Ser uno mismo.

Para conocernos a nosotros mismos debe despertar la Conciencia. Debe estar presente la intención del Observador en nosotros.

Uno mismo es quien es desde el Ser que lo habita. Pero este Ser -nuestra Alma y Espíritu- está bajo tantas capas de condicionamientos, restricciones sociales, limitaciones educativas, religiosas, etc., que en la mayoría de los casos no se le llega a conocer en vida.

Quien somos en esencia, se distingue principalmente por los valores más elevados; la impecabilidad. Impecable es lo que no tiene defecto alguno.

Te vuelves impecable cuando conoces y crees en el poder de tu Ser. Y cuando sientes esa fuerza interior y la reconoces como tal, es cuando te vuelves impecable. No tiene nada que ver con la Mente; no se razona, se es. Muchos hablan de «empoderamiento» pero lo hacen desde el Ego y eso es desastroso.

La impecabilidad trata de salvaguardar tu dignidad humana, quien eres, tu ser esencial; sin doblegarla, ni venderla, ni cederla, por nada.

Ella no tiene nada que ver con tu orgullo personal que viene del ego/mente. No se trata de servir intereses o perseguir éxitos materiales. Hablamos de valores que están muy por encima del ser humano común y corriente, estos valores perteneces al Alma y al Espíritu; a la Conciencia Superior.

Reflexionemos sobre ello. Movámonos hacia nuestro interior.

La paz interior

La paz interior es la base de la espiritualidad. Es tu espíritu, sin equívocos, bendiciéndote. Se trata de un estado de unión con la Conciencia superior que mantiene serena tu Alma, suceda lo que suceda en el exterior.

Para conseguir esa paz hay que hacer un trabajo de limpieza y purificación en nuestro cuerpo mental y emocional.

Es el Amor el que purifica y sana. Es el Amor el que transforma las emociones negativas en compasión y las energías densas las hace livianas para que fluyan con ligereza, simplificando las cosas hasta hacerlas bellas.

Allí donde había sufrimiento, la paz interior, lo transforma en aceptación y templanza.

Es así, convertido en Amor, como puedes amarte a ti mismo de forma absoluta para poder amar a los demás de igual manera.

Y para que ese Amor no se estanque y siga creciendo, pones un poco de tu Amor en cada ser vivo para volverte UNO con toda la humanidad y con la Madre Tierra.

Siente el calor y la Luz que emana de tu corazón.

Conserva la paz y el Amor en tu corazón haciendo el bien, a ti mismo y a los demás. Conserva la paz y el Amor en tu corazón, como una nueva forma de vida llena de Luz.

No se trata de creencias sino de sentir a tu Ser.

Nuestros centros energéticos

Desde el REIKI le llamamos ejercicio de auto-sanación o alineación de los chakras al ejercicio que te ayuda a trascender la mente y a conectar con el Ser esencial que eres.

Si haces el ejercicio todos los días, poniendo las manos en cada chakra,* de arriba abajo, sentirás cómo cada vez más se fortalecerá tu certeza de que principalmente eres Luz (energía) y que ésta emana de la Conciencia Superior.

Comienzas entonces a experimentar cómo funcionan y están separados, el yo-personaje que se mueve en el Plano material y el ALMA, que es ilimitada y puede despertar en ti, la Presencia Divina que habita en tu corazón.

Detrás de tu idea de individualidad existe una «intuición» que sobrepasa a la mente y es la de poder experimentar que el UNO nos incluye a todos los seres vivos y a toda la creación.

Lo que nos confunde y nos hace tener miedos y sentirnos abandonados o perdidos es justamente el habernos desconectado de nuestro Origen… habernos alejado de nuestra esencia y naturaleza.

Así que «si tu espíritu quiere volar más alto que las palabras; dale alas», como muy bien dijo alguien.

  • en este Blog puedes encontrar cómo realizar este ejercicio que yo te animo a hacer. Llevo más de quince años haciéndolo y sé que es lo que me mantiene conectada con la Conciencia Superior que me guía, con Dios.

