Es sorprendente cómo las energías tienen un lenguaje propio -una vibración- que tu Ser puede identificar y descifrar de forma instantanea. Aún no sabiendo cómo, pero sabes. Es la Intuición que florece y te muestra tu Ser y tu potencialidad.
La magia sucede cuando dejas de tener prisa y le das espacio a la confianza absoluta, que es la semilla para tu crecimiento. Entonces se abren las puertas del campo de oportunidades que te ayuda a encontrarte contigo mismo, descubrirte. Comienza con una sensación agradable, de aceptación, de paz profunda, de simpatía inclusive, de confianza absoluta.
Cuando desaparece la prisa y el sentimiento de «obligación«, el cuerpo físico y mental se relajan. Todas las tensiones desaparecen y la sensación de calma se convierte en estado gracias a la conexión con lo Superior; nada exterior interfiere; eres tú y al mismo tiempo no tienes ni peso ni forma. Te han abandonado los pensamientos. Eres Conciencia; nada más tiene importancia.
Y esa liviandad es la que se disfruta, no haciendo nada si no fluir desde la Conciencia, que es tu Luz … no sé si me explico. No importa dónde ni porqué, pero ten en cuenta el cómo; tu actitud y déjate llevar
A veces confundimos nuestros sentimientos y emociones. Si ahondásemos un poco más en nuestro sentir, eso nos podría ayudar a desenmarañar conflictos que tenemos y que no sabemos cómo solucionarlos y sanarlos emocionalmente.
Por ejemplo, hace un tiempo yo pensaba que lo que yo sentía era frustración y eso me producía enojo conmigo misma. Y no sabía cómo resolverlo y quitarme de encima esa sensación molesta.
De pronto, alguien me habló de la DECEPCIÓN y eso vibró en mí y me dije «eso es lo que yo siento». Y de un momento a otro, me liberé de esa sensación pesada que llevaba arrastrando tiempo. Fue, el reconocerla y aceptarla y sentí un gran alivio.
Ojo, que no quiero engañaros. Me tomé una homeopatía (Ignatia) que es específica para el sentimiento fuerte de decepción, y que es fácil confundir con la depresión.
Las emociones relacionadas con la decepción son como de dolor y pérdida. Esta homeopatía ayuda a deshacer las lágrimas reprimidas y hace volver la sensación de esperanza. Bien sea por la pérdida de alguien querido, la aflicción al finalizar una relación, la traición o engaño por parte de nuestro mejor amigo. Todo lo que nos cause decepción, mezclado seguramente con rabia y frustración, pero que lo hemos reprimido. Todo lo que está relacionado con nuestras esperanzas y expectativas no satisfechas producen decepción.
Queramos o no la vida nos empuja a aprender. A veces el aprendizaje se nos presenta en forma de recordatorio y el conocimiento nos llega de forma directa (sin pasar por la Mente). Entonces la Intuición va por delante y nos guía.
Aprendemos por las buenas o por las malas. De mil maneras distintas, según nuestro nivel de Conciencvia, vamos a salir del sopor mental en el que estamos inmersos. La vida nos llevará al límite si ponemos resistencia o desafiándonos de forma sutil. Pero es imposible que no haya nadie que no esté creciendo y madurando, siguiendo los ciclos de la vida.
Sucede lo mismo, por ejemplo, con cualquier árbol frutal. En la semilla está toda la información y si cae en buena tierra, romperá la cáscara, brotará y se transformará en un árbol que en su madurez dará fruto. Igual el ser humano.
La sabiduría ya está implantada en nuestra esencia. La Conciencia personal sólo necesita fusionarse con la Conciencia Superior para descubrir la Unicidad en todo. Sólo cuando uno se hace consciente de su existencia y de quién es, todas las demás experiencias se harán posibles de forma fluída..
Sólo un ignorante niega y se cierra a saber quien es en origen y esencia. El Ego se niega a rendirse porque supondría tener que reconocer y dejar morir el personaje en el que se ha convertido.
El Ego se crea y refuerza desde la identificación con los pensamientos negativos; estar en oposición, crear obstáculos, crear mala Conciencia, tener una actitud de envidia y celos., rabia, odio, rencor …
Purificar nuestra Mente y corazón será el gran paso para romper con la inmovilidad a la que nos somete el Ego.
«Te oigo pero no te entiendo» me dice mi hermano que padece de Alzheimer, cuando ya le he repetido tres veces lo mismo, finalmente gritándoselo. Me quedo sorprendida y le pregunto «¿qué es lo que no entiendes?. Y me dice «después de la tercera palabra ya he olvidado lo que me estabas diciendo?
Yo al principio pensaba que es que estaba sordo, pero no, porque él puede escuchar el timbre del teléfono que está en su habitación a cinco metros. Así que ahora entiendo que el problema es otro… y más grave.
