Cuerpo etérico, astral y mental

Contrariamente a lo que creemos, el «YO» no es nada en sí mismo. Si acaso, es un centro de coordinación y esa es la mejor forma de verlo para ponerlo conscientemente a nuestra disposición y servicio.

También es necesario saber para comprendernos mejor como funcionamos y quiénes somos es que existe en nosotros una fuerza que alimenta nuestro existir y esa es la que forma el CUERPO ETÉRICO. Y tenemos unos centros energéticos -dentro del cuerpo etérico- que conforman el CUERPO ASTRAL y es donde se concentran las emociones que causan las enfermedades en el cuerpo físico. Y entrelazados energéticamente  a estos dos cuerpos está el CUERPO MENTAL.

Los trastornos psíquicos o físicos se producen cuando el funcionamiento entre ellos está falto de energía por bloqueo o desequilibrio. También puede darse el caso de «desgarramiento» en la capa sutil que envuelve cada cuerpo.

Existen terapias holísticas y energéticas que ayudan a estabilizar, equilibrar, limpiar o impulsan a concretar y desarrollar las áreas débiles.

Son magníficos remedios naturales las Flores de Bach y  la homeopatía. El Reiki es una herramienta excelente y eficaz para la auto-sanación en todos los niveles de nuestro ser.

Energías que enferman el cuerpo físico

Vergüenza. Humillación. Resignación. Envidia. Soberbia. Cólera. Celos. Frustración. Miedo a dar. Desconfianza.  Baja autoestima. Sensación de vacío y abandono. Amargura. Victimismo. Pesimismo. Soledad. Tristeza. Rabia. Odio. Rencor. Desesperanza. apatía. Obsesión. Fobias. Miedos. Ansiedad. Aislamiento, Inseguridad. Depresión. …

Todas estas energías -emociones y sentimientos- van envenenando o bloqueando nuestros órganos. Por ejemplo, la irritabilidad y rabia tiene que ver con el hígado. Los miedos con los riñones. El odio con el corazón. La timidez y falta de expresión con la garganta…

Las Flores de Bach son remedios florales que nos ayudan a liberamos de toda capa emocional negativa y deshacernos de los patrones adquiridos que nos limitan. Es posible utilizar las Flores de Bach como medicina preventiva ya que nos ayuda a conocernos a nosotras mismas y así conseguir un equilibrio emocional estable.

Se podría dividir en cinco grupos las diferentes emociones relacionadas con las esencias florales. Para poder identificarnos y trabajar nuestras deficiencias y excesos, sanando con las Flores de Bach nuestras heridas emocionales.

Diferencias básicas y clasificación de los 38 remedios bajo los títulos de:

Miedos. Rabia. Cavilación. Depresión. Ansiedad.

  • ¿Cómo reconocer los distintos miedos, dónde y cómo se generan. Qué Flores los desbloquean y disuelven?
  • Los diferentes matices de la depresión, dónde y cómo se desarrolla…
  • El pensar demasiado. La actitud ligada a pensamientos torturantes.
  • El exceso de emociones consume las energías y nos lleva al agotamiento.
  • Los grados de la Ira y cómo se desarrolla si no la atajamos
  • La rabia es tristeza actica y la tristeza es rabia pasiva…
  • Angustia. Ansiedad.  Depresión.
  • ¿Dónde se localiza la frustración, el resentimiento, las fobias …

Existen diferentes herramientas para conocernos a nosotros mismos. Y también existen medicinas naturales excelentes que son complementarias para conseguir la salud y el bienestar perfectos.

Deshacernos de lo que enferma es renovar los deseos de vivir plenamente.

Mi historia dentro de la sanación

Fue ya con 45 años, y después de haber dado muchas vueltas por el mundo, cuando por circunstancias muy especiales y viviendo en Irán, comencé a ayudar a los demás, sin tener yo misma ni idea de nada. Fue allí -ahora lo entiendo así- que Dios comenzó a guiarme en este sentido; hacia el servicio a los demás. Algunas  personas venían a pedirme ayuda y Dios actuaba a través de mí.

Un ejemplo clarísimo para mí fue cuando un día estaba yo rezando porque me sentía algo abrumada por la situación y le pedía a Dios en mi rezo que si realmente Él quería que yo me dedicase a ayudar a los demás debía darme los medios. Justo en ese mismo momento entró en la habitación mi hijo mayor llevando una bolsa en las manos “me han dado esto para tí, un señor filipino que se vuelve a su país y ha pensado que mejor te lo daba a tí; son medicinas”.