Mi Yo

Mi Conciencia me indica que debo actualizarme continuamente. Mi intuición me avisa y anima para que así sea. Me pone en alerta de mi yo-mental que se resiste a ello.

El Conocimiento directo -que no pasa por la mente- convierte en desafío mi anhelo de avanzar y concentra la energía en esa dirección para que no me acomode.

No es mi Yo quien decide, es la Conciencia Superior, a la que entrego mi voluntad.

Por momentos se diluye la identidad personal y una aparente apatía no es nada más que he dejado de tener deseos o preocupaciones por el futuro. Confío. Mi corazón palpita desde la certeza absoluta que el Universo y la Madre Tierra me protegen.

La Mente se vuelve cada vez más sencilla. Los pensamientos parecen elásticos y el espacio entre ellos también se alarga. Lo personal y cotidiano pierden importancia al entrar el Ser en otras dimensiones .

El cuerpo físico, es solo eso, el vehículo. Es el Alma y el Espíritu quienes cobran ahora su magnificencia.

Mi respiración se hace consciente y siento que te amo, lo sepas o no.

Iniciación al REIKI

yo dando reikiRecibir la iniciación al REIKI (transmitida de forma personal por un maestro) significa la apertura y bienvenida a un nivel superior de Conciencia de ti mismo en conexión con la Conciencia Superior. Cada iniciación (existen tres niveles) te da la energía necesaria para impulsarte en tu voluntad de crecer en todo el esplendor como ser humano y divino. Más allá de lo que te puedes imaginar.

La decisión de iniciarte en REIKI no es un deseo de la mente. No eres tú quien eliges, es el Universo y la Naturaleza quien te preparan para este encuentro que es sagrado. REIKI es un regalo en tu vida. Está fuera de la lógica. Viene de otras dimensiones superiores.

No es necesaria ninguna experiencia previa y puede recibirla cualquier persona de cualquier edad, incluso niñ@s. Después de la alineación y activación de los centros energéticos (chakras) queda a tu disposición todo lo necesario para seguir creciendo y expandiéndote infinitamente.

REIKI es muchísimo más que una técnica de sanación, creer esto es limitar la poderosa acción que tiene el estar conectado a las energías superiores del universo y el ser Canal de sanación. REIKI además te da la capacidad para la revelación del camino de vida al conectarte con tu Yo Superior. Comienza a actuar entonces el «conocimiento intuitivo directo». Esto significa una forma de facilitarte claridad, valor, integridad, libertad y auto-maestría.

REIKI potencia la sanación a través de la imposición de manos. Somos energía y REIKI nos enseña a generarla, almacenarla y canalizarla de forma correcta y beneficiosa para el Bien de todos.

Todos podemos canalizar y convertirnos en esta energía sanadora que es la del AMOR INCONDICIONAL y así ser parte dinámica en el proceso de transformación planetario que estamos viviendo.

Conciencia

ser-lucesComencemos por saber que  no somos lo que hacemos sino lo que sentimos ser desde nuestro Ser. Y para poder percibir a nuestro Ser, debemos EXPANDIR nuestra Conciencia que hasta ahora está encasillada y maniatada entre conceptos y creencias (de otros).

La Conciencia es LUZ y por ello, cada vez que, nuestra intuición, nos hace llegar un pensamiento puro (sin pasar por el tamiz de la mente inferior),  el sentimiento que tenemos es de expansión. Estas Luz ilumina un espacio nuevo en nosotros, que no nos percatábamos que ya existía.

Nuevos sentimientos creando nuevos pensamientos y viceversa. Nuevas maneras de pensar creadas desde un nivel de Conciencia superior. Los resultados de nuestras decisiones no dependen solo de nuestra claridad mental sino además de nuestra Conciencia, que es la percepción de lo que es correcto.

Nuestra Conciencia nos ayudará a estar en PRESENCIA de nuestro Ser y de la Divinidad en nosotros. Para ello tenemos que entrar en el Silencio y en el Vacío en nosotros desde la quietud mental.