O sea que, no es sólo falta de memoria además de pérdida de la facultad del habla (por ejemplo en lugar de sábado dice sábana y cosas así). Para mí lo más trágico es la incapacidad para retener y entender lo que se está hablando, por muy simple que sea.
Mi hermano (79) tiene una gran voluntad; sigue yendo al gimnasio, se hace su comida, es muy creativo y pinta cuadros y en sus momentos de lucidez, primero me decia «me voy a poner bien», ahora ya me lo pregunta «¿esto tiene cura?.
Tiene momentos de risa interminable. Yo le pregunto de qué te ríes y él me responde que le vienen cosas graciosas a la cabeza. Y por la noche le visitan «personas» que curiosamente entran y salen por la ventana (lo que le parece normal) y él les preguntan qué buscan, con la desconfianza de que se lleven algo… o simplemente, dice, le miran sonriendo. Y él me cuenta todo sorprendido «si yo no los conozco de nada».
A veces me agota, debo decirlo. Al principio me sentía culpable de no tener suficiente paciencia. Otras veces me sentía orgullosa de mi misma por haber tenido mucha paciencia. También está el remordimiento de que podía hacerlo mejor.
En definitiva, como no creo en las casualidades, el que estemos viviendo juntos, lo vivo como un desafío -que he aceptado- para «pulimentar» (como diría mi madre) mi capacidad de paciencia y amor incondicional.
Trabajo de todos los días, de todas las horas, con uno mismo … los misterios de la vida …
Estamos dentro de un proceso de purificación de nuestro cuerpo emocional. Y ahí radica la rendición del Ego. Soltando lastres del pasado y trabajando con las resistencias al cambio. Dejando de justificarnos, liberándonos de la necesidad del reconocimiento.
Necesitamos de herramientas para ello, Hacemos una lista de por dónde podemos empezar y de todo lo que hemos avanzado.
Toma de conciencia de Quién Soy.
Cambio de hábitos que nos perjudican y nos limitan.
Actitud positiva
Alimentar la autoestima.
Reconciliación conmigo misma
Nuevo camino de mi corazón para Dar y Recibir.
A través de los trabajos de Visualización podemos conseguir una auto-transformación que nos haga vislumbrar el estado de paz interior, desde la convicción de que sólo una misma es la conductora de su propia vida y la creadora de su felicidad.
Este es un entrenamiento para nuestro cuerpo espiritual y que, gracias al poder de la energía del Amor Incondicional, alcanzaremos conectarnos con nuestra Alma y con la Fuente de la Verdad dentro de nosotras.
Vamos a encontrar el equilibrio y la armonía entre los excesos y las deficiencias.
Se maestra de ti misma. Se Observadora e identifica al personaje que te limita.
Si ya te has dado cuenta de que la coraza que llevas es la del personaje que actúa en ti y no tu mismo, a partir de ahí `pdrás comenzar a desenmascararlo poco a poco desde tu posición de Observador.
Cuando has incorporado en ti al Observador, estando atento, puedes entonces ver venir los acontecimientos. Estando presente en ti, la Mente está clara y la intuición despierta; es esa voz interna que nos avisa pero que la mayoría de las veces o no la escuchamps o no le hacemos caso.
Cuando eres Observador de ti mismo nada te pilla desprevenido. Nada. Quizás una inquietud interior sea el primer aviso. Un malestar que no sabes a qué achacarlo pero te mantiene alerta -si no tienes dormidos tus sentidos.
Desde nuestra Conciencia sabemos a ciencia cierta que cada cosa que hacemos tiene una consecuencia, por lo tanto, si no hemos actuado correctamente, eso nos vendrá de vuelta tarde o temprano. Por esa misma razón, desde una Conciencia en paz consigo misma nada hay que temer.
Escucha tu Conciencia. Guarda silencio. Estate atento a las señales. Toma la actitud de los animales cuando están al acecho. Ahora ya sabes que tu mismo eres el cazador y la presa a cazar.
El ruído que hace la decepción es muy desagradable. Inclusive huele mal y uno se siente incómodo consigo mismo.
Quien sufre de decepciones es porque ha tenido expectativas. Sus ilusiones le deslumbraron.
Uno se engaña a sí mismo una y otra vez y eso es lo mismo que tropesarse siempre con la misma piedra. ¿Será que no estoy atenta por donde camino?
Sobre todo si echamos la culpa a los demás se hace más difícil cambiar ese patrón engañoso que nos saca de nuestra verdadera realidad, que no queremos ver ni admitir.
Ahora mismo, con tanto coach enseñando cómo empoderarte pero no especifican que empoderar el Ego es todavía más catastrófico que si lo dejamos como estaba. Se trata de empoderar el Alma, nuestra Esencia.
El tratamiento para el dolor que causan las decepciones es procurar el desapego.