Yo nunca antes había oído hablar sobre la homeopatía y allí habían más de una veintena de frascos diferentes. Cuando venía alguien diciéndome que su hijo tenía algún dolor o fiebre, yo metía la mano en la bolsa mientras rezaba, sacaba un frasco y le daba unos cuantos gránulos. Jamás dudé era la mano divina quien elegía por mí. Y siempre, gracias a Dios, dio resultado.

De vuelta a España me olvidé del asunto hasta que yo misma me puse enferma, con un gran dolor en el pecho y los médicos me daban ahora este jarabe luego otro diferente y ninguno me quitaba el dolor. Una amiga me habló de las Flores de Bach y me hizo una fórmula. Inmediatamente me hicieron efecto. Maravillada comencé a estudiarlas, luego a tomarlas yo misma para conocer sus efectos y más tarde darlas a la gente a mi alrededor hasta que  después abrí un consultorio de medicinas naturales.

Por aquel entonces, finales el año 2000, que para mí ese año significó un renacer por una serie de acontecimientos personales, fui a Barcelona a un curso de Terapia Regresiva, sin tener ni idea de lo que me iba a encontrar. Entre los alumnos hacíamos prácticas y todos tenían vivencias de vidas pasadas. Conmigo fue distinto; yo aparecía en otro planeta o en medio del Cielo, postrada, ante un Rayo de Luz… y cosas así.

En otra ocasión y atendiendo un curso de Respiración Holotrópica donde a través de un tipo de respiración se consigue un desdoblamiento de conciencia que te ayuda a hacer viajes astrales, yo salí disparada como una flecha de mi cuerpo y una vez «arriba» una voz decía directamente a mi corazón «eres dadora de luz».

Me hice maestra de Reiki, como un regalo del Cielo y para mí es sagrada la práctica de conectarme, a través de los chakras, con mi cuerpo-mente y con mi maestro interior. Mucho tiempo después entendí el mensaje pues dando Reiki das Luz sanadora.

Y en eso sigo, dejándome guiar por mi maestro interior, dando gracias por ser tan afortunada de estar al servicio del Altísimo.

 

Equilibrar las emociones con las Flores de Bach

Las emociones son una fuente de energía que nos impulsa hacia nuestras metas en la vida. Es a través de la energía de nuestras emociones que podemos materializar nuestros pensamientos. De forma negativa, la energía de la emoción podría estar dispersa, desequilibrada, sin dirección o estar bloqueada  ocasionando confusión y sufrimiento, o, a través del pensamiento concreto y firme, hacer que nuestra emoción tome una dirección que nos beneficie y favorezca.

Existe una emoción que es primordial y de donde parten todas las demás: el Amor. El amor está en un extremo de todas las posibles emociones y en todos sus grados. En el otro extremo se encuentran los  Miedos.  La calidad de nuestra emoción y actitud determina cómo nos expresamos en la vida y cómo la vivimos. Siendo el resultado Amor=Felicidad. Miedo=Sufrimiento.

Así que dividiremos los 38 remedios florales en dos grandes grupos. Cuando las emociones están en desequilibrio, bloqueadas o hay exceso de ellas y veremos también los efectos beneficiosos cuando estas emociones –gracias a las Flores de Bach- se hacen positivas al equilibrarse.

MIEDOS  <>>><<<<<>><<><> RABIA   <><<<<<<<<<<<<<<<> DEPRESIÓN

AMOR <><<<<<<<<<<<<<<> COMPASIÓN  <><<<<<<<<<<<> PAZ INTERIOR

Las flores no se indican por las cualidades positivas que uno desearía tener, sino por los síntomas negativos de los que uno quiere liberarse y que tapan a las primeras.

Los patrones de conducta.- También pueden reestructurarse gracias a los remedios florales.

Estados:  Caracterológicos (remedios básicos según la naturaleza de la persona)

Transitorios (remedio de apoyo o complementarios para reforzar el básico)

Es esencial diferenciar el estado de ánimo predominante de éste momento; lo que pueda ser circunstancial,  de  aquellas emociones que se enraízan y han formado patrones de conducta limitadores. Y tratar las dos partes. (El remedio básico y el de apoyo).

