La nueva medicina energética transmite a la persona, primeramente, la necesaria toma de Conciencia para responzabilizarse de su vida. Sanar el pasado se hace fundamental para poder equilibrar completamente nuestra salud integral.
Desde la mente razonamos sobre el pasado e intentamos convencernos de que ya no existe, -que ya no nos afecta- pero sigue torturándonos o simplemente continuamos llevándolo sobre nuestras espaldas y no conseguimos liberarnos de él. Esa carga nos afecta más de lo que podemos imaginar; está interfiriendo en nuestro presente además de envenenar nuestra salud física y emocional.
Y es que las energías negativas de nuestro pasado siguen en nuestra mente; dolorosamente presente. Siendo las causantes de nuestras enfermedades, resulta imposible batallar contra él o eliminarlo desde la mente; así lo único que vamos a conseguir es reprimir y bloquear más el necesario flujo de energía vital para mantenernos saludables a todos los niveles.
Cuando han quedado enquistadas en nuestro corazón, heridas emocionales que nos ha sido imposible sanar por nosotros mismos, debemos pedir ayuda a algún profesional. Existen técnicas de sanación muy sencillas que nos llevarán al hecho y, desde el código del amor, podremos sanarlas.
Todas las energías negativas que se han ido acumulando en nuestro interior; miedos, resentimiento, baja autoestima, odio, humillación, … están ancladas en algún órgano de nuestro cuerpo o están bloqueando algún centro energético.
Pero, la verdadera sanación, es darte las herramientas para que tú, desde tu conciencia, te sanes. No desde el consciente racional sino desde tu amor y respeto por ti mismo.
No podemos huir de nuestro pasado. No podemos guardarlo bajo siete llaves y olvidarlo. Sin embargo, cuando interpretamos nuestro pasado, no como un castigo o un mal destino, sino como una oportunidad para crecer desde la pregunta «¿para qué?»… Ahí tenemos el desafío de aceptarlo y dejarlo atrás, como algo ya resuelto.
Es en mi aut0afirmación que yo crezco. Es desde mi aceptación y amor por mi vida, que yo avanzo con entusiasmo, confianza y autenticidad.