La sensación de esperanzas inclumpidas. El amor no correspondido. Proyectar la necesidad de felicidad para que otro nos la proporcione, todo esto causa decepción,
Restauremos el equilibrio emocional ocupándonos de nosotros mismos, sin fantasías, Y procuremos satisfacer nuestros deseos de forma realista. Tengamos por seguro que el Amor es una energía universal que siempre está a nuestra disposición, en nuestro interior.
Hablo contigo en mis adentros ahora que estás tan lejos. Te invito a entrar conmigo en el espacio sagrado del corazón. Para nuestras Almas es un asunto fácil. Ponemos la intención.
Te digo: Si mi amor por ti no abre tu corazón, no te preocupes, no puedo ni quiero forzarte a que me ames. No tiene sentido. Somos libres.
Si mi presencia te incomoda mejor cambio de dirección y te libero de ella. Eso me hace más feliz.
No podemos cambiar lo que ya pasó y cada uno necesita su tiempo para procesar los dramas del pasado y poder adentrarse en el Presente. Sólo deseo respetar quien eres y tu ritmo de aceptación así como yo hago lo propio con mi Ser. Borremos los viejos patrones.
Seamos felices liberándonos de lo que nos aprisiona; el resentimiento es un veneno muy sutil y muy penetrante. Estemos atentos porque hace mucho daño. Al fin y al cabo, todos somos víctimas.
Fortalezcamos nuestro cuerpo físico desde dentro, aligerando nuestro cuerpo mental y emocional lo conseguiremos.
El gran Poder del Espíritu nos santifica y bendice con Amor.
** Había un gran devoto de una mujer muy santa en la India (Anandamayi Ma). Ella una tarde muy calurosa decidió echarse un rato a dormir y el devoto decidió ponerse a su lado para que mientras ella durmiese abanicarla. Pensó hacerlo, se dijo a sí mismo, hasta que ella le dijese que parase. Estuvo un buen rato abanicándola y cuando se cansaba de hacerlo con una mano pasaba el abanico a la otra y continuaba. Pero llegó un momento en que estaba ya cansado y la santa no se despertaba para decirle que ya era suficiente. Cientos de pensamientos empezaron a pasarle por la mente y hasta llegó a enfadarse consigo mismo por haber tomado tal decisión. Y así continuó abanicando pero ya molesto consigo mismo y algo de mal humor. Pero llegó un momento en que estos mismos pensamientos fueron bajando de intensidad y entonces renovó su intención primera de abanicar a la santa con todo su amor y dedicación y, justo en ese mismo momento, ella abrió los ojos y le dijo que parase.**
Como las personas en su mayoría sólo tienen experienciado lo material y su realidad sólo tiene que ver con el cuerpo físico y todo lo concreto del plano lineal, su campo de entendimiento e intuición es muy limitado.
Cuando se hacen las cosas desde el “debería” y no desde el corazón, la mente está dividida y crea conflictos.
Es justamente el vivir apegado al mundo material lo que crea limitación y falta de libertad. Porque la Libertad se vive y siente precisamente cuando conectamos con nuestra Alma y sólo dependemos de nuestra fuerza espiritual.
Vivir desde nuestra Alma es vivir desde la INTUICIÓN y desde la INTENCIÓN.
¿Qué tiene de especial una persona espiritual? Su INTENCIÓN. Su Fuerza de Voluntad. Su Fuerza de Voluntad es Una con el Poder de Dios.
Vivir conectado con el Alma es vivir desde la auto-suficiencia. Es vivir en sincronicidad con las Fuerzas Cósmicas. Con las diferentes dimensiones en las que se mueve.
Si tu Mente está en Paz cogerá la energía de tu Alma. El Alma es tu Conciencia y ella está conectada con la Naturaleza y con el Universo. Dios es tu Alma. Tu Espíritu es Dios.
Tener FUERZA DE VOLUNTAD es tener la habilidad para hacer todo cuanto debes hacer y de ser quien eres en todo momento. La Fuerza de Voluntad trabaja con la Fuerza del Alma.
RESPÉTATE Y CONFÍA EN TI .- Vivimos cómodamente y nadie quiere salir de esa comodidad y por eso mismo tenemos una Voluntad débil. Para desarrollarla es mejor decidir y actuar. Si dudas no pasará nada. Si dices “voy a intentarlo” no lo vas a hacer (vas a encontrar todas las razones para posponerlo)
La técnica respiratoria es muy importante, sobre todo la fase de pausa respiratoria, ¿por qué razón? Porque cuando tú respiras lentamente y haces una pausa en la inspiración, la energía del inconsciente y el subconsciente sale a flote, es decir se pregunta ¿qué pasa aquí que no están respirando? En ese momento el inconsciente hace aflorar a la consciencia una parte a la que no habíamos tenido acceso, de la que éramos víctimas pero que no habíamos reconocido nunca en la vida, y en ese momento podemos dialogar con el subconsciente y podemos sacar nuestras heridas más profundas. Cuando hacemos eso podemos ir más lejos, así es como actuamos para la autosanación.
