus comienzos, sin que entre la Mente a dar exposiciones e interpretaciones de lo que es REIKI.

De la misma manera que el Amor no se puede explicar ni teorizar sino que hay que sentirlo para saber lo que es, de la misma manera, REIKI, al estar fuera de toda lógica, se tiene que experimentar para darle credibilidad y comenzar a entenderlo. Sabiendo que cuánto más se practica más se da a conocer de forma directa.

La transmisión de energía en el REIKI, tanto en una iniciación o al recibirlo en una sesión sanadora, te hace consciente de que se mueven energías que producen, como mínimo, un estado de relajación y bienestar.

Bien sea dado de forma presencial o a distancia, REIKI es Luz que fortalece el ánimo y el anhelo por seguir adelante.

Considero que la sanación por imposición de manos fue la forma de sanación de nuestros ancestros y que será igualmente en un futuro no muy lejano la forma natural de sanarnos.

Animo a todas las personas a experimentarlo, no sólo como sistema de sanación natural sino además como Camino de vida porque nos ayuda a conocernos a nosotros mismos… y el conocimiento que brinda es inagotable.

Causa y efecto

Esta Ley de la Naturaleza es tan sencilla y eficaz que sorprende que los humanos no la utilicemos para ser más atentos con nuestra conducta y así prevenir malos entendidos y enfados desagradables y dolorosas con los demás.

Es fácil de entender que, si yo siembro zanahorias, no puedo esperar otra cosa que recoger lo mismo que he sembrado.

Por esa misma lógica, si no quiero ver el conflicto que tengo delante mío porque no me siento capaz de resolverlo y lo camuflo justificándome, lo más probable es que siga enmarañándose, enturbiándose, y lo que coseche sea un sufrimiento mayor y más difícil de solucionar.

Nos sorprenden las reacciones de los demás a algunas de nuestras actitudes pero deberíamos hacernos conscientes y reconocer que los resultados están acorde a nuestro proceder.

Si somos amables y respetuosos a cambio recibiremos el mismo trato. Si nos dejamos llevar por los celos, la envidia o el enfado, de vuelta atraeremos ese mismo tipo de emociones tóxicas. Seamos consecuentes con nuestra conducta. Otros casos requieren que simplemente nos alejemos en silencio de este tipo de personas conflictivas sin buscar tener la razón.

Si entendemos y dominamos el mecanismo de nuestra mente y ego, nos evitaremos más de un disgusto. Solo así nos sentiremos dueños de nuestra vida y en paz con nosotros mismos.