Activar la Conciencia

mujer bellaTodos hemos escuchado hablar del despertar de la conciencia. Todos integramos en nuestra mente estos nuevos conceptos, los interpretamos, y los archivamos como «sabidos».

Sin embargo, mantenerlos presente en nuestra memoria, hacer que el concepto desaparezca y comience la VIVENCIA de vivir conscientemente, cada instante… es cuando, entonces sí,   descubro y asimilo lo que es el despertar de la conciencia, y lo aplico en cada momento de mi presente.

Una saturación de información no ayuda… la Mente sigue dominando.

El anhelo por ser maestro, por ayudar a los demás, por iluminarse… ninguno de esos deseos nacen en el corazón… vienen del Ego.

Todo resulta mucho más sencillo cuando es el corazón quien dirige la vida. No existen fórmulas mágicas.

A veces lo que obstaculiza nuestro propio avance es algún rasgo de nuestro carácter que se mantiene inflexible. Por eso es conveniente observarnos a nosotros mismos con desapego.

A veces el Poder de la Conciencia Suprema está actuando en nuestra vida. Por eso es conveniente estar atento y dejarle actuar; dejarnos fluir con confianza absoluta.

En el interminable vaiven de la vida todo tiene un comienzo y un final… busca entre las cenizas y descubre al Ser esencial e inmortal que eres. Tu alma y el universo aprueban un nuevo crecimiento…

Los guías espirituales

energia de luzMuchas personas se blindan mentalmente contra  todo lo que no sea material y concreto. Sus corazones bajo siete llaves. Pero estos son tiempos para reblandecer toda resistencia a conectar con nuestra alma y la divinidad.

Dejemos que nuestros sentidos se lancen a percibir, escuchar y conectar con nuestro corazón espiritual y así acceder a otras dimensiones de nuestro ser…

El plano material en el que nos desenvolvemos físicamente, es un desierto demasiado árido y cruel, por qué no permitirnos recibir las bondades que están ahí para nosotros, esperándonos contactemos con ellas, para adentrarnos más allá del plano inferior y físico.

Existen universos sin límite de  Luz. Si desarrollamos la Intuición, enfocándonos en el Centro del Tercer Ojo, podríamos sumergirnos en la belleza eterna de nuestro universo interior y constatar entonces que existe un Más Allá al que pertenecemos.

Conectar con la Conciencia en nosotros y expandirla hasta sentir que está unida y es parte de la Conciencia Suprema, que llamamos Dios Absoluto. y llegar a la certeza de que tú eres esa Conciencia,  esa divinidad y esa Luz sin límites…

¿Por qué no abrirte a hacer ese  viaje a tú  corazón que es el corazón del cosmos mismo? Allí te está esperando tu guía espiritual, tu ángel guardián, tu maestro… que se manifestarán cuando tú les llames…  Los seres de Luz son energía pura de Amor. Vivimos dentro de un proceso de ascensión y superación como seres humanos. Somos seres en evolución hacia la Luz. Y el libre albedrío es que somos guíados hacia esa Luz en la medida que nosotros  deseemos que así sea.

 

¿Qué es la espiritualidad?

Jesucristo atraía a miles de personas, le seguían aunque lo más probable es que no entendiesen sus palabras. Pero él irradiaba una Luz irresistible que beneficiaba a quienes le rodeaban; llegaba paz  a sus espíritus. Les transformaba. ¿Qué más hay que entender? Así ha sido y es con mucha gente santa e iluminada; desprenden una energía amorosa que produce atracción y reconocimiento de quienes vibran «en su misma onda«.

Nuestro espíritu vibra y se regozija cuando la Luz le envuelve. La espiritualidad es parte intrínseca de nuestra naturaleza; es el anhelo más íntimo de nuestro ser esencial por mantener viva la fusión con la divinidad.

Elevar nuestra frecuencia de vibración. Percibir y sintonizarnos con las energías sutiles que nos ayudan a trascender este plano material. Purificar nuestro corazón y llenarlo de amor y compasión. Cuando nos invade un sentimiento de inquietud e insatisfacción con nosotros mismos,  es nuestro cuerpo espiritual que nos está pidiendo que le alimentemos.

¿Cómo? Yendo al encuentro de nuestro ser. Anhelando ese encuentro. Yendo hacia adentro, donde está nuestro Templo y allí nuestro Maestro-Guía (Angel Guardián). Respirar profundo y guardar silencio, en perfecta calma. Y en esa quietud y paz, podemos hablarLe desde el corazón para luego -lo más importante- escucharLe.

Las religiones y las instituciones religiosas son y nos enseñan otra cosa muy distinta. Aquí estamos hablando de espiritualidad. Somos seres espirituales y no necesariamente «religiosos».

Sé lo que digo. He sido religiosa durante 20 años. He sido creyente practicante y cumplía diariamente con todas las obligaciones religiosas (por miedo a que Dios me abandonase, me castigase, … también por agradarLe, por ser buena creyente…). Pero el calor devocional de mi corazón se fue apagando; las obligaciones asfixiaban la espontaneidad y el anhelo del espíritu se difuminó y cayó en el hábito. La oración se convirtió en rutina …

La espiritualidad y la comunión con Dios es algo totalmente personal. Ni se puede imponer ni se puede convencer con palabras de su existencia. No se puede inculcar la fe, hay que experimentarla. No se puede obligar a rezar, hay que sentir esa necesidad. No se puede conocer a Dios si no existe primero ese anhelo ardiente por fundirte en Él.