No quiero ir a dormir

No sé si quiero que el día acabe o que ya vuelva a amanecer.

No entiendo cómo el Sol no se cansa en cada vuelta el mismo hacer.

No me quiero ir a dormir, ya no tengo más sueño, mamá.

No quiero soñar nunca más pues después no se hace realidad.

Quiero que el día se alargue e inventarme un infinito juego.

No me quiero ir a dormir, ya no tengo mamá más sueño.

No quiero que apagues la luz, tampoco la de los luceros

no quiero que la oscuridad llegue y me envuelva por entero.

No me quiero ir a dormir sabiendo que todo es rutina

ya no tengo sueño… no tengo más sueños que el que camina

sabiendo que voy sola y mía es la única compañía.

Perder la memoria

Se encogieron tanto los recuerdos

quedaron tan velados, tan espesos

y al mismo tiempo, tan deshilachados

y es que ni siquiera ser hicieron brasa

porque no había fuego.

Más que nada se esfumaron,

se evaporaron los recuerdos.

Cuando huyeron las miradas

las sonrisas se perdieron.

Cuando se alejaron los abrazos

ya no hubo más encuentros.

Ya no hubo más recuerdos.