Yo puedo decirme, por ejemplo, ¿de dónde viene esta alergia?, si tengo una alergia y quiero librarme de ella. La alergia es algo que rechazo, un virus, una bacteria, un hongo, el frío, el calor, pero eso no es del todo cierto, eso es quedarnos muy cortos. No hay personas que sean alérgicas sólo al frío, las personas alérgicas al frío también tienen miedo a la soledad, tienen miedo al frío del alma, al frío en los sentimientos, a la frialdad del papá o de la mamá, al desafecto, es decir, el frío es simplemente un símbolo. Cuando yo soy alérgico a algo, hay algo que rechazo o que temo.
Entonces si quiero cambiar mi alergia, reconozco mi alergia. Si sé que no reconozco mi alergia porque me hace sentir vergüenza, entonces trabajo con la vergüenza: ¿qué cosas en la vida me evocan vergüenza? Luego experimento el sentimiento de la vergüenza y veo como experimento la vergüenza, a veces me pongo pálido y frío, otras veces me pongo rojo como un tomate, otra lo experimento como un vacío o como un hueco a nivel del plexo solar, la puedo experimentar de muchas maneras. Dónde y cómo experimento la alergia, me da una idea de la parte de mi energía que está comprometida. Vamos a ver otro sentimiento, el miedo, yo diría que la mitad de nuestros lumbagos son por miedo.
El miedo provoca más lumbago que todas las hernias discales, todos los problemas articulares, todos los problemas de columna, porque el temor hace que metamos, literalmente, el rabo entre las patas, cerramos el esfínter anal interno, a ese nivel, hay un centro de energía muy importante y, nos cerramos a la vida, contraemos toda la musculatura lumbosacra, esa parte queda mal irrigada y nos dan unos lumbagos terribles, y ese lumbago es el nombre clínico del miedo.
Si logro reconocer el núcleo del miedo, si logro observar mi cuerpo y veo que tengo los glúteos y toda esta parte contraída, si logro respirar hacia esa zona y liberar el sentimiento del miedo, y llamar al miedo y decirle «tú eres la mejor parte de mi mismo, cuando asciendes y te revelas, eres mi prudencia, ya no eres miedo, sino que eres prudencia, eres parte de mi amor también». Cuando yo, a través de la respiración, logro ascender esa energía del miedo, y logro transmutarla al altar del corazón, que es donde realmente nace el hombre que puede sanarse y puede sanar la vida, entonces desaparece el lumbago.
Mi resentimiento, mi odio, frecuentemente, está anclado en mis articulaciones. Yo estoy así totalmente rígido. A veces, con el puño apretado en la noche, inconscientemente, dispuesto a pegar y a agredir. Pues bien, ese dolor articular, es resentimiento congelado en esa parte del cuerpo.
Si logro experimentar ese dolor y asociarlo a mi sentimiento de ira y a mi resentimiento, y logro comprender que mi resentimiento es algo que se construye en el plexo solar, que bloquea la energía aquí y no permite a la energía acceder a mi corazón, ni a mi sistema inmune, puedo hacer mucho más que el reumatólogo, o puedo ayudarle mucho, para curar y sanar mi artritis, y yo soy responsable, no tengo que esperar que el reumatólogo me resuelva el problema. La enfermedad me pide atención, no es el problema del médico, es mi responsabilidad, mi cuerpo físico, mental y emocional tienen que ver con ella. La medicina occidental es una ciencia que sólo atiende la parte física; los síntomas. Prestemos atención al lenguaje del cuerpo; la enfermedad comienza en nuestro cuerpo emocional.
Ayer tarde se rompió la armonía. Bastaron tres frases intercambiadas con rabia para hacer temblar la paz.
¿Sobre que fundamentos hemos plantado nuestra relación? ¿Es el amor que compartimos lo suficientemente fuerte, respetuoso por el otro y desinteresado? Parece que no.
Bajo el disfraz de nuestro personaje cuánta rabia y reproches se esconde?
¿Somos espíritus libres?
Si así fuese no haríamos saltar por los aires el amor que decimos nos tenemos.
Los espíritus libres -que quisieramos ser- no tienen ego. Se mueven y fluyen con todos los elementos sin que les altere. ¡Cuánto nos engañamos a nosotros mismos!
Permanezco en Dios! Procuro cumplir con mi deber y hacer lo correcto según mi Conciencia. Reconozco todo lo que me falta por mejorar y estoy dispuesta a ello.
Ese es mi lema mientras navego en un océano a veces en calma y a veces con tormentas.