Cómo y dónde actúan.- Algunas flores actúan más en la esfera de lo mental y otras más en el campo emocional. Unas son esencias energéticas con potencias más débiles y sus efectos son a largo plazo (Centaury, Pine, etc.) y otras tienen una potencia con mayor fuerza y su beneficio comienza a percibirse de inmediato (Holly, Cherry Plum, Chestnud Bud, Gentian, Sweet Chestnud, etc.).

Las FB tienen una acción física, mental, emocional y espiritual, habiéndose confirmado científicamente que las emociones juegan un papel fundamental en el comienzo y avance de casi todas las enfermedades.

EFECTOS: dan mayor sentimiento de seguridad y  libertad al desprenderse uno de viejos hábitos, miedos, necesidad de dominio, sentimientos de culpabilidad, desequilibrios emocionales, afirmación de la personalidad, etc. Contra la angustia, tortura mental, obsesiones, fobias, aislamiento, etc., etc.

 

Los remedios florales

El desequilibrio energético es el causante de toda enfermedad y ésta tiene sus inicios en el cuerpo mental y emocional en nosotros.

El fundamento de las esencias florales es desbloquear y armonizar  nuestro cuerpo mental-emocional para que fluya debidamente la energía vital. Se trata de alinear y conectar para que funcionen de forma sincronizada la mente y el corazón. Es así como nos desharemos de los conflictos internos que terminan minando la salud.

La sanación del cuerpo físico surge de forma natural al conseguir esta conexión. Toda actitud que va en contra de nuestro ser esencial crea tensión en nuestro cuerpo y la tensión se traduce finalmente en dolor y malestar.

Generamos  salud cuando nos sentimos felices de la vida, cuando aceptamos de corazón lo que no podemos cambiar y nos sentimos capaces de poner fin a  los problemas que tienen solución.

Generamos un estado de felicidad y paz interior en nosotros de forma estable cuando logramos el conocimiento de nosotros mismos y la auto-realización. Y las Esencias Florales (Bach,  California y otros sistemas)  son una gran ayuda para conseguirlo.

La Enfermedad desde sus raíces

Las Flores de Bach fueron concebidas para la sanación del ser humano desde una visión holística . De la misma manera que entendemos  la   Salud  como una,  así mismo deberíamos catalogar el desequilibrio interno de la persona en una sola enfermedad en lugar de diversificarlo en «enfermedades»

El sistema de sanación de las Flores de Bach  está basado en el desbloqueo, equilibrio y  reconducción de las energías que desestabilizan la salud. Las Flores de Bach transmiten la vibración necesaria para alcanzar la armonía en todos sus  niveles; emocional, mental  y físico.

Las Flores de Bach lo que hacen es corregir y adecuar   los desequilibrios emocionales, ya que son estos trastornos energéticos los que «crean» la enfermedad. Ésta puede estar localizada en un órgano específico. Puede que el dolor o las molestias se sientan en un punto concreto del cuerpo, pero no son únicamente los síntomas lo que trata estos remedios florales. Las Flores de Bach, como toda medicina natural holística, va a la raíz de lo que enferma.

El sistema floral del Dr. Bach se basa en las altas vibraciones de unas flores concretas para que restablezcan ese equilibrio necesario entre el cuerpo físico, mental/emocional y el ser espiritual, para que haya Salud.

 

Según el Dr. Bach

Si tenemos en cuenta que la enfermedad es la manifestación de un trastorno o desequilibrio de la energía vital, las Flores de Bach lo que hacen -como energía vibratoria- es corregir,  adecuar y desbloquear ese desequilibrio energético.

Bach supo ver cómo influyen la mente y las emociones en el cuerpo físico, y cómo el conflicto entre ellas hace que se desarrollen  las enfermedades. Así que, una mente obsesionada, manipuladora, obsesiva, llena de miedos… ¿acaso no va a alterar el sueño, el apetito, el humor…? ¿acaso un estado emocional negativo y prolongadamente alterado no va también a alterar las funciones del cuerpo físico?

«Inteligencia emocional, crecimiento personal y desarrollo espiritual»  según el Dr. Bach, se refieren a lo mismo.

Sobre el Amor el Dr. Bach dijo: «Lo que llamamos amor es una combinación de codicia y miedo, es decir, el deseo de más y el temor a perderlo. El Amor verdadero debe estar infinitamente por encima de nuestra comprensión ordinaria, algo enorme, el olvido completo del sí mismo, la pérdida de la individualidad en la Unidad, la absorción de la personalidad en el Todo».

Las Flores de Bach equilibran y restablecen la salud en el ámbito psíquico, en el ámbito energético y en el sistema de regulación del cuerpo, gracias a sus vibraciones de caracter superior.