Todo esto -este despertar de la Conciencia- es un proceso largo y lento, es un Camino sin atajos. Requiere de anhelo por evolucionar, por crecer, por Saber, por encontrarse con uno mismo. Es el Camino hacia la Paz interior, hacia la plenitud.  Vivenciar por fin la Dicha y el Gozo de sentir la Presencia de la divinidad en uno.

 

Las casualidades

mujer trenza blancaPara mi nada es casualidad. Hace ya tiempo que vivo desde esa perspectiva en la que absolutamente nada ocurre sin que tenga una razón de ser aunque yo en ese momento no sepa verlo o entenderlo. Confío absolutamente en que, desde el actuar correcto, sólo puedo atraer hacia mi lo bueno. No lo que desea mi yo sino lo que beneficia a mi alma.

Visionar, es el lenguaje que nos permite comunicarnos con la Intuición y la Conciencia Superior. Se trata de percibir  las indicaciones de las Leyes de la Naturaleza a las que pertenecemos. Vivir conscientemente. Sin entrar en interpretaciones, más allá del razonamiento y la lógica. Simplemente siendo Observador de las señales que el Universo me manda, que es el Hacedor, no ‘yo’.

Esto quiere decir, que primero debo reconocer que no estoy ni soy algo aparte del Todo. Debo reconocer que lo que yo hago y pienso influye en el resto al que pertenezco. Debo entender y aceptar que existe una Ley de Causa y Efecto que me afecta inevitablemente. Y que mi forma de acción y mi actitud ante la vida, son las mismas energías que me serán devueltas y son las que  voy a atraer.

Entreveo la Realidad apartando los velos de ilusión  que mi propia mente crea; prefiriendo ella la justificación y el no querer ver la Realidad. Y vislumbro lo que es evidente -más allá de la mente inquisidora y manipuladora-.

Ahora es desde el conocimiento intuitivo que es claro, transparente, fundamental, indudable… el  que ahora permito que emerja en mi y sea, esta facultad, la que me guíe.

Cuando nos movemos por la vida, siendo dueños de ella, es decir no dejándola en manos de las casualidades, entonces la vida se vuelve maravillosa. No importa cuán dura y difícil es externamente en el plano material. La vida se vuelve maravillosa cuando nuestra alma y espíritu la contemplan como un juego, sin implicarse seriamente en ella… ¡es tan corta! …

 

 

 

El conocimiento intuitivo y la mente racional

mujer meditacion playa  La mente racional guarda la información, aprende la técnica y memoriza la  teoría sin ir más allá. Se trata de esa  parte de la  mente  que  sólo cree en lo  que sus ojos ven.

Pero sólo esta función de la mente no basta; tenemos la capacidad para aprender a pensar y a discernir. Al pensar por nosotros mismos, ideamos nuevos pensamientos, somos creativos, investigamos, reflexionamos y somos capaces de tomar decisiones con claridad y firmeza. Nos construimos como seres independientes y libres: desarrollamos nuestro potencial  mental que se asienta en el conocimiento intuitivo.

La evolución se origina en la mente superior. La evolución no es un mecanismo que produce un ascenso de forma mágica o casual; es un proceso de maduración interior que despierta una energía de atracción en nosotros, que nos «aspira» -y nos hace aspirar, por encima de lo que la mente racional pueda resistirse a ello- a entrar en un Camino evolutivo del Ser.

Esta energía que interviene en nosotros,  viene de la Conciencia Superior, y despierta nuestra Conciencia individual. Y es esa energía cósmica la que nos moviliza, dinamiza y la que penetra en nuestra «voluntad» para redirigirla hacia una nueva realidad del Ser.

Este trabajo evolutivo va creando una transformación a todos los niveles de nuestro ser. Físicamente  produce sensación de  liviandad y bienestar. A nivel mental, una mayor capacitación de poseer una conciencia más clara, mayor concentración, armonía y seguridad en sí mismo. A nivel emocional, sentimientos más elevados de amor por sí mismo y por los demás.

Este despertar de la Conciencia, sólo sucede y se alcanza, cuando el Yo deja de poner resistencias y se entrega y se abre a la realidad de Ser.

(del curso «Entrenamiento para la Nueva Conciencia»)