La percepción de uno mismo

¿Qué pensabas, que no iba a tener final el sufrimiento? ¿Que no iba a tener recompensa tu esfuerzo? ¿Que lo correcto y la verdad no asomarían nunca para hacerse valer en ti?

Iniciamos nuevas formas de pensamiento y acción. Nos sacudimos de encima lo viejo e inútil. Nos reconstruimos. Corregimos el rumbo. Aprendemos.

Alertas pero sin miedo. Cautos pero decididos a aceptar desafíos.

Somos llevados al máximo de tensión para que reaccionemos y nos alistemos al cambio; no hay tantas opciones; ser nosotros mismos o esclavos voluntarios al sufrimiento.

El Amor -esa energía pura sublime- es la gran experiencia que se nos brinda ahora. Estamos sintiendo los cambios, consciente o inconscientemente. Los conflictos, las crisis de ansiedad y miedo, nos avisan de la llegada de la tormenta emocional; veámosla venir y enfrentémoslas con decisión y calma.

Se levantarán los velos y sólo será posible ser auténticos con nosotros mismos. No convirtamos el dolor en sufrimiento. Podemos crear nuevas formas para sentirnos felices y en paz con nosotros mismos: amándonos.

Deja un comentario