La Terapia Floral de Bach sirve de depuración del plano anímico.

Con las Flores de Bach ganamos en autoconocimiento, Conciencia, correcta autovaloración, optimismo, aceptación, serenidad, armonía y muchos beneficios más.

Las Flores de Bach

La ventaja principal de esta terapia natural vibracional es la facilidad de comprensión de la misma, su gran efectividad y el que no tiene efectos secundarios ni contraindicaciones.

Dijo el Dr. Bach «Las hermosas vibraciones de nuestro Ser Superior inundan nuestra personalidad con las virtudes que necesitamos para purgar mediante ellas nuestros defectos de carácter».   Con ello quiso decir que estas esencias florales sirven de depuración del plano anímico. Son las llamadas toxinas o venenos de la mente que pueden bloquear parte de nuestro campo bioenergético.

Tomando Flores de Bach ganamos en autoconocimiento, conciencia, optimismo, aceptación, serenidad, etc. Haciéndonos entender nuestro potencial y capacidad para la auto-sanación.

Las Flores de Bach y el arte de sanar

Es perfectamente natural y lógico que cada uno “tire para casa” y aplique –en el caso de terapeutas y sanadores, naturópatas y homeópatas, y demás ramas de la medicina natural- según sus simpatías, comprensión y cercanía a esos diferentes medios de sanar.

Pero no caigamos en la trampa fácil de “divide y vencerás”. Pienso que no se trata de rivalizar ni siquiera en si este sistema floral es mejor que el otro o si esta terapia no necesita de otras complementarias a la hora de buscar remedios para sanar. Porque la finalidad es esa: primero erradicar la enfermedad en lo posible y también, fundamentalmente, prevenir la enfermedad educando, tomando conciencia de nuestro ser y sus necesidades a todos los niveles.

Si partiésemos de la base de que todos y todo formamos el Todo (el Uno indivisible), esta comprensión nos llevaría a una actitud de no-división, no-exclusión, no-separación, y nos llevaría a encarar la vida y la salud, como terapeutas, de manera íntegra.

Quiero decir con ello que, ante un problema clínico, no vamos a separar como hace la medicina oficial, los síntomas físicos de los emocionales o psíquicos. Al contrario, vamos a ASOCIAR. Hasta los detalles insignificantes serán indicadores que vamos a SUMAR al informe preliminar. Hasta los silencios y los gestos los vamos a INCORPORAR como señales mudas interesantes a tener en cuenta a la hora de hacer el diagnóstico.

En el Arte de Sanar, el terapeuta debería llevar al paciente, como punto de partida, a la comprensión de que debe ir a la raíz de su problema, hacerle comprender que la enfermedad que padece es sólo la punta de iceberg; la manifestación en el cuerpo físico de algo mucho más profundo y que sería conveniente se comprometa consigo mismo a seguir un “aprendizaje” de varios meses para lograr la autotransformación necesaria y adquisición de nuevos hábitos para no recaer en la enfermedad. Pongamos por ejemplo; jaquecas, asma, alergias, anorexia, bulimia y un largo etcétera.

Así como cualquier persona, de toda condición social, a la hora de comprarse un coche, necesita informarse de un mínimo de instrucciones a seguir para el buen funcionamiento y mantenimiento del mismo. Por ejemplo, qué tipo de gasolina tiene que echarle, cuándo debe cambiarle el aceite, etc. Así mismo presentaremos al paciente un programa que indicase las pautas mínimas para prevenir enfermedades y tener una calidad de vida sana, mediante:

1) Conocer el Cuerpo Físico. Aprender a percibir las señales de su cuerpo:
a) Respiración consciente. Ejercicios sencillos de respiración abdominal para equilibrar la energía vital.
b) Meditación. Cinco minutos al día para centrar las energías.
c) Relajación. Desconectar por la noche para tener un sueño reparador.

2) Aprender hábitos saludables de alimentación.
a) ¿Qué alimentos nos perjudican, cuáles nos benefician? Tomar conciencia de que somos lo que comemos.
b) Empezar a percibir y descifrar lo que el cuerpo nos pide; él es sabio. Y respetarle, porque es de esta forma como empezamos a amarnos a nosotros mismos.

