Sanar emociones

mujer ante universoPara aceptar  situaciones que nos resultan enojosas o perdonar a personas que nos han herido en el pasado, por mucho que lo razonemos y digamos que sí que tenemos que solucionarlo, la mente primero se tropieza con  las resistencias emocionales del Ego (el rencor, la rabia, el resentimiento, el orgullo, los miedos, etc., que  no van a consentir el disolver esas energías de las que se alimenta.

Luego está el corazón -donde se aloja el amor y la compasión- pero que, cuando se siente herido, es desconfiado y se cierra,  dificultando esa liberación de ataduras emocionales a las que está sometido. Y más en el fondo, el Alma, se tropieza con las sombras  del subconsciente, tan difíciles de ver y sanar.

Manejar y sanar las emociones pasa por la conversión del sufrimiento en aceptación. Ahí está la LIBERACIÓN. Este debe ser un salto al frente real y consciente. La Mente tiene que encontrar la forma de conectarse con el Corazón para que éste le ayude a vaciarse de todos los sentimientos negativos para poder curar así las heridas y dejar vía libre a nuevos patrones.

Cuando finalmente se funden Mente y Corazón es cuando sucede sinceramente la admisión y aceptación sincera de lo sucedido, tal como fue, pero observándolo desde el desapego emocional; de forma imparcial y neutra.  No sólo con desearlo o decirlo desde la Mente se cierran las heridas del Corazón. Tiene que haber completa rendición y aceptación sincera desde el Amor hacia sí mismo.

La aceptación de lo que ha ocurrido en nuestra vida y que nos ha lastimado, sucede desde el despertar de la Conciencia y desde la comprensión de la dimensión real de nuestro Ser. Es entonces cuando uno se siente liberado realmente y receptivo a nuevas experiencias, sin expectativas.

La aceptación crea compasión y perdón por uno mismo y por los demás. Es así como se experimenta la verdadera libertad -desde la aceptación total de la vida- y nuestro desapego a todo lo ilusorio de ella.

Cómo incrementar la energía vital

mujer azul energia

 

Cuando logramos conectar con nuestro ser esencial estamos conectando con la energía pura del ser eterno que somos.

 

 Tenemos la capacidad, el poder y la responsabilidad de restaurar e incrementar nuestra energía vital. Y mucho más, porque en nosotros también  está la capacidad de REFINAR esta energía y convertirla en ENERGÍA ESPIRITUAL, que es la que nos conectará con las otras dimensiones de nuestro ser.

Si la energía vital no fluye en nuestro cuerpo correctamente y de forma continua nos enfermamos. Siguiendo estas 3 pautas podremos mantener una salud perfecta de forma integral:

1)      Prestando atención al cuerpo físico: Correcta  alimentación.

Comer alimentos que tengan energía: verduras y frutas frescas  de temporada cocinadas en el mismo día. Beber 2 vasos de agua tibia al levantarse.

Sentarse a comer de forma consciente y con un estado de ánimo calmo. (nunca cuando se está enfadado).

2)      Prestando atención al cuerpo mental: Control y paz mental.

Cada día dedicar al menos 25 minutos a sentarnos en quietud y silencio. Con los cinco sentidos volcados hacia el interior. Respirando lenta y profundamente de manera consciente. Atención de que todos los músculos están relajados. Descubrir que desde la intención y el control mental podemos crear un estado de armonía en nosotros.

3)      Prestando atención al cuerpo emocional: Control de los Impulsos.

Yo Soy Observador de mi mismo. Observo esa parte de mí que reacciona y cada vez soy más consciente de que esa no soy yo.

Aprendo a observarme con desapego y a relativizar las cosas que suceden en el plano material. Nada me perturba; hago frente a los miedos y se esfuman por si solos.