El cuerpo de Luz en ti

«Un sabio ve el mundo como una expresión de Conciencia. Nada le afecta y permanece alegre».

Observa tu yo-personaje todas las veces que te acuerdes. Escúchate. ¿cuántas veces te quejas al día, de forma inconsciente, como un hábito?

Practica en tu día a día la escucha, y obsérvate. Así te será más fácil rectificar las costumbres que te quitan energía o simplemente anulan tu alegría natural.

¡Activa tu cuerpo de Luz! Vacía tu Mente para poder sentir tu Ser.

Mejorando tus hábitos estás activando tu cuerpo de Luz que afecta a tu cuerpo físico, mental, energético y emocional.

Agradece todo lo alcanzado, no te preocupes por lo que te falta por tener.

Sólo somos una proyección del ser angelical que somos … créelo.

La Conciencia es nuestro espíritu.

 

ser lucesDespertar la CONCIENCIA es hacerse consciente de sí mismo.  Es reconocerse como espíritu y alma. Es experimentar en sí mismo, la profundidad del Ser como esencia divina.

Cuando ocurre esto, dejamos de sentirnos el centro del mundo, con nuestras exigencias egoístas y comenzamos a fijarnos en los demás como iguales,  con nuevos sentimientos de simpatía y afecto. Comenzamos a  darnos cuenta de que nada es casualidad y comenzamos a ver las señales y oportunidades para nuestro avance.

Tomamos Conciencia poco a poco de nuestro yo:  observamos cómo funciona el ego, la mente, cómo reaccionamos emocionalmente, cómo los pensamientos nos dominan,  todo ello conformando nuestra personalidad,  y nos hacemos conscientes que nuestra infelicidad y angustia es debido principalmente porque estamos cargados de energías (emocionales) tóxicas  negativas  … 

Ahora viene el despertar de la Conciencia … como una Luz que estalla en nuestro cerebro y nos hace ver con claridad:

«Yo no soy mi mente. Tengo una mente a mi servicio… Yo Soy algo más que mi cuerpo físico. …»

El punto de encuentro con nosotros mismos está en el centro del Corazón espiritual  mientras estamos en el proceso de purificación y de des-identificación. Ahora toca deshacerse de todo lo que nos ha condicionado y limitado.

Nos ocupamos de nosotros mismos con responsabilidad y amor para cambiar los viejos programas de creencias y pensamientos rígidos. Comienza a nacer en nosotros la compasión; no juzgamos a los demás ni a nosotros mismos… al menos, ahora somos conscientes y rectificamos, sin castigarnos: estamos en el Camino.

La ansiedad ha sido eliminada. No existen más miedos. Todo eso solo eran fantasmas…

La compasión nos envuelve y diluye instantaneamente cualquier falta y sentimiento de culpa, tan poderosa es su energía.  Nos renueva …  Ahora ya -con nuevos hábitos y nueva actitud- actuamos y fluimos de forma estable. en  armonía, sintonizados con las energías universales del Amor Incondicional.

Desde la confianza absoluta.  Conectados nuestro corazón y mente superior a la Conciencia Suprema. 

Somos Conciencia, porque ese es el mayor atributo de nuestro espíritu.

 

Ciegos y sordos

hombre meditando grisesEn algún momento de la vida,  nos sentimos faltos de guía y nos desesperamos, cuando en realidad en nuestro interior tenemos todas las claves y códigos esenciales que nos revelarían los secretos de la existencia y el mapa con la comprensión de nosotros mismos.

El primer error que cometemos y que nos hace ciegos y sordos, es el de la soberbia; creer que ya lo sabemos todo. El segundo error sería  ir afuera a buscar  información cuando de lo que se trata es de ir DENTRO a EXPERIMENTAR lo que ya hay: nuestro SER.

Para el primer error,  no estando todavía capacitados para ver, ya se encarga la vida misma de que nos hagamos conscientes de nuestra ignorancia. Cuanto más nos resistamos a doblegar nuestro ego más pruebas se nos pondrán delante, hasta que dejemos de preguntarnos «por qué todas las desgracias vienen a mi» y nos cuestionemos «qué estoy haciendo mal».

Y para el segundo desacierto, no importa, ya nos daremos cuenta y volveremos al comienzo, preguntándonos «dónde está el fallo».

Estamos en continuo movimiento y debemos ser lo suficiente flexibles como para que no nos cueste rectificar continuamente si fuese necesario. «Rectificar es de sabios».

Ser Observadores de nosotros mismos y estar abiertos  a todas las posibilidades que el Universo nos envía. Estar atentos a todas las oportunidades que nuestro Yo Superior nos pone delante para que tengamos un «futuro» mejor.

Todas esas aperturas y ayudas están ahí para nosotros en forma de señales y guía que tenemos que aprender a VER y ESCUCHAR desde nuestro SEXTO SENTIDO; la intuición. Esas ayudas y guía, si somos agradecidos y estamos atentos, seremos capaces de beneficiarnos de ellas para seguir avanzando en nuestra evolución.

 

 

No me conformo con ser menos de lo que soy

 mujer hermosaA través de la Meditación y Visualización llegamos a nuestro Subconsciente que nos muestra desde la simbología sus heridas y flaquezas.
Al conseguir dejar la Mente fuera, de estas vivencias tan extraordinarias, logramos que nuestro yo más profundo se manifieste y se entregue.
Es, en este acto de apertura, en esos instantes únicos, cuando podemos curar y cerrar las heridas del pasado para después, en una ceremonia reconciliadora, desde el corazón, el Alma nos lance por fin a la siguiente etapa; ligeras y purificadas, bendecidas y reconfortadas.
Los Miedos, que durante tanto tiempo hemos controlado, disfrazado y maniatado en lo más profundo de nuestro ser, ahora son reconocidos y liberados (no podemos liberar lo que ignoramos está en nosotros preso).
Porque no podemos sanar (avanzar) si no somos capaces de admitir estar enfermos (bloqueados energéticamente) o necesitados.
Porque no podemos rectificar si no somos conscientes del error… nos da miedo rememorar y reconocer…
Recobrar la memoria de quien soy y vivir plenamente -de dentro a fuera- en armonía conmigo misma y con el Universo, es el trabajo de hoy.
No me conformo con ser menos de lo que soy.  Soy conforme a lo que soy.

 

Rectificar

Rectificar ayuda a transformarse. Transformarse significa deshacerse de lo superfluo e inutil para que sobresalga la esencia del Ser.

Rectificar en nosotros mismos  sin justificaciones ni demora. La mente, a un lado, aparte, para que no frene ni obstaculice el trabajo de borrar limitaciones y ataduras.

Rectificar desde el corazon, porque es mas facil cuando  se fluye en el Amor.

Rectificar te hace humilde. Aligera, redondea y pule las aristas del ego.

Rectificamos pidiendo perdon y perdonandonos… y nos volvemos cada vez mas transparentes.