3) Ocuparnos igualmente de nuestro Cuerpo Mental.
a) Tomar conciencia de cómo trabaja nuestra mente. No podemos ignorar qué es lo que nos produce estrés o qué es lo que nos quita el sueño y no darle la importancia que tiene.
b) Tomar conciencia somos energía y las energías negativas, como pueden ser la envidia, celos, rabia, rencor, etc., dañan nuestro cuerpo físico tarde o temprano.
c) Tomar conciencia de que los desequilibrios energéticos emocionales crean conflictos y finalmente enfermedades físicas.
d) Programarnos positivamente. Hoy en día se sabe de la efectividad que tiene la autosugestión positiva.

4) Poseemos un Cuerpo Espiritual, no separado de los otros dos cuerpos. Y también requiere cuidados.
a) “Desaprender” condicionamientos que venimos cargando desde nuestra primera infancia para poder mejorar nuestra calidad de vida.
b) Descubrir que somos seres luminosos con una capacidad y potencial tremendamente enorme del que no hacemos uso ni de un 3%.
c) Armonizar nuestros tres cuerpos, sin permitir que ninguno de ellos prevalezca sobre los otros.

Las Flores de Bach concretamente, nos llevan a la toma de conciencia de estos tres cuerpos y a diferenciarlos perfectamente. Tomando las esencias específicas que necesitemos, sean las que sean las indicadas para nosotros, nos llevarán a ese despertar y, de forma intuitiva o consciente, nos pondremos a limpiar y a ordenar nuestra vida, de arriba a bajo, de dentro a fuera y de lo más grande a lo más pequeño. O al revés, según las circunstancias.

De ahí la importancia de que el terapeuta esté al lado del paciente durante todo el proceso de conocerse a sí mismo y fortalecer su identidad; para ayudarle a hacer el descubrimiento de sí mismo en un proceso evolutivo ordenado y armónico.

Esa transformación de que hablaba al principio no es nada más que llegar a la SALUD, mediante la limpieza de conflictos internos que ya dañaron (si es preventivo, antes de que dañen) el cuerpo físico. Recuperar la salud si la hemos perdido o aprender a mantenerla, valorándola, dedicándole atención amorosa, lo mismo que hacemos con nuestro coche, que nos duele que se estropee y por eso lo cuidamos conscientemente.

Una vez dicho todo esto, vamos a ver qué papel tienen aquí las Flores de Bach. En primer lugar las Flores de Bach abren y despiertan la Conciencia. En segundo lugar, cumplen un papel sumamente importante y son indispensables si buscamos la cura hasta sus raíces y de una manera natural no agresiva.

Los beneficios de las Flores de Bach para las enfermedades del alma y el campo astral, son incalculables. Pongamos ejemplos: Sabemos que las enfermedades dermatológicas o el asma tienen que ver con los traumas infantiles no superados o las profundas carencias afectivas. Como terapeutas, nosotros formamos y coordinamos la expedición de la cual, son las Esencias Florales, las que hacen de guía y encaminan esta expedición interior de forma certera.

La sanación es un proceso largo porque nos lleva al conocimiento de nosotros mismos una vez nos hemos deshecho de todo lo inservible como son los conflictos, las penas, todas las cargas emocionales. Y las Esencias Florales nos ponen en contacto con nuestro ser primordial una vez han llegado al destino, facilitándonos el acceso a la sabiduría de la vida.

De ahí lo fascinante de este arte o disciplina de sanación

Flores de Bach

Flores de Bach

Las enfermedades son la manifestación de desequilibrios interiores. El Dr. Bach definió los 38 estados anímicos desarmónicos fundamentales y encontrado las esencias florales que los combaten.

La medicina floral del doctor Bach es un maravilloso sistema natural que podría definirse como una medicina holística vibratoria energética, que extrae su energía curativa de 38 elexires florales de plantas y árboles predominantemente silvestres.

Su inocuidad, relativa sencillez de uso, carencia de contraindicaciones y efectos adversos, la hacen cada día más recomendable.

Esta medicina opera en todos los planos vitales del ser humano, es decir, terreno emocional, mental, físico y espiritual, corrigendo los patrones negativos que han generado o generarán las enfermedades. De esta manera se restablece el equilibrio (la comunicación energética) entre la personalidad y nuestras estructuras superiores o trascendentes.

La terapia floral del doctor Bach es una técnica muy extendida en Reino Unido, Alemania, EEUU, Argentina, Brazil, etc. En España el número de pacientes que se benefician de ella aumenta cada día por ser una técnica no agresiva, suficientemente experimentada y de una reconocida solvencia y efectividad