Salir del cuerpo

Al ser observadores de una experiencia, parecería que estamos separados de la misma pero la realidad es que somos el que observa la vivencia y al mismo tiempo el que la vive. Así es como yo lo he experimentado siempre que me ha sucedido algo extraordinario, en la que he salido del cuerpo y ha sucedido un desdoblamiento de Conciencia,

Una vez, entrando en una relajación profunda, salí del cuerpo como una flecha y me planté en medio del cielo azul, en frente mía una gran nube y detrás de ella una Luz tan potente que me cortaba literalmente la respiración. Me postraba ante esa poderosísima Luz, que entendí era Dios, y que irradiaba una energía de puro Amor que me llenaba de una inmensa felicidad. Al mismo tiempo, otra parte de mí estaba observando toda esa escena de la que yo era protagonista y me decía «nunca más seré la misma«

Así que, luego entendí que nuestro Ser puede estar en diferentes niveles o dimensiones al mismo tiempo y ser observador de sí mismo en todos ellos de forma simultánea…

Además, es bueno saber que luego le sigue un proceso de Conciencia colectiva. Es un proceso de unificación y completitud que va parejo con la unificación de la Conciencia individual.

Cuanto más unificados nos sintamos y nos identifiquemos con todo ser vivo y más coherentes seamos con nosotros mismos más buscaremos el silencio y la soledad para percibir enteramente ese estado de plenitud en el que entramos, a la vez que sentiremos un vacío y una compasión honda por la humanidad, que en un porciento muy elevado, todavía está en niveles de sufrimiento debido a su baja Conciencia.

La ignorancia de sí mismo, el vivirse separado del Todo y la soberbia no les dejan fluir en la energía del Amor, haciendo que el ser humano viva ciego a su Realidad y verdadero potencial y se resista en descubrir la magnificencia de la misericordia divina.

Como dijo el gran científico mexicano Jacobo Grinberg «la experiencia se experimenta a sí misma«

He sido muy inconsciente.

Dijo el filósofo Sartre «Felicidad no es hacer lo que uno quiere sino querer lo que uno hace».

Si reducimos las expectativas a cero, podemos ver con claridad lo que tenemos que hacer para nuestro mayor beneficio. Cuando quedamos al descubierto, sin adornos ni disfraces, esa es nuestra cruda realidad y a ella debemos enfrentarnos.

Yo no he sabido hacerlo, lo digo de antemano, toda mi vida me dejé llevar impulsivamente por la fantasía y la inconsciencia. Reconozco lo hice mal, más que nada porque arrastré a mis hijos en mis desvaríos .

Ya por fin, después de cargar durante muchos años con un profundo sentimiento de culpa, he podido liberarme y enmendar mi carácter que, aunque sigue siendo díscolo y torpe, con la edad se ha ido moderando.

Convivo con mi hermano que es dos años mayor que yo. Para él todo es perfecto y nada es un error. Dicho así puede malinterpretarse. Yo he aprendido que si no nos cuestionamos y corregimos nuestra actuación no hay avance. Es después de haber procesado una situación cuando podemos ver que fue perfecta para nuestro aprendizaje. Es cuando conseguimos transformar el error en enseñanza cuando se convierte en válido lo ocurrido.

Camino del Alma

El Camino del Alma tiene cinco tramos: Oscuridad / Luz / Neutralidad / Unidad / Iluminación.

Cuando nos sentimos perdidos y confundidos estamos en el primer estadio. Todavía no sabemos quiénes somos ni tenemos claro cuál es nuestro propósito de vida. Las emociones nos envuelven, son reactivas y sufrimos por ello.

Pero en algún momento comienza a llegarnos luz y entendimiento sobre nosotros mismos y nuestros pensamientos se hacen más claros y firmes sobre lo que queremos para nosotros mismos. Parece como si lo más difícil haya quedado atrás; ganamos en seguridad y confianza. Nos deshacemos de las resistencias del Ego.

En el tercer nivel de Conciencia aparece la Neutralidad; nos hacemos conscientes de que cada vez que juzgamos a otro o a nosotros mismos estamos haciéndonos daño en nuestro corazón. Así que, siendo observadores de nuestro actuar, dejamos de juzgar y nos vamos volviendo imparciales ala vez que nuestro hacer se hace más correcto e impecable, lo que supone un gran aligeramiento mental.

Luego aparece la Unidad y es que nuestro Ser ahora se siente radiante y lleno de Amor. Nuestra Alma en su expansión se siente reflejada en cada uno de los seres vivos y percibe que todos somos UNO.

Finalmente, la culminación, por supuesto, es la Iluminación. Nuestro Ser como Pura Luz.

¿En qué tramo estás caminando en este momento?

Somos energía.

La falta de comprensión sobre nosotros mismos nos mantiene ignorantes y distantes de nuestra Alma y Espíritu, de nuestra verdadera realidad. Y eso mismo es la principal causa de nuestros sufrimientos y enfermedades. De nuestra frustración y vacío existencial.

Deberíamos hacernos conscientes de que tenemos un cuerpo energético al que debemos atender. Son energía nuestros pensamientos. Son energía nuestros sentimientos y emociones. Somos energía en definitiva y estamos compuestos de todos los elementos que conforman el Universo.

Cuando nuestra energía se bloquea en algún punto de los miles de canales energéticos que están distribuidos por todo nuestro cuerpo, desde la cabeza hasta la punta de los pies, entonces comienzan los problemas de salud.

Los siete centros energéticos -conocidos como CHAKRAS. que están a lo largo de la columna vertebral, son los encargados de crear, almacenar y distribuir la energía vital que necesitamos para estar vivos y sanos.

Todo está conectado entre sí en nuestro cuerpo y nosotros con el resto de los seres vivos y todos interconectados con la Madre Tierra y el Cosmos. Formamos toda una Red Interestelar, inteligente, sincronizada, siempre activa, en movimiento y en perfecto orden.

Elevar nuestra frecuencia debería ser una prioridad si queremos evolucionar. ¿Cómo? convirtiéndonos en AMOR. Que ese sea nuestro estado y nuestra vibración aumentará proporcionándonos Dicha y Gozo a nuestra Alma y Espíritu.

Que así sea. Gracias, gracias, gracias.